Causas de la Guerra
El conflicto se desencadenó cuando el Mariscal Francisco Solano López, presidente paraguayo, decidió acudir en ayuda del gobierno del Partido Blanco del Uruguay, en guerra civil contra el Partido Colorado, apoyado militarmente por Brasil. López advirtió a los gobiernos de Brasil y Argentina que consideraría cualquier agresión al Uruguay, pero tropas imperiales invadieron territorio uruguayo en octubre de 1864.
- El 12 de noviembre de 1864, en represalia por la invasión brasileña al Uruguay, el gobierno paraguayo se apoderó de un buque mercante brasileño y del gobernador de la provincia brasileña de Mato Grosso, donde se inició la guerra.
- Población brasileña se estableció en Uruguay y, uniéndose al general Flores con fuerzas terrestres y navales, lograron el triunfo definitivo después de la toma de Paysandú.
- La situación creada por la actitud diplomática del gobierno Blanco del presidente Anastasio Aguirre, solicitando la intercesión del gobierno paraguayo en la solución del conflicto entre Brasil y Uruguay, y denunciando además la existencia de un tratado secreto entre Brasil y Argentina para repartirse los territorios de Paraguay y Uruguay, determinó el reclamo imperioso de Francisco Solano López a los gobiernos de Brasil y Argentina.
- La negativa del gobierno argentino a acceder a lo solicitado por el presidente López para transitar territorio argentino y atacar a Brasil, basada en una estricta neutralidad.
- La declaración de guerra del Paraguay a la Argentina y la invasión de tropas de ese país a territorio argentino, con el ataque al puerto de Corrientes y la captura de dos barcos argentinos en abril de 1865.
Desarrollo de la Guerra (1865-1870)
López inició las acciones contra Brasil capturando el vapor Marqués de Olinda el 11 de noviembre de 1864. En 1865 se declaró la guerra a Argentina.
La Ofensiva Paraguaya
López inició operaciones hacia el norte, invadiendo Mato Grosso. A mediados de abril, las tropas paraguayas invadieron Corrientes, avanzando por los ríos Paraná y Uruguay.
La Triple Alianza
El 1 de mayo de 1865, Rufino de Elizalde (Ministro de Relaciones Exteriores de Argentina), Octavio Almeida de Rosa (Brasil) y Carlos de Castro (Uruguay) firmaron el Tratado de la Triple Alianza. Se puntualizaba allí que la guerra sería contra el gobierno del Paraguay y no contra el pueblo. El tratado establecía ventajas territoriales para los estados firmantes. Paraguay contaba con un poderoso ejército, armas modernas y manufacturas de guerra, podía poner en armas a 60.000 hombres y contaba con vapores de guerra tripulados por marinos ingleses.
Las Operaciones en el Litoral (1865)
El 17 de septiembre de 1865, una parte de las fuerzas paraguayas al mando de Estigarribia se rindió en Uruguayana (localidad brasileña) a los aliados encabezados por Mitre (jefe de la Triple Alianza). Cerca de 30.000 hombres había empeñado López en esta ofensiva y, tras su derrota, debió ordenar su repliegue.
Las Luchas en Territorio Paraguayo
Paraguay se limitó a una desesperada acción defensiva que solo prolongaron el coraje de sus soldados y la sequía y despotismo de López, confiado en su eficaz sistema de fortificaciones. Se sucedieron así otras batallas: Estero Bellaco (mayo 1866), Boquerón y Sauce (junio 1866).
Curupaytí: el 22 de septiembre de 1866, un asalto frontal contra las trincheras paraguayas que guarecían aquella fortaleza terminó en un desastre. El bombardeo naval de la escuadra brasileña al mando del almirante Tamandaré no hizo mella en los atrincheramientos del enemigo, y las tropas dirigidas por Mitre sufrieron un duro revés: solo el ejército argentino perdió más de 5.000 hombres.
El Fin de la Guerra
El 5 de enero de 1869, cuando Sarmiento ya gobernaba Buenos Aires, las fuerzas de la Triple Alianza entraban en Asunción. López, dispuesto a no rendirse, había comenzado una retirada hacia el norte, Cerro Corá, seguido por una escasa y desnutrida tropa de 2.000 hombres, 20 piezas de artillería y el resto de un pueblo abnegado y enfermo, afectado por el hambre. Este peregrinaje se prolongó hasta el 1 de mayo de 1870, día en el que el Mariscal López, al mando de un grupo de 400 hombres, fue atacado por una columna brasileña al mando del general Caimará. La guerra, que había generado un verdadero genocidio, había terminado.
Consecuencias de la Guerra
- Las negociaciones diplomáticas entre los gobiernos firmantes de la Triple Alianza se iniciaron después del cese de hostilidades para poner término oficialmente a la contienda.
- Brasil adoptó una drástica acción y ocupó mayor cantidad de territorios que los acordados.
- La República Argentina también ocupó una vasta región del Chaco, pero la cancillería, por medio del ministro Mariano Varela, estableció la «Doctrina Varela», que decía que la victoria no da derecho a las naciones aliadas para declarar por sí límites suyos.
- Paraguay quedó arrasado. La guerra produjo la muerte de las tres cuartas partes de la población.
- Argentina logró que Paraguay le reconociese el territorio de Formosa y parte de Misiones.
- En lo económico, todos los países involucrados fueron perdedores, ya que para financiar los gastos militares debieron endeudarse con la banca europea.