España 1936-1975: De la Guerra Civil al Fin del Franquismo

La Guerra Civil Española (1936-1939)

Tras el triunfo del Frente Popular en las elecciones de 1936, falangistas, militares y monárquicos, liderados por el general Mola y posteriormente por Franco, iniciaron una sublevación militar. Franco, desde Melilla, avanzó por la península con el apoyo aéreo y logístico de Hitler y Mussolini. España quedó dividida en dos bloques:

  • Bando Nacional: Controlaba Sevilla, Cádiz, Castilla y León, Cáceres, Navarra y parte de Aragón.
  • Bando Republicano: Mantenía la cornisa cantábrica, la costa mediterránea, Cataluña, Castilla-La Mancha, parte de Andalucía y las principales ciudades (Madrid, Valencia, Barcelona y Bilbao).

El gobierno republicano entregó armas a los obreros, lo que inicialmente frenó la sublevación. Entre 1936 y 1937, se vivió un período de terror en ambos bandos, con fusilamientos constantes. Franco intentó tomar Madrid, pero fracasó en las batallas de Guadarrama y Jarama, donde participaron milicias obreras, el ejército republicano, la URSS y voluntarios de las Brigadas Internacionales. La toma de San Sebastián aisló la cornisa cantábrica. Los bombardeos de Gernika, un ensayo nazi para la Segunda Guerra Mundial, evidenciaron la brutalidad del conflicto. La Iglesia apoyó abiertamente a Franco.

Entre 1937 y 1938, las milicias escaparon del control del gobierno republicano. Franco conquistó la cornisa cantábrica, con victorias en Brunete, Belchite y Teruel. Al llegar al Mediterráneo, dividió la zona republicana en dos. La República lanzó una ofensiva en la batalla del Ebro, pero fracasó ante la contraofensiva en Cataluña. Comenzó el exilio a Francia. Madrid resistía, pero la victoria de Franco era inevitable. El 1 de abril de 1939, Franco entró en Madrid, marcando el fin de la guerra y el inicio de una dictadura de 40 años.

La Creación del Estado Franquista: Evolución Política y Contexto Internacional

El decreto del 29 de septiembre de 1936 concentró todo el poder civil y militar en Franco. Su misión era «salvar» a España del liberalismo, los nacionalismos, el ateísmo y el marxismo. Se impuso la autoridad, el orden, el catolicismo dogmático, la propiedad privada y el patriarcado. Se rechazaron los valores de la República, uniendo a conservadores y falangistas contra la democracia liberal, el movimiento obrero, los nacionalismos y el laicismo.

Fundamentos Ideológicos y Apoyos Sociales

El régimen se apoyó en la oligarquía, el ejército, la Iglesia católica y las clases medias conservadoras. Políticamente, se instauró un estado nacional-católico. Los falangistas ganaron poder con el Decreto de Unificación de 1937, mientras que los católicos se asociaron con el Opus Dei.

Evolución Política (1939-1957)

La dictadura se adaptó a las circunstancias, lo que explica su longevidad. Hasta 1957, se pueden distinguir dos fases:

  • 1939-1945: Predominio falangista con Serrano Suñer. Aproximación a las potencias fascistas (División Azul, Entrevista de Hendaya). Tras la Segunda Guerra Mundial, la ONU condenó al régimen con un duro aislamiento, retirando embajadores. Se promulgaron nuevas leyes: Responsabilidades Políticas, Represión de la Masonería y el Comunismo, y Fuero de los Españoles, otorgando más derechos a Estados Unidos.
  • 1945-1957: El ministro de Asuntos Exteriores, Martín Artajo (católico), lideró el reposicionamiento internacional aprovechando la Guerra Fría. Se firmaron acuerdos de cooperación con Estados Unidos, incluyendo bases militares en España. En 1953, se firmó un concordato con la Santa Sede. España no entró en la ONU hasta 1955. En 1951, Carrero Blanco facilitó la entrada de ministros del Opus Dei.

En 1957, se inició una transición económica. Se mantuvo la dictadura, oponiéndose al comunismo y defendiendo el catolicismo. Se promulgaron nuevas leyes: el Manifiesto de Lausana (por Don Juan de Borbón), la Ley de Sucesión y el Fuero del Trabajo, que establecía sindicatos verticales con representación de trabajadores y empresarios. Se instauró una «democracia orgánica».

El Exilio Republicano

Unos 50.000 exiliados republicanos se refugiaron en Francia, donde muchos lucharon contra Hitler y sufrieron la deportación a campos de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. Hubo intentos de invasión en el Valle de Arán. México y Yugoslavia reconocieron al gobierno de la República en el exilio. Entre los exiliados destacaron numerosos intelectuales (Pedro Salinas, Rafael Alberti, Luis Cernuda, Ortega y Gasset).

Elementos de Cambio en la Etapa Final del Franquismo y Oposición al Régimen

Las transformaciones sociales no se tradujeron en una apertura política. La dictadura mantuvo un perfil autoritario, preparándose para la muerte de Franco, quien padecía una enfermedad. En 1969, Don Juan Carlos fue designado sucesor, pero el Caso Matesa, la Ley de Prensa de Fraga y las ambiciones de los ministros del Opus Dei generaron tensiones.

En 1973, ETA asesinó a Carrero Blanco. Arias Navarro, en 1974, propuso una apertura limitada a la creación de asociaciones políticas, pero solo para aquellas que apoyaran al régimen. La Iglesia, liderada por el Cardenal Tarancón, adoptó una visión conciliadora, apostando por la democracia. España era la última dictadura de Europa Occidental. La Revolución de los Claveles en Portugal (1974) y la pérdida del Sáhara (Acuerdos de Madrid, 1975) debilitaron al régimen. Franco murió el 20 de noviembre de 1975.

La Oposición al Régimen

  • Años 40: Actuación de los maquis, núcleos dispersos sin coordinación. El PCE lideró la resistencia, pero finalmente abandonó la lucha armada.
  • Años 50: El PCE, con Santiago Carrillo, promovió una «huelga nacional pacífica», que fracasó. Se buscó una reconciliación nacional y un frente único antifranquista. Surgieron nuevas fuerzas de oposición, como cristianos comprometidos con la clase obrera (HOAC, JOC).
  • Años 60: El movimiento estudiantil se unió a las luchas obreras. En la extrema izquierda surgieron el LCR y el PTE. Las Comisiones Obreras se convirtieron en la principal oposición, destacando la huelga de Asturias en 1962.
  • Años 70: La Revolución de los Claveles inspiró a la Unión Militar Democrática, que buscaba una transición democrática. Se reorganizaron los nacionalismos (PNV, Jordi Pujol). Surgió una nueva resistencia armada (ETA, FRAP). El terrorismo llevó a la promulgación de la Ley Antiterrorista. En 1975, se ejecutaron las últimas penas de muerte a cinco terroristas.

La oposición clandestina fue duramente reprimida, con torturas y largas condenas. Intervenían los Tribunales de Orden Público. La dictadura se basaba en la intolerancia política y religiosa, el aislamiento de Europa y la represión moral y política. Sin embargo, a partir de 1953, la sociedad española experimentó cambios con la llegada de la televisión, el turismo y la mejora de la situación de la mujer.

Elecciones de 1936: El Preludio de la Guerra

Tras un programa de contrarreforma social que favorecía a los terratenientes, Alcalá Zamora se negó a una reforma conservadora de la Constitución. Los escándalos de corrupción y la ambición de poder de la CEDA llevaron a Alcalá Zamora a disolver las Cortes. Se convocaron nuevas elecciones para 1936, con el Bloque Nacional y el Frente Popular como principales contendientes.

Hubo un vuelco electoral hacia la izquierda. El Frente Popular ganó gracias al voto anarquista. Gobernaron los republicanos con el apoyo del PSOE, siguiendo el acuerdo de Azaña. El gobierno republicano decretó una amnistía para los presos de la Revolución Asturiana, el Estatuto de Autonomía de Cataluña y la Ley de Reforma Agraria.

Casares Quiroga fue nombrado presidente del gobierno. La derecha, radicalizada, buscó derrocar la República mediante un golpe de Estado militar. El clima de violencia se intensificó: anticlericalismo, ilegalización de la Falange (por su violencia), huelgas, ocupaciones ilegales, motines. La CEDA se radicalizó. El asesinato del teniente Castillo por milicias socialistas y, posteriormente, el de Calvo Sotelo, líder de la derecha, precipitaron los acontecimientos. El 18 de julio, el levantamiento militar contra la República, iniciado por las tropas en Marruecos, dio comienzo a la Guerra Civil.

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