Desarrollo, Oposición y Crisis del Franquismo: 1960-1975

Aspectos Económicos

El Desarrollismo de los Años Sesenta y Setenta

Durante los años sesenta y setenta, el capitalismo internacional atravesó una fase expansiva notable, y España se convirtió en un lugar privilegiado para las inversiones extranjeras que buscaban ventajas fiscales. El aumento del nivel de vida permitió que se generalizasen los viajes turísticos, convirtiendo a España en un país receptor de millones de turistas. Esto facilitó la entrada de una enorme cantidad de divisas. A lo largo de esos años, cerca de un millón de personas tuvieron que emigrar por trabajo, en su mayor parte a los países occidentales, como Alemania. Las remesas de dinero que enviaban a sus familias supusieron también otra vía de entrada para la economía española.

Los Planes de Desarrollo

Los Planes de Desarrollo se pusieron en marcha sucesivamente en 1964, 1969 y 1972. Con ellos se pretendía fomentar la industria mediante inversiones públicas, pero no se lograron los objetivos señalados. Fue un fracaso, pues los índices de crecimiento quedaron lejos de lo previsto.

Balance Económico

Se obtuvieron grandes beneficios, pero los productos españoles continuaron sin ser competitivos en el mercado mundial. La industria española se concentró en algunas zonas, mientras que otras quedaron condenadas al atraso y la despoblación. Además, el intenso crecimiento tampoco respetó el medio rural, y la construcción salvaje destruyó las costas.

Aspectos Sociales

Cambios en las Actitudes Sociales

La población urbana pasó a ser más numerosa que la rural. Se incitó a los españoles a consumir, generalizándose el uso de electrodomésticos, la moto y el coche. Como resultado, los valores de la sociedad española comenzaron a quebrarse, sustituidos por el deseo de mejorar el nivel de vida.

La Iglesia

La Iglesia mostró una clara evolución, pasando de un apoyo incondicional al régimen a una postura más crítica. Incluso las propias parroquias se usaron para reuniones de carácter político.

Aspectos Políticos

Actuación Política

Los ministros del Opus Dei proporcionaron los nuevos elementos ideológicos que iba a utilizar el franquismo. Las ideas más fascistas de la primera época dejaron paso al llamado desarrollismo. Se prometía un próspero futuro económico. Con la Ley Orgánica del Estado en 1966, se pretendía consolidar la llamada democracia orgánica, que significaba el rechazo de los sistemas democráticos. Otra medida que hay que recordar fue la Ley de Prensa. Gracias a ella, los españoles tuvieron alguna noticia de los conflictos y huelgas que tenían lugar en todo el Estado, así como del progresivo desarrollo de los sectores de oposición.

Contradicciones en el Seno del Régimen

Las contradicciones entre falangistas y ultraconservadores, y los grupos vinculados al Opus Dei y al capitalismo internacional iban a hacerse progresivamente evidentes. Franco supo utilizar con inteligencia dichas contradicciones, como en el caso Matesa, el cual solventó con la destitución de los ministros de ambos bandos. En 1969, Franco decidió designar como sucesor a Juan Carlos de Borbón y nombró vicepresidente a Carrero Blanco, vinculado al Opus Dei.

La Oposición Organizada en la Clandestinidad

La verdadera preocupación política del régimen iba a ser hacer frente a la oposición clandestina. La democracia cristiana fue cobrando fuerza en dos grupos nacionalistas: el PNV y la Unión Democrática de Cataluña. En 1962 se produjo el Contubernio de Múnich. En esa ciudad se reunieron representantes de la oposición, excluyendo a los comunistas, para realizar una denuncia pública del franquismo y una petición a los demás países para restablecer la democracia en España.

Nacionalismo Vasco y Catalán

Los nacionalismos vasco y catalán se fortalecieron. En 1945 se había instalado el Gobierno Vasco en el exilio en París. En los años sesenta, algunos jóvenes crearon ETA, organización armada que al principio despertó simpatías en la oposición clandestina. En 1970 se produjo un proceso contra dieciséis miembros de ETA: el Proceso de Burgos. El catalanismo, muy extendido en Cataluña, fue reprimido por la dictadura. El Gobierno catalán en el exilio tuvo menos eco que el vasco. Esquerra Republicana comenzaba a reorganizarse. En Cataluña, el nacionalismo y los movimientos populares de oposición estuvieron siempre muy vinculados. Pronto la oposición comprendió la necesidad de unirse y actuar conjuntamente.

El Nacionalismo Canario

El nacionalismo canario no estuvo presente en las islas durante los primeros años de la dictadura, hasta los años sesenta, de la mano de Fernando y Antonio Cubillo. Ambos abogados crearon el Movimiento Autonomista Canario (MAC), de carácter separatista. En 1964, Cubillo formó el Movimiento por la Autodeterminación y la Independencia del Archipiélago Canario (MPAIAC), optando por un terrorismo de baja intensidad.

Los Partidos de Izquierda

El PSOE comenzó a recuperarse, introduciendo una nueva dinámica que hizo posible un rápido crecimiento del partido y de su central sindical, UGT. Pero el partido que tuvo mayor influencia fue el PCE, que llegó a tener durante la guerra una importancia muy destacada, y tras ella contribuyeron con la represión. Tras unos largos años de dura resistencia clandestina, el PCE lanzó su política de reconciliación nacional para restablecer la democracia. De los comunistas represaliados, destacamos a Julián Grimau, ejecutado en 1963, cuya muerte fue criticada internacionalmente.

El Movimiento Obrero

Se comprobó que las dificultades para organizar movimientos de grupos tan clandestinos eran excesivas, y por ello se decidió potenciar las Comisiones Obreras (CCOO), cuya voluntad era depender directamente de las asambleas de los trabajadores. El PCE se dedicó a fortalecerlas. Las huelgas, prohibidas por las autoridades franquistas, sucedían con mayor frecuencia y afectaron a todos los sectores.

El Movimiento Estudiantil

La universidad había comenzado a manifestar actitudes de rechazo a la dictadura, tanto por parte del alumnado como del profesorado. Esto supuso la expulsión de profesores. Los estudiantes tenían como objetivo eliminar el sindicato vertical y sustituirlo por una organización democrática, creando el Sindicato Democrático de Estudiantes. Hasta el final del franquismo, el movimiento estudiantil no haría más que crecer, uniéndose al movimiento obrero. La universidad fue un foco permanente de protesta y de lucha ideológica.

La Represión

El régimen franquista respondió básicamente con medidas represivas, consistentes en detenciones y disoluciones de manifestaciones callejeras. Fue importante la actividad del Tribunal de Orden Público (TOP), creado para juzgar los delitos políticos. Existía asimismo una policía especial, la Brigada Político-Social, conocida con el nombre de Sociales.

La Oposición al Régimen de Franco en Canarias

La oposición al régimen de Franco en Canarias tuvo lugar a partir de los años sesenta, siendo el Partido Comunista el más activo. A partir de 1965, el PCE entró en acción. En 1968, en Sardina, una asamblea terminó en enfrentamientos con la Guardia Civil, con varios heridos de bala y una treintena de detenidos. Este episodio se cerró con condenas para muchos dirigentes comunistas. Otro suceso fue la denuncia de la cuestión aparcera y la huelga de los portuarios en 1968. En el archipiélago, el movimiento obrero antifranquista fue muy tardío. Hubo algunas huelgas y movilizaciones obreras, destacando el conflicto de los panaderos y las tarifas del transporte. En los años sesenta, la subsistencia diaria seguía siendo la preocupación para muchas familias.

La Crisis Final del Franquismo

La Crisis Económica

En los años setenta, la economía capitalista occidental entró en crisis. Se sumó el alza de los precios del petróleo, con lo cual se añadieron nuevas dificultades a la economía capitalista. En España, el gobierno no reaccionó, y los empresarios optaron por hacer concesiones salariales, aumentando el precio de sus productos y potenciando la inflación.

La Operación Ogro

En diciembre de 1973 se vivía pendiente del juicio que iba a realizar el TOP contra dirigentes de Comisiones Obreras, llamado Proceso 1001. El 20 de diciembre, el presidente Luis Carrero Blanco muere en un atentado realizado por ETA y bautizado como Operación Ogro. Desde ese momento, muchos tuvieron la sensación de que los días del régimen estaban contados. Franco eligió a Carlos Arias Navarro para sustituirlo, inspirador de un proyecto político calificado como Espíritu del 12 de febrero, que pretendía abrir paso a la constitución de asociaciones políticas dentro del régimen que no se opusieran al Movimiento Nacional. En julio de 1974, a Franco le diagnosticaron tromboflebitis, lo que le obligó a dejar el poder provisionalmente, siendo designado el príncipe Juan Carlos de Borbón para sustituirle. Una semana después, sintiéndose ya mejor, Franco retomó el poder.

La Coordinación de la Oposición Antifranquista

Entre 1974 y 1975, en julio de 1974, se formó la Junta Democrática, y en 1975 el PSOE creó la Plataforma Democrática. En julio de ese mismo año se iniciaron relaciones entre la Junta y la Plataforma. Tras algunos comunicados conjuntos y la creación de un comité de coordinación, se gestó la que fue bautizada con el nombre de Platajunta.

Los Últimos Meses

El final del franquismo fue una demostración palpable de sus dificultades por mantenerse y la evidente necesidad de sustituir el régimen político español. En el Sáhara, España se había comprometido a realizar un referéndum para que la población pudiera expresar su voluntad respecto al futuro del país. Sin embargo, Marruecos impulsó la Marcha Verde. España no reaccionó y aceptó el reparto del Sáhara entre Marruecos y Mauritania. El acontecimiento que tuvo mayores repercusiones internas fue el fusilamiento de miembros de ETA y el FRAP el 27 de septiembre de 1975. Al cabo de pocas semanas, Franco se agravó, muriendo el 20 de noviembre.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *