Patrimonio de Carlos V

Carlos V heredó un vasto imperio. De su abuelo paterno, Maximiliano I, recibió la corona de Austria y el título de Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico tras su muerte en 1519. De su abuela paterna, María de Borgoña, heredó los Países Bajos, Luxemburgo y el Franco Condado. De su abuelo materno, Fernando el Católico, recibió la corona de Aragón, el reino de Nápoles, Cerdeña y Sicilia. Finalmente, de su abuela materna, Isabel la Católica, heredó la Corona de Castilla, con territorios como Navarra, las plazas norteafricanas y, lo más importante, América.

Conflictos: Comunidades y Germanías

Durante el reinado de Carlos V, se produjeron dos importantes revueltas: la de las Comunidades y la de las Germanías. Las Comunidades, protagonizada por ciudades del interior de Castilla, tuvo un carácter político, buscando imponer condiciones al monarca. Las Germanías, por otro lado, fueron hermandades armadas creadas por los gremios en Valencia y Mallorca. Como consecuencia de ambas revueltas, los señores y las oligarquías urbanas reforzaron su poder, se decretó la expulsión de los mudéjares (muchos de los cuales se convirtieron al cristianismo, pasando a ser conocidos como moriscos), y la monarquía se consolidó como la gran vencedora.

Política Exterior de Carlos V

La política exterior de Carlos V se centró en la defensa de su vasto patrimonio dinástico. Constantemente en guerra contra el rey de Francia, el sultán del Imperio Otomano y los príncipes alemanes, financió sus campañas con el oro y la plata procedentes de las Indias. Esta política resultó en la hegemonía de los Habsburgo en Italia y un considerable prestigio militar.

La Monarquía Hispánica de Felipe II

Tras la abdicación de Carlos V, su hijo Felipe II heredó la lucha por la hegemonía en Europa y la defensa de sus territorios. Felipe II estableció su corte en Madrid, hispanizó su política, sustituyendo la política universal por la confesional, y aumentó el autoritarismo político y religioso.

Política Internacional y Unión Ibérica

El foco de interés se desplazó hacia el sur y el Atlántico. En el Mediterráneo, la prioridad fue la defensa contra el Imperio Otomano, culminando en la victoria de Lepanto en 1571. Los Países Bajos se rebelaron durante ochenta años debido a la política represiva contra los calvinistas. La guerra con Inglaterra y la unión con Portugal (que proporcionó un puerto en el Atlántico) marcaron este periodo.

Modelo Político de los Austrias

Instituciones: Se continuó el modelo de los Reyes Católicos, consolidando el sistema de gobierno por consejos. Aumentó el poder de los secretarios del rey y se mantuvo la delegación del poder en virreyes y gobernadores. Financiación: A pesar de los crecientes ingresos, los enormes gastos llevaron a la Corona a endeudarse y a la quiebra.

Conquista, Gobierno y Administración de América

• Conquistas antillanas: Comenzaron con el sometimiento de La Española, seguido por Cuba y el resto de las Antillas.
• Conquistas continentales: Destacan la del Imperio Azteca por Hernán Cortés y la del Imperio Inca por Francisco Pizarro.
• Conquistas interiores: Se completó la conquista de América y se exploró el Pacífico.

Siglo XVII: Crisis Demográfica

La población española se estancó, con Castilla como el reino más afectado. Los factores que contribuyeron a esta crisis fueron las sucesivas crisis de subsistencias, epidemias, guerras y la expulsión de los moriscos.

Los Gobiernos de los Validos y la Crisis de 1640

El poder de los validos residía en la confianza del rey. Este sistema de gobierno distanció al rey de sus vasallos. La reforma del Conde-Duque de Olivares, con ambiciosos objetivos fiscales, pretendía que los reinos no castellanos aumentaran sus contribuciones, dejando a Cataluña al margen. Esto provocó la rebelión en Cataluña en 1640, donde los sublevados ofrecieron el condado de Barcelona a Luis XIII de Francia. Portugal, sintiéndose desprotegida por España, también se rebeló en 1640. En 1643, Felipe IV destituyó al Conde-Duque de Olivares.

Últimas Sublevaciones y Debilitamiento del Poder Monárquico

En 1643, se produjeron alborotos en la Corona de Aragón y Valencia. En 1647, hubo un motín en Palermo y una sublevación en Nápoles, seguidos de disturbios en Andalucía. La aristocracia recuperó poder, surgiendo un neofeudalismo. Juan José de Austria dio un golpe de estado, proclamándose primer ministro. Carlos II dejó la corona al nieto de Luis XIV, lo que desencadenó la Guerra de Sucesión.

El Sistema de Westfalia: Fin de la Hegemonía Española

Durante el reinado de Felipe III, se firmó la paz con Inglaterra. El Conde-Duque de Olivares, buscando restaurar el prestigio militar de España, cooperó con los Habsburgo de Viena, lo que involucró a España en la Guerra de los Treinta Años.