Contexto Histórico
El Proyecto de Constitución de 1873 es un texto jurídico elaborado durante la I República Española (1873-1874). A pesar de no entrar en vigor debido a la corta duración de la República, este documento refleja las intenciones y los desafíos de este período histórico.
Su elaboración fue llevada a cabo por una comisión parlamentaria surgida de las elecciones por sufragio universal masculino a las Cortes Constituyentes, convocadas por Figueras tras la dimisión de Amadeo de Saboya. Castelar, último presidente del gobierno durante la I República, también tuvo un papel importante en su creación.
Objetivos del Proyecto
El principal objetivo de esta Constitución era dotar al Estado español de nuevas leyes, reemplazando la Constitución de 1869, de carácter democrático. La intención de establecer un Estado federal queda claramente reflejada en sus artículos:
Artículos clave:
- Art. 1 y 39: Proclaman el estado federal y enumeran las ciudades españolas que podrían convertirse en Estados, incluyendo a Cuba y Puerto Rico, a las que se les otorgaba la misma autoridad y autonomía para evitar su independencia.
- Art. 92: Otorga completa autonomía a cada estado en los aspectos económicos, administrativos y políticos, siempre que fueran compatibles con la Nación.
- Art. 93: Permite a cada estado elaborar una legislación propia, sin contradecir la Constitución.
Estas disposiciones tuvieron como consecuencia el auge del movimiento cantonal, en el que diversas zonas de España se declararon autónomas, sin reconocer al orden central.
Características del Proyecto
Además de los poderes tradicionales, la Constitución proponía la figura del Presidente de la República. Los derechos individuales se detallaron de forma similar a la Constitución de 1869, y se estableció la separación Iglesia-Estado.
Inestabilidad de la I República
La I República se proclamó tras la abdicación de Amadeo de Saboya, en un contexto de guerras civiles, el frente carlista y las revoluciones independentistas en Cuba y Puerto Rico. A pesar de que la Constitución de 1869 prohibía la reunión del Congreso y Senado, estos se reunieron en la Asamblea Nacional para proclamar la República Federal, basada en la Constitución de 1869, los ideales revolucionarios y las juntas de 1868.
La inestabilidad política fue una constante durante la I República. Los republicanos eran minoría en las Cortes, existían divisiones ideológicas internas, y en un solo año se sucedieron cuatro presidentes: Figueras, Pi y Margal, Salmerón y Castelar.
El movimiento cantonal, la lucha contra la revuelta social y las conspiraciones militares marcaron el gobierno de Castelar, quien finalmente fue derrotado en una votación en el Congreso. El General Pavía disolvió las Cortes, y el General Serrano asumió el poder, llevando a cabo una política de orden.
Fin de la I República
Las fuerzas de derechas se inclinaron hacia la monarquía como modelo de estabilidad para poner fin a los conflictos internos y externos. El Manifiesto de Sandhurst, escrito por Antonio Cánovas del Castillo y apoyado por el futuro Alfonso XII, allanó el camino para la restauración borbónica. El General Martínez Campos proclamó rey a Alfonso XII en Sagunto, poniendo fin a la I República.