Los Reyes Católicos: La Construcción del Estado Moderno en España

El Origen del Estado Moderno

La Unión Dinástica. Integración de Castilla y Aragón

En 1469 se celebra el matrimonio entre Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, que por aquella época todavía no eran reyes. Con la subida al trono de ambos, Isabel I (1474-1504) y Fernando II (1479-1516), nace la Monarquía Hispánica. Los distintos territorios que la forman solo tienen en común la monarquía, ya que cada reino conserva sus leyes, instituciones y costumbres propias. Es una unión personal, no institucional, de las coronas de Castilla y Aragón, nunca una unión política y administrativa de ambos reinos. Así, los castellanos son extranjeros en Aragón y viceversa; cada reino conserva sus propias monedas, cortes y, en la frontera, las mercancías pagan derechos de aduanas. Pese a ello, el dominio de Castilla parece claro, tanto en población como en poder económico y militar. Parece que ambos reyes coincidían en la necesidad de una unificación territorial de los dos reinos en el futuro. Las leyes eran firmadas por ambos, con igual poder para cada uno («Tanto monta…»), acuerdo alcanzado en la Concordia de Segovia (1475) y reflejado en los documentos conservados: «Don Fernando y Doña Isabel por la gracia de Dios rey y reina de Castilla, de León, de Granada» (Tratado de Tordesillas, 1494, página 1). Nunca firman como reyes de España, que, en aquella época, era una comunidad de pueblos de la península Ibérica sin significado político.

La Organización Política (Instituciones de Gobierno)

Los Reyes Católicos crearon en sus reinos una monarquía autoritaria. Para que los reyes pudieran dirigir y controlar sus reinos, era imprescindible la creación de unos órganos de gobierno e instituciones:

• El corregidor (Castilla): Es el representante del rey en los ayuntamientos. Tiene funciones militares y judiciales y recauda los impuestos. Preside los ayuntamientos por encima de los alcaldes. Es una institución propia del reino de Castilla.
• Virrey (Corona de Aragón): Representantes de los reyes, con plenos poderes, en los distintos reinos y estados de la Corona de Aragón: Aragón, Cataluña, Valencia, Nápoles y Sicilia. Desde 1512 también se nombra uno para Navarra.
• El Consejo Real de Castilla: Especie de gobierno que asesora a los reyes. Es de carácter consultivo y está controlado por los secretarios reales reclutados entre la baja nobleza y la burguesía. Más tarde se crean otros Consejos Reales: Aragón, Navarra, Órdenes Militares e Inquisición.
• Las Audiencias o Chancillerías: Eran tribunales superiores de justicia. En Castilla hubo dos: Valladolid y Granada. También se crearon Audiencias en cada uno de los estados de la Corona de Aragón, pero por encima de ellas estaba el Justicia Mayor de Aragón.
• Hacienda: Institución que contaba con dos oficinas: la Contaduría Mayor de Hacienda, que se encargaba de recaudar los impuestos de los pecheros, y la Contaduría General de Cuentas y Resultas, que controlaba los ingresos y los gastos.
• La Santa Hermandad: Fundada en 1476, era una especie de policía que es la base del futuro ejército permanente: los tercios.
• Las Cortes: Eran estamentales y el poco poder que tenían lo fueron perdiendo con el paso del tiempo. Se reunían pocas veces, generalmente cuando los reyes necesitaban dinero. Había cortes en Castilla, Aragón, Cataluña, Valencia y Navarra.

Unificación Peninsular y Expansión Territorial

El objetivo principal de los Reyes Católicos era incorporar todos los reinos peninsulares a la Monarquía Hispánica. En general, Isabel se dedicaba a la política interior y Fernando a la exterior. Las fases de esta unificación son las siguientes:

• Conquista del reino nazarí de Granada (1482-1492): Una bula de Sixto IV (1482) declaraba la conquista como cruzada. La campaña fue muy complicada por lo montañoso del terreno y la resistencia de los granadinos. La guerra terminó con la toma de Granada (2 de enero de 1492), poniendo fin a la presencia musulmana en la península tras ocho siglos.
• Recuperación del Rosellón y la Cerdaña (1493): Por el Tratado de Barcelona, los franceses devolvían pacíficamente dichos territorios (la «Cataluña francesa») a la Corona de Aragón, perdidos durante el reinado de Juan II.
• Conquista de las islas Canarias: La última isla anexionada fue Tenerife en 1500.
• Anexión de Navarra: En 1512 se produjo la ocupación militar del reino, hasta entonces bajo la influencia francesa. El reino fue incorporado a Castilla en 1515, pero conservando leyes e instituciones propias.
• Fracaso de la anexión de Portugal: En 1497 tiene lugar la boda entre Isabel, hija de los Reyes Católicos, y Manuel el Afortunado, rey de Portugal, con la intención de anexionarse la corona portuguesa. La unión fracasa al morir en 1500 el único hijo de ambos reyes, Miguel.
• Control de la costa africana: Para evitar nuevas invasiones fueron conquistadas una serie de plazas fuertes en el norte de África: Melilla (1497), Argel (1505), Orán, Trípoli.

Bases de la Política Imperial (Política Internacional)

El reinado de los Reyes Católicos puso las bases del gran imperio español del siglo XVI. Castilla seguía mirando hacia el Atlántico y Aragón hacia el Mediterráneo. El objetivo principal de la política exterior de los Reyes Católicos era aislar a Francia. Para conseguirlo basaron sus actuaciones en los siguientes ejes:

• Las alianzas: Establecieron alianzas con diversos estados que rodeaban a Francia, para así poder hacer efectivo dicho aislamiento: Inglaterra, Borgoña y el Vaticano.
• Guerras en Italia contra Francia: Italia se convirtió en el teatro de la rivalidad franco-española, sobre todo la lucha por controlar el Milanesado. Las tropas del Gran Capitán lograron conservar el reino de Nápoles para la corona aragonesa, siendo derrotados los franceses en varias batallas (Ceriñola, Gaeta). La lucha continuará en época de Carlos I.
• Una hábil política matrimonial: Los Reyes Católicos casaron a sus hijos con reyes o príncipes de estados europeos periféricos de Francia: Isabel con Manuel el Afortunado, rey de Portugal; Juana con Felipe de Borgoña; Catalina con Arturo de Inglaterra, etc. Esta política matrimonial será la base del gran imperio que heredará Carlos I.

Otro objetivo importante era la pacificación de las relaciones con Portugal, ya que Castilla y Portugal eran rivales en la expansión por la costa africana y en la conquista de América. Los tratados de Alcáçovas (1479) y Tordesillas (1494), firmados entre ambos países, logran resolver las diferencias, aunque siempre habrá pequeños conflictos, sobre todo en América. Por fin, los dos reinos llegaron a un acuerdo en el Tratado de Tordesillas (1494) por el que se repartían el mundo. El acuerdo es el siguiente: se trazó una línea, de polo a polo, situada a 370 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde; las tierras descubiertas al oeste de dicha línea serían para Castilla y las situadas al este para Portugal. Así, Castilla se quedó con casi toda América, excepto Brasil, que le correspondió a Portugal.