Historia de Al-Andalus: Desde la Conquista Musulmana hasta la Desintegración del Califato

La Conquista Musulmana y el Fin de la Monarquía Visigoda (711)

Tras la muerte del rey Vitiza, su hijo Agila II fue nombrado sucesor, pero la nobleza y el clero designaron a Rodrigo. Los hijos de Vitiza, en su huida, pidieron ayuda a los musulmanes. En 711, Tariq desembarcó en Algeciras con un contingente de 7,000 hombres. Tras la derrota de Rodrigo en la Batalla de Guadalete, los musulmanes, al percatarse de la debilidad del estado visigodo, ocuparon rápidamente la península. Tariq, al llegar a Toledo, no cedió el poder a los hijos de Vitiza, sino que les otorgó tierras, marcando el fin de la monarquía visigoda en la Península Ibérica. Nuevas campañas les permitieron conquistar Zaragoza y Barcelona. La facilidad de la conquista se atribuye a la crítica situación de la monarquía y la poca resistencia de la población, sumida en penurias económicas y sociales. Los musulmanes mostraron tolerancia hacia los cristianos mediante acuerdos:

  • Pacto de AHD: De mutuo acuerdo, los cristianos pagaban impuestos personales y territoriales, siendo considerados dhimmis.
  • Pacto de SUHL: Capitulación tras la resistencia cristiana.

A los hispanovisigodos conversos se les denominó muladíes.

El Valiato (711-756)

Abd-al-Aziz (714-716)

Estableció la capital en Sevilla e impulsó la conquista hacia el este, oeste y sur de la Península Ibérica. Se incorporaron mujeres y niños a la población, adaptando iglesias a mezquitas. Su política, más exitosa entre los conquistados que entre los árabes, suavizó las disputas internas, aunque fue acusado de parcialidad hacia los cristianos al casarse con una pariente de Rodrigo. Los árabes ocuparon los cargos más importantes y los latifundios, mientras que los bereberes se asentaron en zonas más pobres, dedicándose a la agricultura. Tras su muerte, hubo 21 gobernadores. La dinastía omeya, en crisis, descuidó Al-Ándalus, lo que provocó guerras y derrotas (Covadonga, Tolosa, Poitiers).

Ayyub (716-721)

Trasladó la capital a Córdoba. Hacia 730, la llegada de árabes exigiendo tierras, ya repartidas, llevó al sistema de jums, otorgando 1/5 de las tierras del califa en usufructo (iqta). La revuelta bereber de 741 provocó el envío de tropas desde Damasco, a quienes se les asignó 1/3 de lo que entregaban los dhimmis y tierras en el Guadalquivir.

El Emirato Independiente (756-929)

En 756, Al-Ándalus, gobernado por los Omeyas, se separó políticamente del Imperio Musulmán. Abd-al-Rahmán I, único superviviente de la masacre omeya de 750, se refugió entre bereberes, derrocó al valí y se proclamó emir. La doctrina malikí, basada en el Corán y la Sunna, limitó la creatividad. Al-Ándalus se dividió en 22 coras, con gobernadores militares, y se establecieron fronteras o marcas (Zaragoza, Toledo, Mérida). Se construyeron fortalezas y torres. El emir, buscando la lealtad, enfrentó rebeliones (Motín del Arrabal, Jornada del Foso).

Abd-al-Rahmán II (822-852)

Etapa con menos conflictos, aunque surgieron la primera fitna y revueltas fronterizas:

  • Muladíes: Buscaban recuperar privilegios (Omar Ben Hafsun).
  • Mozárabes: Protagonizaron disturbios tras el asesinato de un miembro por blasfemia (Obispo Eulogio, Paulo Álvaro).

Se estableció un aparato administrativo en Córdoba (hachib, visires, qa’id, qa’dí). Se revitalizaron ciudades (Calatrava, Uclés, Alcalá), se construyeron murallas, alcazabas y arrabales, y se establecieron cargos como el sahib al-madina y el sahib al-suq.

El Califato Omeya de Córdoba (929-1031)

Abd-al-Rahmán III (912-961)

Frenó el avance cristiano y pacificó Al-Ándalus. Las aceifas, campañas anuales de saqueo, buscaban botines. En 929, se proclamó califa, uniendo el poder militar y civil al religioso, oponiéndose al Califato Fatimí. La economía prosperó. Se restauraron edificios y se fundó Medinat al-Zahra.

Al-Hakam II (961-976)

Continuó las aceifas. Personaje culto.

Hixam II (976-1009)

Individuo apocado y con pocas pretensiones. A partir de ahora, pese a que los califas no desaparecen y se siguen sucediendo, el poder es tomado por Almanzor.

AlmanzorHabía ganado importancia en Córdoba como jefe de la ciudad (sahib al-madina), y llegó a la corte de Hixam II como administrador. Finalmente asumió el gobierno de Al-Andalus:Construye Medina Zahira, donde establece su corte.Reactiva la actividad militar frente a los territorios cristianos. Llegaron eslavos, y algunos pasaron a engrosar el ejército. Las campañas fueron constantes, asediando casi todas las ciudades desde Barcelona hasta Santiago.Económicamente no fue un periodo tan estable.Muere en 1002 en la Batalla de Calatañazor.

Sus hijos (dinastía de los amiríes) quisieron superarle, pero no fue posible. La situación era muy inestable: II fitna y diferentes califas que se suceden e incluso coinciden en el poder (hasta 1031).

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