El Gobierno de Adolfo Suárez: Transición a la Democracia

El reinado de Juan Carlos I comenzó con el nombramiento de Adolfo Suárez como presidente del Gobierno. A pesar del escepticismo inicial, este gobierno logró desmantelar las estructuras políticas y sindicales del régimen anterior e instaurar la democracia en España.

Primeros Pasos hacia la Democracia

En noviembre de 1976, las Cortes franquistas aprobaron la Ley para la Reforma Política, que establecía unas Cortes bicamerales elegidas por sufragio universal. En diciembre, un referéndum popular aprobó mayoritariamente el programa de reformas del Gobierno. Los partidos políticos comenzaron a operar con mayor libertad, el PSOE aceptó la monarquía y el PCE fue legalizado en abril de 1977.

Las elecciones generales del 15 de junio de 1977 dieron la victoria a la Unión de Centro Democrático (UCD), liderada por Adolfo Suárez.

Tres Retos Principales

Suárez se enfrentó a tres tareas fundamentales:

1. Resolver la crisis económica iniciada en 1973.
2. Aprobar una nueva Constitución.
3. Solucionar el problema regional.

Solución a la Crisis Económica

Para abordar la crisis económica, se implementó el Plan de Saneamiento y Reforma de la economía, basado en una «economía social de mercado». Se buscó el consenso con la oposición a través de los Pactos de la Moncloa, firmados el 25 de octubre de 1977.

Elaboración y Aprobación de la Constitución

El segundo gran logro fue la elaboración y aprobación de la Constitución. Una comisión representativa de todas las fuerzas políticas redactó un anteproyecto, que fue aprobado por las Cortes con amplio consenso. Tras su aprobación en referéndum el 6 de diciembre de 1978 con el 88% de los votos, la Constitución fue sancionada por el rey el 27 de diciembre del mismo año.

La Constitución Española de 1978

Valores y Principios

1. Carácter progresista: Sus principios programáticos destacan por su carácter progresista y su capacidad para facilitar la convivencia pacífica y un futuro mejor.
2. Consenso: Su imprecisión y ambigüedad, paradójicamente, permitieron el acuerdo entre los partidarios de la reforma y los de la ruptura.

Derechos y Deberes Constitucionales

La Constitución define a España como un «Estado social y democrático de derecho».

1. Libertades ciudadanas: El Estado debe respetar y amparar las libertades ciudadanas, garantizando su acceso igualitario para todos.
2. Justicia social: Derecho a una justa distribución de la riqueza, que evite las grandes desigualdades. Derecho a un trabajo digno, formación adecuada y pensión suficiente.
3. Participación política: Derecho a participar libremente en la vida política a través de partidos políticos, asociaciones y elecciones.
4. Libertad e igualdad: El Estado debe garantizar la libertad e igualdad, la ausencia de privilegios y el cumplimiento de los deberes y responsabilidades (pagar impuestos, ser tolerante, etc.).
5. Pluralismo político: Se garantiza la libertad de pensamiento y expresión, así como la multiplicidad de fuerzas políticas.
6. Libertad de mercado: Derecho a la propiedad, a crear una empresa y a la libre competencia.
7. Derecho de ciudadanía: La nacionalidad española es un derecho fundamental e irrenunciable.

Instituciones y Organismos del Estado Español

1. La Corona: El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de la unidad de España, árbitro y moderador del funcionamiento de las instituciones, con un papel importante en las relaciones internacionales.
2. Las Cortes Generales: Representantes del pueblo español, formadas por el Congreso de los Diputados y el Senado. Ejercen la potestad legislativa y controlan la acción del Gobierno. Cualquier ciudadano puede ser elegido diputado o senador.
3. El Gobierno: Ejerce la función ejecutiva y la potestad reglamentaria. Compuesto por el presidente y sus ministros, pudiendo haber uno o varios vicepresidentes.