Transformaciones Económicas y Políticas Mundiales: De la Posguerra a la Caída del Bloque Soviético

El Milagro Económico Japonés

Al acabar el conflicto, Japón estaba destrozado, pero en menos de 20 años se convirtió en la segunda potencia económica mundial. Esto se debió a:

  • La ayuda de Estados Unidos y la no existencia de gastos militares.
  • La existencia de dos grandes grupos industriales y financieros.
  • La abundancia de mano de obra y la poca cobertura social.

El éxito se centró en la alta tecnología y se convirtió en el primer exportador mundial.

Las Particularidades del Modelo Japonés

El modelo japonés se diferencia de otros países de ámbito capitalista, ya que Japón tiene una de las densidades urbanas más altas del mundo. Las condiciones de los trabajadores son diferentes a las de los europeos; hay una disciplina de trabajo rigurosa. Los embajadores de las grandes empresas están protegidos a nivel social. Hubo un movimiento ciudadano para denunciar el problema ecológico, que quería presionar al gobierno para que hubiera unas medidas para proteger el medio ambiente.

La Reconstrucción Económica de la Unión Soviética

La Unión Soviética salió de la Segunda Guerra Mundial destrozada, pero reforzada en su papel de líder de los comunistas del mundo. La Unión Soviética reconstruyó la economía y llegó al nivel que tenían antes de la guerra. Todo esto mediante una movilización social, con grandes recursos técnicos y científicos, con el desarrollo de regiones asiáticas y con la incorporación de la mujer al mundo laboral. En la reconstrucción se dio prioridad a la industria pesada, a la de armamento y a las comunicaciones. Querían convertirse en la gran potencia industrial. En la agricultura continuaron las colectivizaciones al mismo tiempo que desarrollaban las infraestructuras y estructuras alimenticias. El crecimiento económico no se podía negar, pero hubo un modelo desequilibrado. Al darle mucha importancia a la industria pesada, la industria de consumo se vio débil y hubo una escasez de productos.

La Sociedad Soviética

En la sociedad soviética había dos grupos: uno mayoritario (campesinos y asalariados) y otro formado por trabajadores y profesionales, que tenían privilegios, pero no dominaban sobre la clase inferior. La verdadera clase dominante estaba formada por el poder político. La población mejoró su nivel de vida, desde eso se garantizó una seguridad social para todos, las pensiones, las vacaciones pagadas, la vivienda.

La Desestalinización de la URSS

La muerte de Stalin abrió un periodo de cambios en la Unión Soviética. El XX Congreso del PCUS significó la desestalinización, es decir, el reconocimiento de los errores del periodo anterior. La llegada de Jrushchov impuso un programa de reformas: desarrollo de la industria, reformas agrícolas, mayor libertad de expresión y tolerancia. En política exterior se abrió la coexistencia pacífica y se planteó aceptar diversas vías para la construcción del socialismo. Estas reformas se pararon y el dirigente fue destituido. El aparato del partido, en contra de las reformas, impuso una nueva dirección, en la cual se impuso el control ideológico y político y no se solucionaron los desequilibrios económicos.

Las Democracias Populares de la Europa del Este

Los estados de Europa oriental formaron regímenes políticos de democracia popular. Estos países establecieron gobiernos de frente nacional y se desarrollaron programas de reconstrucción. Se repartieron las propiedades agrícolas entre los campesinos, se nacionalizaron las grandes empresas y la banca, y se puso en marcha la industria pesada. Pero la Guerra Fría originó que los países del este evolucionaran hacia un alineamiento con la Unión Soviética. La URSS veía peligrar su influencia en la Europa del Este, forzó a los comunistas a hacerse con el poder, imponer la vía socialista y alinearse con la política exterior soviética. Como consecuencia, los países controlados por la URSS tuvieron que integrarse en el COMECON, que era un mercado común del área soviética. Sus objetivos eran colaborar en los intercambios comerciales, la paridad de las monedas y la realización de préstamos. Mediante el Pacto de Varsovia se integró a los ejércitos bajo un mando soviético.

La Influencia del Modelo Soviético

El modelo soviético también resultó atractivo para países sin tradición democrática y con problemas económicos y sociales. En América Latina, impulsaron las guerrillas comunistas y antiimperialistas por todo el continente. En Asia la influencia comunista se extendió. En Oriente Próximo, Siria recibió ayuda de la URSS. En África, algunos estados del Magreb tuvieron regímenes socialistas.

El Fin del Crecimiento: La Crisis de 1973

La economía de los países occidentales tuvo una grave crisis debido a unos orígenes muy complicados, relacionados con los salarios, la competencia entre países, etc. Esta situación empeoró con la crisis del petróleo. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) subió el precio, lo que provocó una subida de precio en todos los productos, bajaron las ventas y hubo crisis en las empresas, por lo que subió el paro. Solo las empresas más fuertes sobrevivieron y tuvieron el poder económico. Además, para bajar los costes fiscales y salariales, algunas empresas se fueron a países del tercer mundo. Así se empezó un proceso de deslocalización industrial.

Europa Frente a la Crisis

La crisis desestabilizó las políticas sociales y económicas. Los gobiernos socialistas se apoyaron en una intervención del Estado para generar empleo aumentando el gasto público y los impuestos, esto generó un incremento de la inflación (subida de precios) y más desempleados. El fracaso de esta política llevó al poder a gobiernos conservadores, los cuales limitaron los salarios, redujeron el gasto público, privatizaron empresas y bajaron los impuestos. Debido a esto se produjo un debilitamiento del sector público. En cualquier caso, ninguna orientación garantizaba la salida de la crisis, se optó por un proyecto de unidad europea que permitiera enfrentarse a las nuevas condiciones económicas.

Crisis y Reorientación de la Política Exterior de Estados Unidos

La crisis favoreció el recrudecimiento de la tensión internacional y el papel de Estados Unidos empezó a romperse. Los norteamericanos tuvieron que irse de Vietnam, en Asia hubo un avance de movimientos revolucionarios, en África se impusieron regímenes marxistas, por último, en Irán la revolución acabó con el gobierno y dio origen a una república integrista y antiamericana. Como respuesta, el nuevo presidente estadounidense reafirmó su política exterior intervencionista, se instalaron misiles y se hicieron operaciones de castigo a los que pusieran en duda su papel hegemónico. Estados Unidos apoyó a los sectores disidentes de los países socialistas para contribuir a la crisis del poder soviético, dieron ayuda económica y política y armó guerrillas en varios países asiáticos y africanos.

Los Problemas del Modelo Soviético

La URSS fue la segunda potencia militar del mundo, pero su economía tenía graves problemas y el nivel de vida de su población era bajo. La imposición del modelo soviético en la Europa del Este no se llevó a cabo sin problemas. En Hungría hubo un levantamiento contra la presencia soviética, la URSS intervino y los principales participantes fueron fusilados. En Checoslovaquia el partido comunista trató de poner una experiencia de socialismo, pero la intervención del ejército soviético acabó con el intento.

Las Reformas de Gorbachov

Gorbachov fue nombrado secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética, e inició un proceso reformista para hacer frente a los problemas de la Unión Soviética. Propuso la perestroika, para revitalizar la economía y aumentar la producción de bienes de consumo. También propuso la glasnost, eliminando la censura e introduciendo la democratización. Se eliminó el monopolio político del Partido Comunista y se inició la reforma de las constituciones. También se propició el diálogo con Estados Unidos para negociar los conflictos y avanzar en el desarme. También se reorientaron las relaciones con los países comunistas para animarlos a seguir su propio proceso reformista.

La Desaparición del Bloque del Este

El movimiento reformista quería acabar con los regímenes comunistas de Europa del Este. Empezó en Polonia, donde un nuevo gobierno quería aproximarse al modelo occidental. Este ejemplo fue seguido por la caída de los regímenes comunistas de Hungría, Checoslovaquia y Bulgaria. Los acontecimientos más importantes fueron en Alemania, donde se construyó el Muro de Berlín. Después se convocaron unas elecciones que fueron ganadas por los partidarios de reunificar Alemania, y después se firmó un tratado de unificación.

La Disolución de la URSS

A las reformas de Gorbachov se presentaron dos oposiciones: de unos sectores que no querían perder el monopolio del poder y sus antiguos privilegios. Estos hicieron un golpe de Estado que fue vencido por la población rusa. A partir de este momento las reformas se aceleraron, se decretó la supresión del régimen comunista, se independizaron las repúblicas bálticas, Ucrania y Bielorrusia. La URSS acabó dividida en 15 repúblicas independientes y Gorbachov dimitió de su cargo. La nueva Federación Rusa heredó muchos de los problemas de la URSS: los enfrentamientos y la crisis económica como resultado de la rápida privatización. El resultado fue una gran subida de los precios y el aumento del paro, que empobrecieron a una gran parte de la población.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *