La Intervención en Marruecos y sus Repercusiones (1906-1923)
Conferencia de Algeciras (1906) y el Protectorado Español
- En la Conferencia Internacional de Algeciras de 1906, celebrada para frenar el expansionismo imperialista de Francia en África, se dividió Marruecos en dos áreas de influencia: al norte, la española (el Rif), y al sur la francesa.
- España pretendía afianzar su posición en África asegurando Ceuta y Melilla, y recuperar el prestigio de la Corona.
- El Rif destacó por la rebeldía de sus habitantes y la escasez de recursos explotables.
Conflictos en el Rif
- Guerra de Melilla (1909): La primera insurrección se produjo en 1909 tras el ataque de los rifeños a las explotaciones mineras españolas. El ejército español fue derrotado en el Barranco del Lobo, dejando Melilla expuesta. España se vio obligada a llamar a los reservistas catalanes, desencadenando la Semana Trágica de Barcelona.
- En 1912 se creó un protectorado en Marruecos ante el caos que vivía el país, lo que aumentó la resistencia contra la presencia española.
- Desastre de Annual (1921): En 1921 se planeó una ofensiva contra los rifeños, liderados por Abd el-Krim. Los rifeños respondieron con una emboscada que ocasionó más de 13.000 muertos y la pérdida de la mayor parte de la región. La indignación de la opinión pública llevó a exigir responsabilidades a la Corona a través del Expediente Picasso. Los militares reaccionaron alentando el golpe de estado de Primo de Rivera, quien restableció el control del Rif tras el desembarco de Alhucemas.
Repercusiones de la Primera Guerra Mundial (1914 – 1918) en España
- España se declaró neutral debido al aislacionismo adoptado desde 1898.
- La opinión pública se dividió entre germanófilos y aliadófilos, reflejándose estas posiciones en enfrentamientos en la prensa de la época.
- La guerra impulsó la economía española, aumentando la demanda por parte de los países beligerantes, lo que favoreció las exportaciones y el desarrollo de la producción industrial y de la agricultura. Sin embargo, mientras crecieron los beneficios de los empresarios, los trabajadores perdieron poder adquisitivo debido a la inflación, generando un malestar social inevitable.
La Crisis de 1917 y el Trienio Bolchevique (1918-1920)
La Crisis de 1917: Un Triple Conflicto
- La decadencia de los partidos conservadores se agravó tras el asesinato de Canalejas.
- En 1917 se desencadenó un triple conflicto:
- Crisis militar: En 1916, algunos oficiales crearon las Juntas de Defensa, asociaciones que reclamaban mejoras salariales y rechazaban ascensos por méritos de guerra. Alfonso XIII reemplazó al presidente (el liberal García Prieto) por Eduardo Dato (conservador), quien intentó atender las demandas de los junteros. Esto puso de manifiesto el poder del ejército y las disensiones entre militares peninsulares y africanistas.
- Crisis política: Francesc Cambó trató de denunciar el turnismo convocando la Asamblea de los Parlamentarios, quienes pidieron al Gobierno una nueva Constitución que estableciese un sistema democrático y descentralizado. La asamblea fue disuelta por orden del gobierno.
- Crisis social: Las condiciones de vida de la clase obrera se deterioraron a gran velocidad debido a la Primera Guerra Mundial. UGT y CNT convocaron una huelga general revolucionaria, reivindicando mejoras laborales y políticas. Una vez solucionada la crisis militar, Dato desató una dura represión contra los líderes sindicalistas.
El Trienio Bolchevique (1918 – 1920)
- El deterioro del sistema era evidente, y se complicó debido a las malas condiciones de vida y a las expectativas creadas por la Revolución Soviética (1917). Creció la conflictividad y se temió la llegada de una insurrección revolucionaria, debido al aumento de los sindicatos y las huelgas. Los gobiernos aprobaron leyes de contenido social, pero no consiguieron impedir la confrontación.
- Se produjeron grandes tensiones en el medio rural andaluz (luchas de los jornaleros) y en el sector industrial catalán. La conflictividad terminó en violencia, con la muerte de más de 150 personas en dos años en Barcelona. La patronal y el Gobierno intentaron neutralizar el movimiento huelguístico alentado por CNT, impulsando la formación de los sindicatos amarillos (del gobierno) y aplicando la violencia (pistolerismo). Los anarquistas de la CNT respondieron también con violencia, generando una sucesión de asesinatos.
El Fin de la Restauración
- Primo de Rivera aprovechó el descrédito de los partidos, la inestabilidad social, el temor al auge del catalanismo y la indignación por los desastres de Marruecos para justificar el golpe de estado en septiembre de 1923, liquidando el sistema de la Restauración.