1.3) La organización política y económica. La organización social. La cultura y el arte
Mientras duró la dependencia del califato Damasco el máximo mandatario era el walí o gobernador. Con Abderramán I, a partir de 756, se hablará de emir o rey.
El territorio de Al-Ándalus se dividía en coras, al frente de las cuales había un visir. Las ciudades musulmanas tenían una activa vida comercial y artesanal.
Introdujeron nuevos cultivos como el arroz, frutales y cultivos industriales como el algodón, seda, caña de azúcar, morera, plantas aromáticas y las palmeras. También introdujeron nuevas técnicas en los cultivos y en los sistemas de riego (noria, acequia y alberca son palabras árabes). Ganadería caballar, producción de miel y de gusanos de seda serán sectores importantes. Por otro lado, en cuanto a producción artesanal era importante la producción de paños de seda, la orfebrería y el cuero (cordobanes y guadamecíes cordobeses). Todo ello se comercializaba en los zocos y alcaicerías, mente dentro de la medina, aunque las afueras o arrabales también adquirieron importancia ante el crecimiento de la población Tanto la producción artesanal, agrícola o ganadera, así como en su plasmación en la cocina, todavía hoy día está impregnada Andalucía. La organización social era compleja. Aparte de árabes y bereberes nos encontramos con sirios y eslavos (que llegaron como esclavos dentro de los musulmanes). Los mozárabes serán cristianos viviendo en territorio islámico. Los judíos vivirán en las juderías, como las de Córdoba o Toledo, que con otras muchas forman hoy día parte de la Red de Juderías de España. Todas las esferas de la vida cotidiana se dictan en el Corán o libro sagrado. En cuanto a la cultura, el árabe es la lengua oficial. En el arte utilizan el arco de herradura, prohíbe un arte de gran riqueza decorativa. Los edificios la representación de figuras animales y humanas, y e principales son la mezquita y el palacio, y a nivel defensivo, la alcazaba y la torre albarrana o torre vigía.
EL DESCUBRIMIENTO DE AMÉRICA
Colón, que había estado mucho tiempo en Portugal conocía bien las aguas del Atlántico y los vientos alisios. Presenta el plan de buscar un camino hacia el oeste para llegar a las Indias, partiendo de la teoría de que la tierra era redonda. Para ello firma las capitulaciones de Santa Fe con los Reyes Católicos tras la conquista de Granada, nombrado almirante de la Mar Océana -Atlántico-, virrey de las tierras que se descubrieran y otorgándole 115 de las riquezas que obtuviera. El 3 de Agosto parte del puerto de Palos-Huelva- al frente de la nao capitana Santa María, siendo las carabelas Pinta y Niña pilotadas por los hermanos Pinzón. El 12 de Octubre de 1492 tocó tierra en la isla de Guanahaní, que ellos llamaron de San Salvador, en el archipiélago de las Bahamas. Después exploraron Cuba y Santo Domingo. En cuanto a las repercusiones del descubrimiento de América, destaca el fuerte impacto en ias relaciones políticas, sociales y culturales de Europa. El Papa concederá a Castilla la soberanía sobre las tierras conquistadas con el fin de que las cristianiza. Por el Tratado de Tordesillas de l494, una línea a 370 leguas de las islas Azores, dividirá el mundo el dos: el oeste de esta línea será para España, el este para Portugal. Con ello, una parte de lo que hoy es Brasil formaría parte del Imperio portugués. Se promulgarán las leyes protectoras del gracias a la defensa que de ello hace el fraile Bartolomé de las indias negaban la condición humana de los indios El Casas, frente a los que incluso descubrimiento también dio satisfacción a la curiosidad científica y geográfica por un territorio nuevo. Y respecto a las repercusiones económicas, el centro de actividad mercantil e se trasladó desde el Mediterráneo al Atlántico, a puertos como Amberes, y llegarán nuevos productos como la el tomate, maíz, tabaco o cacao patata, En Andalucía, el descubrimiento traerá un gran auge económico y poblacional, sobre todo en Sevilla, sede de la Casa de Contratación que regulaba todo el comercio con América, y al monopolio de su puerto en el Guadalquivir para realizar ese comercio. Sin embargo, el oro y la plata americanas destínó más a adquirir tierras, casas o bienes de consumo, y a pagar las guerras en las que estaban inmersas los reyes españoles en Europa, y no se destínó a inversiones productivas. Fue una gran oportunidad perdida para sentar las bases de un firme desarrollo.