Historia de la Segunda República Española, la Guerra Civil y el Franquismo

El Bienio Reformista (1931-1933)

Manuel Azaña, presidente del Consejo de Ministros (republicanos de izquierda y PSOE). Salen del gobierno Lerroux y Maura alegando razones de conciencia por cuestiones religiosas. Alcalá-Zamora, presidente de la República.

Las Reformas

  • Aplicación de legislación laboral al campo.
  • Reforma educativa.
  • Reforma militar.
  • Cuestión territorial.
  • La cuestión religiosa.

El campo y la reforma agraria

Creación de Jurados Mixtos del Trabajo Rural, oposición de la patronal. “Decretos agrarios», impulsados por los ministros socialistas de Trabajo y Justicia, Largo Caballero y F. de los Ríos, buscaban una mejora inmediata en las condiciones laborales del campesinado. Establecían la prohibición de desahuciar a los arrendatarios de fincas. Fijaban la jornada laboral en ocho horas. Obligaban a los propietarios agrícolas a contratar trabajadores de la comarca (Decreto de términos municipales). Y a mantener sus tierras en producción, según “uso y costumbre de buen labrador” (Decreto de laboreo forzoso).

Reforma educativa

Gran programa de construcción de escuelas y contratación de maestros. Inspiración en la Institución Libre de Enseñanza. Enseñanza mixta. 10.000 escuelas construidas en el Bienio Reformista. Colegio Pablo Iglesias, luego Carlos Eraña, en Ciudad Real. Programa de colonias. Elevación de los estudios de Magisterio a categoría universitaria. Programa de Colonias para niños/as de familias obreras. El impulsor fue Rodolfo Llopis (1885-1983), profesor y director general de Primera Enseñanza entre 1931 y 1933, acompañado de Lorenzo Luzuriaga, secretario técnico de Educación. Ambos, pedagogos, formados en Alemania.

Reforma militar

Modernización del ejército. Azaña. Reducción del número de oficiales. Cierre de la Academia Militar de Zaragoza. Exigencia de juramento de fidelidad a la República y retiro voluntario a quienes optaran por negarse. Tres generales ante la II República: Queipo de Llano, Rojo y Franco.

Reforma territorial

El gobierno fue muy cauteloso con la cuestión territorial. Dio solución al problema catalán: estatuto de Cataluña, 1932. El País Vasco, PNV: Problemas en Navarra, Álava. Galicia, menor conciencia nacionalista, sin partido nacionalista hegemónico.

Reforma religiosa

Resultaron medidas que provocaron enfrentamiento entre la opinión católica y el nuevo régimen. Separación Iglesia-Estado, libertad de cultos, disolución de los jesuitas. Prohibición de enseñanza a las órdenes religiosas. Desapareció el presupuesto de culto y clero. Expulsión de España del cardenal primado, Segura.

La reforma del campo formaba parte de un proyecto integral de desarrollo económico: se trataba de elevar el poder adquisitivo de los trabajadores del campo para afianzar la industria y, de paso, la economía española.

Promulgación de la Ley de Bases de la Reforma Agraria (1932): Asentamiento de campesinos sin tierra en latifundios para paliar el paro. Expropiación de fincas atendiendo a dos criterios: superficie y cultivo. Oposición de la patronal agraria e impaciencia de la UGT porque la aplicación era muy lenta. Decepción del campesinado.

Aplicación como medida excepcional: Decreto de intensificación de cultivos: paliar el paro campesino. Fracasó en su aplicación: escaso presupuesto, rechazo de la patronal industrial y agraria.

Derecha: Partido Radical de Lerroux, Asociaciones Patronales (Unión Económica Nacional).

Izquierda: CNT (más de un millón de afiliados para una población de 23.5 mill./habit. en 1930). El partido socialista comienza una tendencia de radicalización.

Fuertes tensiones sociales: frecuentes incidentes entre huelguistas y Guardia Civil (Calzada de Calatrava, 1931; Castellar de Santiago, 1932; Villa de D. Fadrique, 1932; El Legado Bustillo en La Solana, 1933).

Oposición de una parte del ejército representado por el intento de golpe de Estado militar en 1932: general Sanjurjo, en Sevilla. Reacción ante la aprobación de la ley de Reforma Agraria y Estatuto de Autonomía de Cataluña (victoria electoral de Esquerra Republicana de Catalunya dirigida por Francesc Macià).

Desgaste de la labor de gobierno: graves incidentes de Casas Viejas (enero, 1933): la Guardia de Asalto sitió y mató a un grupo de campesinos anarquistas. Caída del gobierno Azaña.

El Bienio Radical-Cedista (1933-1936)

Gabinete presidido por Lerroux con miembros del Partido Radical y apoyo parlamentario de la CEDA. Política de «rectificación» de las reformas del bienio anterior.

Dos etapas:

  • Hasta octubre de 1934: moderación, política de centro. Ministro de Agricultura, Cirilo del Río, abogado y diputado del partido de Alcalá-Zamora por Ciudad Real.
  • Desde octubre de 1934, entrada de CEDA y radicalización de las posiciones y contrarreforma generalizada.

Paralización de la reforma agraria, reforma militar, programa de construcciones escolares. Acercamiento hacia la Iglesia Católica. Bloqueo de los estatutos de autonomía: freno al proyecto vasco y enfrentamientos con la Generalitat catalana.

El bienio contempló dos estallidos de revuelta social: la huelga de campesinos y la revolución de octubre, en 1934.

En junio, la UGT decidió ir a la huelga de trabajadores del campo durante la siega ante lo que consideraba una violación de la legislación social agraria (términos municipales, jurados mixtos). Censura de prensa.

La entrada de tres ministros de la CEDA (octubre, 1934) en el gobierno significó para la izquierda la inminente llegada del fascismo, en un contexto europeo de llegada de Hitler al poder en Alemania en 1933. PSOE y otras fuerzas convocaron huelga general.

El movimiento fracasó en Madrid. En Barcelona, Companys dirigió una insurrección con claro matiz independentista. Rápida represión del Ejército. ¿La revolución de octubre debió evitarse?

En Asturias, el movimiento degeneró en una verdadera revolución de tipo socialista organizada por la UGT y la CNT. (“UHP”: Unión de hermanos proletarios).

Balance: 450 asesinatos cometidos por los revolucionarios. Solución del conflicto a cargo de la Legión dirigida por el general Franco: ocasionó 1.050 muertos, doble de heridos, 30.000 detenidos.

Companys, Azaña (que no había apoyado el levantamiento) y los principales dirigentes del PSOE (Prieto, Largo Caballero) fueron detenidos.

La República ante el Golpe de Estado

Hecho esencial: la República careció inicialmente de unidad en la dirección política y militar de la guerra. La respuesta popular al golpe de Estado desencadenó un proceso revolucionario de la clase trabajadora que, bajo la dirección de los partidos obreros y sindicatos, rompió la estructura misma del Estado republicano. El resultado fue desastroso.

El entusiasmo de los milicianos impidió el rápido triunfo del golpe: pero hasta la primavera de 1937, la República no pudo disponer de un ejército verdaderamente operativo. Esa fue la primera razón de su derrota.

La No-intervención

La guerra se convierte en problema europeo, no sólo español. Esta expresión indica la posición adoptada por las democracias europeas (Gran Bretaña y Francia) en agosto 1936: la guerra de España fue entendida como un asunto interno.

Alemania e Italia, países fascistas, prestaron apoyo a los sublevados. Franco empleó aviones y tanquetas alemanas e italianas. Legión Cóndor alemana.

La República obtuvo ayuda de la Unión Soviética: envió carros y aviones, previo pago, más la ayuda de las Brigadas Internacionales.

La guerra se convirtió en una guerra total entre dos ejércitos cada vez mejor equipados y numerosos. Bombardeos sobre poblaciones civiles.

Los militares rebeldes fusilaron: a afiliados de izquierda y sindicatos, a cientos de maestros, a intelectuales republicanos, incluso 16 sacerdotes próximos al nacionalismo vasco.

Los republicanos ejecutaron: a personas conocidas por sus ideas conservadoras y católicas, a militares sospechosos, a numerosos sacerdotes y religiosos.

Símbolos de la violencia franquista: las matanzas en Badajoz y las alocuciones radiofónicas del general Queipo de Llano en Sevilla (verano de 1936).

La violencia republicana: las cárceles (“checas”) de Madrid y Bilbao y los fusilamientos de Paracuellos del Jarama (noviembre de 1936).

Éxitos de Franco

Fracasada la ofensiva de Madrid, Franco llevó la guerra al norte. El País Vasco había recibido la autonomía en octubre de 1936 gobernada por un equipo de coalición presidido por el PNV (Aguirre). 1937: aviones alemanes destruyeron Guernica, hecho que conmocionó a la opinión pública mundial. Cayeron Bilbao, Santander y Asturias. Los principales centros mineros y siderúrgicos del país en manos de Franco determinaron la victoria final.

La Iglesia y la Cruzada

Franco logró otro éxito, moral y psicológico: la Iglesia española hizo público un documento (julio, 1937) en apoyo del levantamiento militar. La guerra se legitimaba como una cruzada en defensa de la religión.

Dos prelados se negaron a firmar: arzobispo de Tarragona y obispo de Vitoria (encrucijada, 16 sacerdotes vascos, asesinados por ejército rebelde).

La unificación política

Franco creó un partido único, “Movimiento Nacional” (Primavera de 1937): todas las fuerzas que habían apoyado el levantamiento militar quedaron agrupadas bajo un mando único, el de Franco (falangistas, católicos, monárquicos tradicionalistas). Quería una dictadura militar, sin partidos políticos ni autonomías regionales e inspirada en las doctrinas de la Iglesia católica. En enero de 1938, formó su primer gobierno con su cuñado, Serrano Súñer, como hombre fuerte.

La Batalla del Ebro

Franco lanzó una gran ofensiva por el valle del Ebro hacia el Mediterráneo cortando en dos el territorio republicano. El enfrentamiento fue el más demoledor de toda la contienda: murieron 20.000 soldados y la moral y la capacidad operativa republicanas quedaron deshechas. Franco tenía ganada la guerra.

Cataluña quedó aislada del resto de la península. (Enero, 1939). El gobierno se trasladó a Figueras. 500.000 personas partieron para el exilio.

Sólo Negrín y sus asesores creían posible prolongar la resistencia convencidos de que estallaría la guerra en Europa. División de criterio: resistir y prolongar la guerra (Negrín) o negociar una rendición honrosa con Franco (“abandonistas”, Besteiro). Golpe de estado contra Negrín: marzo de 1939. Franco no aceptó negociación alguna y exigió la rendición incondicional. Franco entró en Madrid en marzo de 1939.

La Autarquía

Descenso de la renta nacional y renta per capita que se mantuvieron durante 20 años. Se llegó al nivel de 1935, en el bienio 1953-54.

Fiel a la ideología fascista, el primer franquismo optó por la Autarquía: sistema de autosuficiencia económica por el que España pretendía abastecerse con sus propios recursos, sin necesidad de intercambios comerciales.

Aislamiento del exterior, rechazo de inversiones extranjeras, limitación de importaciones. Intervención del Estado en la producción y distribución de bienes, y fijación de los precios. Se impusieron cartillas de racionamiento y apareció, en consecuencia, el ”mercado negro” en que los productos se vendían a unos precios mucho más altos que los fijados oficialmente. Hasta 1952 no se suprimieron.

Se creó el INI, Instituto Nacional de Industria: muy mal gestionado y con déficit permanente.

Hay que considerar dos problemas más: España carecía de materias primas como algodón o petróleo, esto perjudicó a la industria. Intentos por desindustrializar Cataluña y P. Vasco, territorios que se consideraban políticamente desafectos y socialmente peligrosos.

No todos sufrieron de la misma forma los efectos de la depresión económica de la posguerra. Además de las personas que se enriquecieron con el mercado negro, bastantes empresarios se beneficiaron de la “paz del régimen” por la prohibición de sindicatos, huelgas; en estas condiciones la clase trabajadora tuvo que resignarse al deterioro de sus condiciones de vida, sobre todo, la bajada de salarios que retrocedieron hasta el nivel real de 1913.

En suma, la época de la Autarquía supuso: un incremento de desigualdades sociales y empobrecimiento general de la mayoría de la población, una progresiva corrupción de la administración pública y una falta de estímulo para el progreso de la producción industrial.

Ley de Responsabilidades

políticas:  Castigaba y sancionaba económicamente a los opositores al Régimen, y afectaba a todos los que “se hayan opuesto o se opongan al Movimiento Nacional con actos concretos o con pasividad grave”. Era una ley retroactiva, prohibía partidos, sindicatos  y masonería; confiscó  bienes de los vencidosSe crean tribunales especiales formados por: un militar,  falangista y  funcionario jurídico, asesorados por jefe local de Falange, un cura y guardia civil.  Fueron sustituidos  en 1963 por TOP: Tribunales de Orden Público. (disueltos en enero de 1977). La dictadura fusiló casi al 50% del magisterio  entre el mes de abril de 1939 y el 30 de junio de 1944: 6000 maestros fueron fusilados. De 430 profesores de  Universidad: fusilaron a 100, 148 al exilio y 25 revocados. Depuración de todos los funcionarios.

PACTO S.JUANLUZàPromulgación de una amplia amnistía. Instauración inmediata de un estatuto jurídico garantizando el ejercicio de los derechos de la persona. Mantenimiento inflexible del orden público y prohibición de las venganzas o represalias inspiradas por motivos religiosos, sociales o políticos.  Restauración de la economía nacional actualmente amenazada de ruina.Incorporación inmediata de España al grupo de naciones occidentales europeas asociadas en el plan de reconstrucción de Europa.Garantía del libre ejercicio del culto.Las fuerzas signatarias de esta declaración se comprometen a restablecer un régimen político definitivo, por medio de un voto secreto al que tendrán derecho  todos los españoles de ambos sexos

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