Sistemas Bismarckianos: Alianzas y Tensiones en la Europa Pre-Guerra

Los Sistemas Bismarckianos: En 1871, se completa la unificación alemana con la creación del Imperio Alemán. Bismarck necesitó tres guerras: la de los Ducados, la austroprusiana y la francoprusiana. De este proceso emerge una gran potencia europea, Alemania, a la vez que otra gran potencia, Francia, queda humillada por la derrota y deseosa de revancha. Evitar esta revancha va a ser el objetivo principal de la política exterior de Bismarck entre 1871 y 1890. Para ello, va a establecer un complejo sistema de alianzas en torno a Alemania que mantenga a Francia aislada, desactivando así el peligro de una nueva guerra. A estos sistemas los llamamos bismarckianos. Gracias a ellos, se mantuvo la paz durante 30 años. Necesitó tres guerras para unificar Alemania, y necesitaba la paz para fortalecer y consolidar Alemania como gran potencia europea. Sin embargo, su política también tuvo aspectos negativos: creó focos de tensión, dividió Europa en bloques e inauguró la carrera de armamentos. Cuando Bismarck dimitió en 1890, se hundiría el sistema y se formaría un cerco en torno a Alemania. Empieza así una nueva etapa que duraría hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial en 1914, etapa llamada la Paz Armada.

Primer Sistema Bismarckiano

Los únicos posibles aliados de Francia al comenzar la década de 1870 eran Austria-Hungría y Rusia. Inglaterra tenía una política aislacionista que la alejaba de los asuntos europeos, e Italia estaba en malas relaciones con Francia desde que Napoleón III dejó de apoyar la unificación de Italia tras la paz de Villafranca. Serán, pues, Austria-Hungría y Rusia las potencias que Bismarck intentará atraer para formar una alianza. Y ello a pesar de las rivalidades que había entre ambas potencias por aumentar su presencia en los Balcanes. En 1873 se firma la llamada Entente de los Tres Emperadores. Sin embargo, la fragilidad de la alianza se demostró en 1877. Serbia y Montenegro se levantan por su independencia contra Turquía. Rusia, para apoyarlos y adelantarse a los austriacos en el dominio de los Balcanes, ataca y vence a los turcos, imponiéndoles el Tratado de San Stefano (1878) por el que se declaran independientes Serbia y Montenegro y se crea la Gran Bulgaria, pero bajo influencia rusa. Con este tratado, Rusia da un paso importante en el dominio de los Balcanes, por lo que Austria amenazó con intervenir militarmente. El apoyo alemán a los intereses austriacos frente a los rusos hace que Rusia dé marcha atrás, pero abandona la Entente y se produce así el fin del primer sistema bismarckiano.

Segundo Sistema Bismarckiano

La presencia de Austria y Rusia dentro de la misma alianza era muy difícil y Alemania tenía que elegir entre una de ellas: se opta por Austria y se firma en 1879 la Dúplice Alianza entre Alemania y Austria. Pero Bismarck no se resignaba a dejar a Rusia fuera, a merced de un posible pacto con Francia, por eso resucita la vieja entente: tras la subida al trono del nuevo zar Alejandro III, se firma la segunda Entente de los Tres Emperadores, que solo preveía la neutralidad de los firmantes en caso de que cualquiera de ellos entrara en guerra con una potencia ajena al acuerdo. Este acuerdo era suficiente para garantizar a Bismarck que Rusia no firmaría con Francia una alianza frente a Alemania. En 1882 se completa el segundo sistema con la firma de la Triple Alianza, al incorporarse a la Dúplice Alianza Italia. Resumiéndolo: el 2º sistema consta de dos alianzas sólidas: la Dúplice, que se mantendría hasta el final de la Primera Guerra Mundial (1918), y la Triple, que se disolvió cuando Italia la abandonó en dicha guerra para pasarse al otro bando. Una alianza frágil: la segunda entente que duraría solo hasta 1887, cuando de nuevo se produzca una nueva crisis entre Austria y Rusia en los Balcanes. Esta crisis hizo inviable la continuidad de la segunda entente.

Tercer Sistema Bismarckiano

En 1887 se renueva la Triple Alianza. Además, otros pactos vienen a ampliar el bando alemán. En Rusia, el zar firma con Bismarck el Tratado de Reaseguro por el que ambas partes se comprometen a la neutralidad en caso de guerra defensiva. El sistema se completa con los Acuerdos Mediterráneos, que defendían el statu quo en esta zona, impidiendo así la aplicación de los territorios coloniales franceses en el norte de África. Los firman Inglaterra e Italia en 1887. Todo ello con el beneplácito alemán, que logra de este modo un total aislamiento francés e impide por ello cualquier posibilidad de desquite.

La Paz Armada

En 1888 sube al trono de Alemania Guillermo II, que se propone convertir a Alemania en una potencia mundial, objetivo muy alejado de las aspiraciones de Guillermo I y de Bismarck, que no rebasaban el ámbito europeo. Entre 1890 y 1914, lo levantado por Bismarck se deshace, Francia rompe su aislamiento y todos los sistemas de alianzas se deshacen, pero esta vez en contra de Alemania: es la época de la Paz Armada en la que se firman nuevas alianzas y se producen una serie de conflictos que van a desembocar en la Primera Guerra Mundial. Las nuevas alianzas son:

  • Aproximación de Francia y Rusia, que en 1892 firman un pacto secreto defensivo contra Alemania.
  • Aproximación de Austria y Rusia, ambas estaban interesadas en el mantenimiento del status quo en los Balcanes.
  • Aproximación de Francia e Inglaterra, frente a Alemania que había empezado a desbancar a Inglaterra como potencia industrial. El principal contencioso entre Francia e Inglaterra era el colonialismo en África, pero en 1904 firman un tratado llamado la Entente Cordial, que resuelve sus conflictos coloniales africanos.
  • Aproximación de Inglaterra y Rusia, que permite la creación de un bloque antialemán llamado la Triple Entente, que constituye uno de los dos bandos que se enfrentaron en la Primera Guerra Mundial.

Triple Entente frente a Triple Alianza

Se producen 5 crisis que pueden reducirse a dos tipos únicos: o son franco-alemanas de origen colonial o austro-rusas de origen balcánico. Las 5 crisis son:

  1. Primera crisis marroquí: Francia quería establecer un protectorado en Marruecos, pero Alemania se oponía. Para solucionar el problema y evitar la guerra se convoca la Conferencia de Algeciras de 1906, que declara la independencia de Marruecos, pero bajo administración franco-española.
  2. Crisis de Bosnia-Herzegovina: En 1903 el rey proaustriaco de Serbia es asesinado y sustituido por otro rey prorruso, convirtiéndose desde entonces en tierra de asilo para todos los nacionalistas que querían independizarse del Imperio Austro-Húngaro.
  3. Segunda crisis marroquí: En 1911 Francia interviene militarmente en Marruecos para ayudar al sultán frente a una revuelta interna. Alemania amenaza con intervenir y fuerza un acuerdo con Francia por el que se resuelve el conflicto, pero ambos quedan insatisfechos.
  4. Crisis de las guerras balcánicas: En 1912 Bulgaria, Grecia y Serbia se lanzan a una guerra contra los turcos por el dominio de los territorios. Con la derrota de los turcos, estos pierden posesiones balcánicas excepto Estambul. Por desacuerdos en el reparto estalla entre los aliados la segunda guerra balcánica de 1913 en la que los búlgaros son derrotados por griegos y serbios.
  5. Crisis de julio de 1914: Crisis final y definitiva: Francisco Fernando es asesinado en Sarajevo por un nacionalista bosnio. Austria responsabiliza a Serbia de estar detrás del atentado y declara la guerra con el apoyo de Alemania.

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