Transformaciones Políticas y Sociales en España: Primer Tercio del Siglo XX

La Dictadura de Primo de Rivera y la Caída de la Monarquía

El Golpe de Estado

Ante la crisis del sistema político de la Restauración, el capitán general de Cataluña consumó el golpe de Estado el 13 de septiembre de 1923. No hubo oposición al golpe por:

  • Malestar del ejército.
  • Indecisión del gobierno.
  • Desprestigio y profunda crisis del sistema.

Solo se opusieron los anarquistas y comunistas. Presentó la dictadura como transitoria y, curados los males del país, se volvería al régimen constitucional. La teoría de Joaquín Costa del “cirujano de hierro” anunció:

  • Destruir el caciquismo.
  • Poner fin al desgobierno.
  • Fin de la amenaza del separatismo.

El Directorio Militar (1923-1925)

Las primeras medidas

Se proclamó el estado de guerra. Se suspendió la Constitución de 1876. Disolvió las Cortes. Implantó la censura de prensa. Quedaron prohibidos los partidos y los sindicatos.

El orden público se impuso con una fuerte represión. Los nacionalismos y sus símbolos fueron perseguidos y prohibidos, considerados separatistas.

La reforma de la administración

Se creó una nueva administración con los gobernadores militares y los delegados gubernativos, también militares, sustituyendo ayuntamientos y diputaciones.

El caciquismo no desapareció, cambió de forma, persiguiendo a los no adictos (Estatuto Municipal, 1924). La desaparición de la Mancomunidad de Cataluña (Estatuto Provincial, 1925) fomentó el desarrollo del catalanismo más radical.

El conflicto de Marruecos

En 1925, una ofensiva militar franco-española permitió el desembarco de Alhucemas y la derrota de Abd-el-Krim. El protectorado quedó totalmente dominado en 1926.

El Directorio Civil (1925-1930)

Tras conseguir controlar el orden público y el problema de Marruecos, se inició el Directorio Civil (un sistema inspirado en la dictadura fascista italiana). Se rodeó de políticos de derechas como José Calvo Sotelo o Eduardo Aunós.

El fracaso de la institucionalización de la Dictadura

Se creó un partido único de derechas: La Unión Patriótica. Sin ideología definida, fue un instrumento de propaganda gubernamental.

En 1927, se convocó una Asamblea Nacional Consultiva para elaborar una constitución (de 400 miembros, 273 fueron designados por el gobierno). El Estatuto Fundamental de la Monarquía fue un fracaso porque no lo aceptaba nadie.

La política económica y social

Se caracterizó por el intervencionismo estatal y el nacionalismo económico (proteccionismo). Se crearon grandes monopolios estatales: CAMPSA, Compañía Telefónica.

Se fomentó una política de obras públicas (carreteras, embalses…). Esta política de gasto público no se acompañó de una reforma fiscal que aumentara los ingresos, lo que incrementó el déficit presupuestario y obligó a una emisión constante de deuda pública.

La escasa conflictividad social del periodo de la dictadura se explica por:

  • Represión de los anarquistas.
  • Política social del gobierno: construcción de viviendas baratas, creación de escuelas, servicios sanitarios.
  • Nuevo modelo de relaciones laborales: corporativismo con intervención del Estado en organizaciones obreras moderadas.

La base de la Organización Corporativa Nacional eran los comités paritarios: por oficios, con representación paritaria de patronos y obreros para resolver conflictos. Destacó la colaboración de los socialistas.

Creciente oposición y final de la dictadura

A partir de 1926, aparecieron diversos intentos de derrocar al dictador:

  • El conflicto militar: ante las reformas militares de Primo de Rivera (méritos de guerra), una parte del ejército se oponía al dictador.
  • La conspiración civil de los políticos dinásticos: fomentando un pronunciamiento militar.
  • La oposición intelectual: intelectuales, periodistas y universitarios, desde la Federación Universitaria Escolar y Unamuno, Blasco Ibáñez, Ortega y Gasset.

Creció la oposición política:

  • Republicanismo de izquierda (Alianza Republicana de Azaña).
  • Republicanismo conservador (Derecha Liberal Republicana de Alcalá-Zamora).
  • Insurrección separatista de Prat de Molló (Estat Català de Macià) que en 1931 creará la ERC.
  • En Galicia se formó la Organización Republicana Gallega Autónoma (ORGA) en 1929.
  • Los partidarios de la insurrección revolucionaria constituyeron en 1927 la Federación Anarquista Ibérica (FAI).

Falto de apoyos, Primo de Rivera presentó su dimisión en 1930.

La caída de la monarquía (1930-1931)

Tras la dimisión de Primo de Rivera, Alfonso XIII encargó nuevo gobierno al general Dámaso Berenguer. Con la intención de volver a la normalidad constitucional, se restablecieron las libertades políticas, disolvió la Asamblea Nacional… Pero la monarquía estaba desprestigiada y el republicanismo estaba en auge.

La oposición se organizó a través del Pacto de San Sebastián (1930): creación de un comité revolucionario con la intención de preparar una insurrección militar y civil (republicanos, nacionalistas catalanes y gallegos, socialistas).

La oposición intelectual creó la Agrupación al Servicio de la República (José Ortega y Gasset, Gregorio Marañón…).

La insurrección militar fracasó en Jaca por falta de coordinación.

El fracaso de Berenguer por restablecer el sistema constitucional provocó su sustitución por el almirante Aznar, que convocó unas elecciones municipales el 12 de abril de 1931. La victoria republicana en las grandes ciudades precipitó la caída de la monarquía.

El Impacto de la Primera Guerra Mundial en España

El gobierno conservador de Eduardo Dato se declaró neutral. Las preferencias de los españoles se dividieron en dos tendencias:

  • Los aliadófilos (liberales y democráticos).
  • Los germanófilos (vinculados a los conservadores).

La neutralidad favoreció una espectacular expansión económica, provocando una expansión industrial, una fuerte acumulación de capitales y un aumento imparable de los precios. Los salarios no subieron con tanta rapidez, provocando un descenso del nivel de vida de los obreros y una gran agitación social.

La crisis económica y social aceleró la descomposición del sistema de turno y la división de los partidos dinásticos.

La Crisis de 1917

En el verano de 1917, el sistema político de la Restauración pasó por su peor momento al confluir tres conflictos:

  • Crisis militar: las Juntas de Defensa. El descontento de los militares se debió a la reforma del gobierno para reducir oficiales y al sistema de ascensos que favorecía a los militares de África. Se organizaron a través de las Juntas de Defensa. El gobierno cedió a su presión por miedo a una sublevación y golpe de Estado.
  • Crisis política: la Asamblea de Parlamentarios. Ante la suspensión de las garantías constitucionales, la censura en la prensa y el cierre de las Cortes, Cambó, líder de la Lliga, convocó a los diputados a una Asamblea de Parlamentarios con el objetivo de realizar una reforma constitucional. El reducido apoyo y el rechazo por parte de las Juntas permitieron disolverla.
  • Crisis social: la huelga general de agosto. Ante la crisis económica provocada por la inflación y la agitación política, la UGT y la CNT convocaron una huelga general revolucionaria con el objetivo de implantar una república democrática. El ejército la reprimió con dureza.

Los Partidos Antidinásticos y el Movimiento Obrero

Los Republicanos

El republicanismo, que estaba muy fragmentado, representaba las aspiraciones de los intelectuales y sectores de clases medias a la democratización de la vida política. Una nueva generación de jóvenes quería reformar el proyecto republicano.

El impulso regenerador y unificador empezó en 1903 y se creó la Unión Republicana, auspiciada por Alejandro Lerroux y Nicolás Salmerón. Tenía dos posturas ideológicas y tácticas:

  • El republicanismo moderado y reformista, representado por Salmerón y Melquíades Álvarez, renunciaba a la vía insurreccional, apostando por la lucha electoral y parlamentaria.
  • El republicanismo radical (lerrouxismo), cuyo objetivo era integrar las reivindicaciones obreras y lanzarlas a un movimiento insurreccional para implantar la república. Tenía un discurso con populismo radical, demagógico y anticatalán. Muy similar fue el blanquismo en Valencia, bajo la dirección de Blasco Ibáñez.

En 1908, se formó el Partido Radical de Alejandro Lerroux. El republicanismo moderado creó el Partido Reformista de Melquíades Álvarez.

Regionalistas y Nacionalistas

Nacionalismo Catalán

El más relevante y con mayor influencia a principios del siglo XX. Dirigido por Cambó, ideólogo Prat de la Riba. Era el partido de las clases burguesas y conservadoras. Moderado, católico y reformista. Partidario de la modernización económica y regeneración de la vida política. Con reivindicación de autonomía para Cataluña. Practicó una política pactista y colaboracionista con el turno.

No conectó con los obreros por su catolicismo, su conexión con la burguesía y la ausencia de reformas sociales. El momento más decisivo para la evolución del catalanismo se dio con la Ley de Jurisdicciones (1906), por la que las ofensas a la patria y al ejército serían juzgadas por tribunales militares. Representó el éxito de la protesta de la sociedad catalana contra el intervencionismo militar.

Provocó la creación de una coalición electoral, Solidaridad Catalana (1907), que integraba a todas las fuerzas catalanistas. La Mancomunidad de Cataluña (1914) representó el reconocimiento de la personalidad de Cataluña. El catalanismo fue liderado por la Lliga en casi todo este periodo.

Nacionalismo Vasco

Tras la muerte de Arana, en el PNV se produce un duro enfrentamiento entre radicales y moderados. Un PNV más moderado (parlamentarismo y autonomía) se aproximaba a la burguesía industrial, manteniendo los principios aranistas y ampliaba sus bases. Se consolidará como la fuerza mayoritaria en el País Vasco.

Otros Nacionalismos

Apenas tuvieron desarrollo en el primer tercio del siglo XX: nacionalismo gallego, el valencianismo político y los regionalismos andaluz y aragonés.

El Movimiento Obrero

En la primera década del siglo XX, el movimiento obrero era muy débil por el retraso industrial. Las organizaciones, aún incipientes, se estructuraban en sociedades de socorro mutuo, de oficios y de resistencia. El movimiento obrero estaba dividido en dos corrientes:

Anarquismo

Hubo una negativa a participar en política y rechazaba el reformismo social. Hubo dos tendencias: los partidarios del sindicalismo y los partidarios de la estrategia terrorista. Se creó el sindicato Solidaridad Obrera (1907), con la huelga general como principal arma de lucha. La unificación del anarquismo se consolidó con la formación de la CNT (1910), que reafirmó la “acción directa”.

Socialismo

El PSOE y la UGT contaban con pocos afiliados. Tras la Semana Trágica, se inició la colaboración con sectores republicanos. Se formó la conjunción republicano-socialista (1909). En 1910, Pablo Iglesias es elegido diputado.

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