El Reino Visigodo y la Península Ibérica
Crisis del S.III d.C. El Imperio Romano sufre invasiones germánicas. Entran suevos, vándalos, alanos y visigodos como pueblo federado. Tras la caída de Roma, derrotados en Vouillé (507), se asientan en Toledo, declarando el primer estado independiente y unificado en la Península Ibérica. Se unifican varios niveles:
- Territorial: Con la conquista de Leovigildo a los suevos y la expulsión de bizantinos por el sur.
- Jurídico: Recesvinto/Chindasvinto recopilaron las leyes del Fuero Juzgo para visigodos e hispanorromanos.
- Religioso: Conversión de Recaredo al cristianismo en el III Concilio de Toledo (589).
- Político: Monarquía electiva. El poder del rey era asesorado por instituciones como el Aula Regia y el Officium Palatinum.
Destacan los concilios, instituciones que reunían a la alta jerarquía eclesiástica. El monarca buscaba apoyo para recibir ayuda de la Iglesia con su legitimación, economía y organización administrativa y territorial de fuerte jerarquización. Ejemplos son el III Concilio de Toledo (589) de importancia religiosa y el IV Concilio de Toledo (633) de importancia política, que intentó imponer una monarquía hereditaria.
Al-Ándalus: Reinos de Taifas y Reino Nazarí
Las Taifas (27) fueron pequeños reinos divididos del Califato de Córdoba. Esto supuso una ventaja para los cristianos, ya que las taifas se mostraban sumisas pagándoles “parias”. El avance de la reconquista cristiana culmina con la conquista de Toledo (1085), un duro golpe para los musulmanes que llamaron a los almorávides para que les ayudasen (1086). Los almorávides, caracterizados por su rigor religioso, acabaron con los reinos de taifas, unificaron el poder político en Al-Ándalus y frenaron el avance de los cristianos hacia el sur. Obtuvieron notables éxitos en las batallas de Sagrajas (1086) y Uclés (1108). A mediados del s. XII surgieron los segundos reinos de taifas. Los almohades acudieron a la Península Ibérica sin ser llamados, enfrentándose a los cristianos con éxito en Alarcos (1195). Consiguieron unificar Al-Ándalus de nuevo, pero tras ser derrotados en las Navas de Tolosa (1212), se produjo una nueva fitna. La España musulmana quedó reducida al reino de Granada, gobernado por los Nazaríes, que fue conquistado en 1492 por los Reyes Católicos.
Primeros Núcleos de Resistencia Cristiana y la Reconquista
El refugio de las montañas del norte peninsular fue clave. En 722, Pelayo derrotó al ejército musulmán en la batalla de Covadonga. Surgió el Reino Astur, que se extendió por Galicia y el valle del Duero. El Reino de León. En el S.X, Fernán González independizó el condado de Castilla. En el Pirineo Occidental, los vascones derrotaron a Carlomagno en Roncesvalles, imponiéndose el Reino de Pamplona con la dinastía Íñiga. En el Pirineo central, los condados de Sobrarbe, Ribagorza y Aragón se independizaron en el S.IX. El Pirineo oriental fue unificado por Wilfredo el Velloso, y Barcelona se independizó en el S.X.
Etapas de la Reconquista
- Primera (S. VIII-X): Formación y consolidación de reinos. Los diversos núcleos de resistencia se limitaron a ocupar tierras deshabitadas en el valle del Duero, Galicia y el piedemonte de los Pirineos.
- Segunda (S. XI-XIII): Expansión. Durante el S.XI el avance cristiano fue inexistente debido a conflictos internos, pero la caída del Califato permitió la conquista del valle del Tajo (Toledo, 1085) y del Ebro (S. XIII). Tratados de reparto entre cristianos en el S. XII: Tudilén y Cazorla. En el S. XIII se conquistó Extremadura, el valle del Guadalquivir (Andalucía), Murcia y, en la zona oriental, Valencia y Baleares.
- Tercera (S. XIV-XV): Guerra y conquista de Granada (1492).
Diversos modelos de repoblación y su cronología: presura, aprisio, concejos (fueros), encomiendas y repartimientos, donadíos.
Reinos Cristianos en la Edad Media: Organización Política y Sociedad
Los reinos tenían una estructura basada en la Monarquía, con un rey que ocupaba el poder feudal, aunque estaba limitado. Las Cortes ayudaban al rey. Antes de su existencia, el rey se unía con nobles a modo de herencia del Aula Regia de los visigodos. Los municipios, al principio gobernados por vecinos, luego vieron el poder recaer en los alcaldes. La sociedad feudal se consolidó a lo largo de la Península Ibérica con instituciones típicas como el vasallaje, el señorío territorial y el señorío jurisdiccional. La sociedad se organizaba en:
- Nobleza: Con grandes propiedades de tierra, privilegios y heterogénea (alta y baja nobleza, caballeros villanos e hidalgos).
- Clero: (Los que oran) Se divide en alto y bajo, también heterogéneo y con posesión de tierras.
- Campesinado: Apenas propietarios, dependían de sus señores.
- Burguesía: (Nuevo grupo social) Pagaba impuestos, pero formaba parte de los concejos y participaba en las cortes.
- Minorías religiosas y étnicas: Marginadas como judíos y mudéjares.
La Monarquía Hispánica de Felipe II: Gobierno y Conflictos
En 1555, Felipe II heredó de su padre la Corona Hispánica, los Países Bajos y Borgoña, y en 1558 añadió la Corona de Portugal. A nivel de gobierno y administración, mantuvo el sistema de los Reyes Católicos: monarquía autoritaria apartando a la aristocracia y sistema polisinodial basado en Consejos: de Estado, territoriales (Indias, Castilla…), técnicas (Inquisición, Hacienda, Órdenes Militares…). Los secretarios cobraron gran importancia como conexión entre el rey y los consejos.
Problemas internos: La Revuelta de las Alpujarras, conflicto de origen religioso (1586-1570) y Aragón tuvo un conflicto contra el Justicia Mayor que se negaba a entregar a Antonio Pérez, antiguo secretario, provocando una intervención militar.
A nivel exterior: El objetivo era la supremacía en Europa y la defensa del catolicismo. Sufrió enfrentamientos con Francia por la hegemonía europea, la Batalla de San Quintín finalizó con el Tratado de Cateau-Cambresis, del que salió victorioso y mantuvo la economía. Comenzó el enfrentamiento con los Países Bajos en 1568 por causas políticas (el rey era visto como extranjero) y religiosas (la extensión del protestantismo en el norte). El enfrentamiento finalizó en otro reinado. Concluyó el enfrentamiento con Inglaterra, que apoyaba a los Países Bajos. En 1588, creó la Grande y Felicísima Armada de 127 barcos, que sufrió un fracaso humillante y fue denominada por los británicos “La Armada Invencible”.
Exploración y Colonización de América
La conquista se produjo durante el reinado de Carlos I mediante el sistema de Capitulaciones. Hubo una etapa antillana y continental (1519-1550). La extensión estaba limitada por el Tratado de Tordesillas. Se realizaron exploraciones por Yáñez Pinzón, Núñez de Balboa, Solís, Magallanes, Juan Sebastián Elcano (1ª vuelta al mundo). Las grandes conquistas fueron llevadas a cabo por Hernán Cortés (México, 1519-1521), Pizarro y Almagro (1531-1533, zona entre Ecuador, Perú y Bolivia), Orellana, Valdivia… En 10 años se exploró casi toda América y se colonizó mediante métodos como el requerimiento (aceptar la soberanía española) o la encomienda indiana según las leyes de Burgos.
Consecuencias: En el ámbito político, América proporcionó a la Monarquía Hispánica hegemonía en Europa. En el plano económico, permitió la introducción de nuevos cultivos y animales, generando la revolución de los precios. En el terreno cultural, América ofrecía un mundo por descubrir, siendo así a nivel social una vía de escape para segundones y aventureros. Surgió una mentalidad colonial, ya que se pensaba que América era un terreno de explotación (habitantes como mano de obra barata).
Organización Política de las Coronas de Castilla y Aragón y el Reino de Navarra
Los reinos presentaban una estructura política parecida basada en tres instituciones: monarquía, Cortes y municipios, aunque cada reino poseía sus propias características.
Corona de Castilla
Se produjo un fortalecimiento de la Monarquía. Para gobernar, se sirvió de una administración central compuesta por la Curia Regia (Consejo Real, Cortes), Audiencia o Chancillería, Hacienda (Mayordomo Mayor) y Corte (Chanciller, Condestable). En la administración territorial, destacaban las merindades y adelantamientos, y en la administración local, los concejos y regidores.
Corona de Aragón
No era un Estado único, sino una unión de reinos (Cataluña, Valencia, Baleares, Aragón), cada uno conservando sus instituciones y leyes particulares. La debilidad del poder real se manifestaba en el pactismo, por el que se respetaban fueros y privilegios en esos territorios, y los nobles tenían libertad y autonomía en sus señoríos. En la administración central destacaban el Consejo Real, las Cortes, la Hacienda (Diputación General y Generalitat), la Audiencia y la Corte. En la administración territorial, en cada reino el rey tenía un lugarteniente o gobernador (virrey en Mallorca). Los territorios se dividían en honores, y en Cataluña, en veguerías. En la administración local, los Consejos o municipios se convirtieron en instituciones controladas por oligarquías ciudadanas.
Reino de Navarra
Las instituciones representativas fueron: el Rey, las Cortes, el Consejo Real, la Corte mayor o Cort general y la Cámara de Comptos. La incorporación de Navarra a Castilla se hizo bajo el principio de que Navarra conservaba su condición de Reino (virrey) y sus instituciones.
Los Reyes Católicos: Unión Dinástica e Instituciones de Gobierno
Decidieron gobernar conjuntamente en sus territorios (Concordia de Segovia, 1475: Fernando rey consorte en Castilla e Isabel en Aragón). La unión de Castilla y Aragón fue meramente dinástica (personal y no institucional), ya que cada reino conservó sus particularidades (leyes, instituciones, monedas, fronteras), por lo que no se estableció una monarquía o estado unificado. Los Reyes Católicos establecieron las bases del Estado Moderno mediante el refuerzo de la institución monárquica (Monarquía autoritaria) con instrumentos de control necesarios (Santa Hermandad, Tribunal de la Inquisición y expulsión de judíos y conversión de musulmanes, limitación del poder de la nobleza). Las instituciones de gobierno fueron: los Consejos (Castilla, Estado, Aragón, Indias, Inquisición, Órdenes militares); las Cortes de Castilla, el corregidor en los municipios. La administración de Justicia en Chancillerías o Audiencias. En la Corona de Aragón, debido al pactismo, apareció la figura del virrey y en Justicia se creó una Audiencia en cada uno de los reinos.
España en el Siglo XVIII: Expansión y Transformación Económica
La agricultura se caracterizaba por el régimen de propiedad, ya que las tierras cultivables eran amortizadas (en manos muertas), y el atraso técnico era muy importante, además de que no se habían generalizado aún los cultivos americanos. La pobreza de los campesinos y trabajadores urbanos impedía que existiera un mercado grande para promover la industrialización. No obstante, aparecieron algunas nuevas manufacturas, como la producción de algodón. En Cataluña, a finales del siglo surgieron las fábricas de indianas, como consecuencia de los empresarios dedicados a la exportación. Se introdujeron las compañías de comercio sin demasiado éxito, y se decretó la introducción de los navíos de registro. El gobierno de Carlos III aumentó el control administrativo, excluyendo a los criollos. Se introdujeron los intendentes.
Despegue Económico de Cataluña
Se debió a la especial situación del campo catalán. Los propietarios feudales catalanes arrendaron sus tierras a largo plazo a cambio de una renta fija (censos enfitéuticos), lo que convirtió a los campesinos en propietarios de la tierra en la práctica, a cambio de una cantidad simbólica, por lo que introducían mejoras y disponían de ingresos para comprar lo que no producían, incidiendo así en la industria, que invirtió parte de sus beneficios en la creación de nuevas industrias en un crecimiento continuo. Otro motivo fue la política proteccionista que prohibió la importación de telas de Asia. Y el último fue la liberación del comercio con América, porque desde el puerto de Barcelona exportaban sus productos locales.
La Ilustración y el Despotismo Ilustrado de Carlos III
La Ilustración fue la corriente ideológica predominante en Europa durante el siglo XVIII. Los ilustrados sometían sus opiniones y escritos a análisis científico, prescindiendo de tradiciones y costumbres. El hombre es un ser social que, dirigido por la razón, busca la felicidad basada en el bienestar y la riqueza material. Se daba gran importancia a la educación y a la difusión de la cultura, aunque los ilustrados españoles fueron pocos.
En una primera generación destaca el padre Flórez, y en una segunda, los políticos Campomanes, Floridablanca, Aranda y Jovellanos, y como escritor, Moratín. Los monarcas del siglo XVIII llevaron a cabo reformas para mejorar el bienestar y la felicidad de sus súbditos, pero sin renunciar a su soberanía, por lo que intervinieron en la actividad económica, dando lugar al despotismo ilustrado, basado en la Ilustración francesa y con el objetivo paternalista (“todo para el pueblo, pero sin el pueblo”), por lo que sus reformas tuvieron un alcance muy limitado, porque no pretendían alterar los estamentos.
Carlos III: El Despotismo Ilustrado en España
Carlos III es el mejor ejemplo de déspota ilustrado. Se vio afectado por el Motín de Esquilache, una reacción violenta contra las novedades que introdujo, provocando en él una intensificación de la política reformista, ayudado por el conde de Campomanes, Floridablanca y Aranda. Reformó la política eclesiástica basándose en el regalismo, que establecía la superioridad del rey sobre la Iglesia, reformando el patronato regio, luchando contra las supersticiones y expulsando a los jesuitas. Reformas en la Hacienda, emitiendo vales reales y creando el Banco de San Carlos. En agricultura, se adoptaron ideas fisiocráticas, cultivando nuevos cultivos (maíz, patata), aumentando la superficie cultivable en los bienes de propios, limitando los privilegios de la Mesta, colonizando Sierra Morena y realizando el informe de Jovellanos. En industria, se crearon manufacturas reales, fábricas de indianas, se honorabilizaron los oficios manuales y se estimuló a las industrias locales a través de la Sociedad de Amigos del País. En el comercio, se puso fin al monopolio de Cádiz y se liberalizó el comercio con América, se construyó una red de carreteras desde Madrid a la periferia y se construyeron canales. Como reformas culturales, se fomentó la enseñanza y, como reformas urbanísticas, se trabajó en la limpieza, el alumbrado, la numeración de las casas y manzanas, y se creó el plan del “Salón de los Prados”. La Ilustración terminó con el reinado en 1788, puesto que con Carlos IV se adoptaron posturas antirreformistas y conservadoras por el estallido de la Revolución Francesa.