Desarrollo de la Guerra Civil Española (1936-1939)

1ª Etapa: La Sublevación (17-20 de julio de 1936)

Tras la victoria del Frente Popular, varios militares planearon un pronunciamiento militar en 1936. El Frente Popular, en un intento de controlar la situación, destinó a los cabecillas a diferentes lugares: Mola a Pamplona, Franco a Canarias, Goded a Baleares y Sanjurjo, exiliado, a Portugal. Los conspiradores aceptaron a Sanjurjo como jefe supremo de la rebelión, pero al estar exiliado, Mola, apodado «El Director«, asumió la dirección de la operación.

El Alzamiento Nacional se inició el 17 de julio de 1936 en el protectorado marroquí. Franco se sublevó en Canarias y voló en el «Dragon Rapide» hasta Tetuán para ponerse al mando del Ejército de África.

El resultado del golpe dependió de:

• La fuerza de los sindicatos obreros para oponerse al golpe de Estado.
• La Guardia Civil no se sublevó en todos los lugares.

El golpe militar fracasó en Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao y Castilla-La Mancha. Triunfó en Sevilla, Zaragoza, Granada, Córdoba, Navarra, Galicia y Castilla y León. En Extremadura, las fuerzas se equilibraron: Cáceres quedó en manos de los rebeldes y Badajoz, en manos republicanas (excepto Villanueva de la Serena).

2ª Etapa: El Paso del Estrecho y la Batalla de Madrid (20 de julio – finales de 1936)

Aunque el golpe de Estado fracasó en la mayor parte del país, un acontecimiento importante fue el paso del Estrecho de Gibraltar, con ayuda de alemanes e italianos. Franco dominó gran parte de Andalucía y emprendió la marcha hacia Madrid.

Las tropas sublevadas subieron por la Ruta de la Plata. En Badajoz, el 14 de agosto de 1936, tuvo lugar la primera gran matanza de la Guerra Civil. Las tropas franquistas, dirigidas por Yagüe y el general Varela, continuaron avanzando hacia Madrid, liberando el Alcázar de Toledo. Junto con las tropas de Mola, asediaron la capital de España.

Desde octubre de 1936 comenzó la Batalla de Madrid. El gobierno republicano y Azaña se trasladaron a Valencia, quedando en Madrid la «Junta de Defensa». El general Miaja ofreció una fortísima resistencia bajo el lema «¡No pasarán!». La Junta de Defensa, junto con las Brigadas Internacionales, consiguió retener Madrid hasta el final de la guerra, infligiendo una de las primeras derrotas a las fuerzas franquistas.

3ª Etapa: Cambio de Estrategia y Avance Rebelde (1937)

Los sublevados cambiaron de estrategia en 1937 y conquistaron varios territorios en poder de la República. Ocuparon todo el norte peninsular, incluyendo Asturias. Desde Galicia hasta la frontera francesa, todo el norte, con sus puertos, quedó en manos de los rebeldes.

4ª Etapa: Resistencia Republicana, Batalla del Ebro y Fin de la Guerra (1938-1939)

La República comenzó a pensar solo en su supervivencia. Las tropas franquistas llegaron en abril a Castellón, aislando Cataluña del resto del territorio republicano. El gobierno republicano, dirigido por el general Vicente Rojo, y el presidente del gobierno, Negrín, realizaron un último esfuerzo militar con el objetivo de frenar el avance franquista hacia Cataluña y Valencia.

Este último intento se materializó en la Batalla del Ebro (julio de 1938), que duró tres meses y medio y terminó con la derrota republicana, con más de 60.000 bajas. Las tropas franquistas continuaron su avance y en enero de 1939 entraron en Barcelona.

Se publicó el Decreto sobre las Responsabilidades Políticas, que afectaba tanto a personas individuales como a partidos políticos que habían apoyado al gobierno republicano (justificando las matanzas). Con este decreto de 1939 se ilegalizaba todo lo realizado después de 1934 (Constitución suspendida y todo suprimido), buscando que los españoles no apostasen por la República y que España estuviera controlada por la Iglesia, el Ejército y la Falange.

Tras la caída de Barcelona, cayó Cataluña. Negrín quería continuar la guerra, pero el Consejo Nacional de Defensa de la República (CND), dirigido por el coronel Casado y por Besteiro, se negó a continuar el conflicto, se sublevó contra Negrín y rindió la capital de España a las tropas franquistas, que ocuparon Madrid. El 1 de abril de 1939 concluyó la Guerra Civil con el parte de guerra.

Dimensión Internacional del Conflicto

Italianos y alemanes ayudaron a los sublevados, facilitando, por ejemplo, el paso por el Estrecho. Durante la Batalla de Madrid (octubre-diciembre de 1936), se enfrentaron carros de combate soviéticos (apoyando a los republicanos) contra italianos y alemanes (apoyando a los sublevados).

Alemania envió a España su Legión Cóndor, responsable del bombardeo de Gernika (País Vasco), inmortalizado por Picasso. Italia envió unos 70.000 soldados que intervinieron en muchos episodios de la guerra, como en Guadalajara, donde fueron derrotados, o en la toma de Málaga, donde obtuvieron la victoria.

El gobierno de la República obtuvo ayuda de la URSS (pagada con reservas de oro del Banco de España) y de las Brigadas Internacionales. El Comité de No Intervención (CNI) fue un organismo importante. Los países extranjeros acogieron a los exiliados o a los que huían. Franco pagó a los alemanes enviando a la II Guerra Mundial (1939-1945) la División Azul.

La Guerra Civil es considerada por muchos historiadores como la primera batalla de la Segunda Guerra Mundial, ya que se enfrentaron fuerzas fascistas y antifascistas.

Extremadura durante la Guerra Civil

Cáceres quedó en manos de los rebeldes, mientras que Badajoz permaneció leal a la República. La región fue fundamental porque fue el camino elegido para llegar a Madrid, a través de la llamada «Columna de la Muerte«.

En el análisis de la guerra en Extremadura, distinguimos tres elementos:

• Operaciones militares: El historiador clave en este estudio en Extremadura es Julián Chaves Palacios. Señala cómo desde Sevilla se organizó, a principios de agosto del 36, una columna fuertemente armada que avanzó por la Ruta de la Plata, pasando por Monesterio, Fuente de Cantos, Llerena, Zafra, Almendralejo, Mérida y Badajoz. Badajoz fue tomada el 14 de agosto de 1936, y una vez tomada la provincia, la columna siguió avanzando hacia Madrid. Esta «Columna de la Muerte» sembró el terror por todas las poblaciones por donde pasó, fusilando sin piedad. Toda Extremadura, excepto Alía (Cáceres) y la zona de La Serena en Badajoz, estaban en manos republicanas. En el verano de 1938, el ejército franquista, dirigido por Queipo de Llano, emprendió una nueva operación militar con la finalidad de conquistar territorio republicano.
• Evolución política: La República constituyó un nuevo organismo llamado Consejo Provincial de Extremadura, con capital en Castuera. Cada vez que se ocupaba una ciudad o pueblo extremeño, se nombraban las llamadas Comisiones Gestoras (nuevos ayuntamientos que sustituían a los frentepopulistas). Estas comisiones, formadas por gente de ideología derechista o de Falange, se hicieron con el poder, iniciando un proceso de depuración de todos los funcionarios colaboradores con la República.
• Represión en Extremadura: Se llevó a cabo una brutal represión por parte de ambos bandos, pero especialmente por parte de las fuerzas franquistas, con numerosos fusilamientos y encarcelamientos.