-Aunque son fundamentalmente internas, no se puede evitar el que en ellas se den influencias exteriores. Porque los calvinistas buscan apoyos en los estados limítrofes para conseguir mayor fuerza.
-Como ejemplo de los momentos de alternancia entre la violencia y la calma, está lo que sucede en 1570 cuando en un intento de conciliación, Carlos IX decide promulgar un edicto de Saint Germain por el que se reconocen algunos privilegios a los hugonotes para intentar llegar a un acuerdo. Sin embargo, dos años después de este edicto, se produce uno de los sucesos más sangrientos: la Batalla de San Bartolomé de 1572, en la que un gran número de hugonotes que estaban en París para acudir a la boda de una hija del monarca, van a ser matados por un grupo de católicos. Se dice que quien inspiraba la acción era la propia madre del rey.

-A partir de esta matanza, el bando católico estará dirigido por Enrique de Guisa, y el protestante por Enrique de Navarra.
En reinado de Enrique III coincide con la formación de un grupo de presión en la corte llamado los políticos. Católicos moderados que no tenían un futuro demasiado claro. En este periodo se suceden tres guerras que van a terminar con la firma de la Paz de Fleix en 1580, por la cual el territorio de Francia está dividido en dos partes, cada una de un bando, con funcionamiento más o menos independiente aunque todos acatan al rey.
-Surge un nuevo problema, porque el único hijo varón del rey muere y se abre el problema sucesorio, teniendo en cuenta ley hereditaria francesa, el trono lo debería de heredar la hija mayor del monarca, quien está casada con el rey de Navarra, Margarita.… En Francia existe la ley sálica que prohíbe reinar a las mujeres. Casada con el rey de Portugal. Sin embargo, los Guisa no están de acuerdo con aceptar el gobierno de Enrique de Navarra por ser protestante. Firma una liga santa, para luchar contra los protestantes en Francia y los Países Bajos.
-Entre 1584 y 1594, en la última fase del reinado de Enrique III , el problema sucesorio se suma al protestante, y se genera una guerra civil en la que se mezcla la religión y la política. Enrique III, apoyado por Guisa y el cardenal Borbón presenta un candidato político. A la acción del monarca, el pueblo se amotina y obliga al rey a huir de París dejando en la ciudad a Guisa como lugarteniente. El rey huye a Blois donde reúne los estados generales. Reúne el poder para volver a París. Desconfía de los Guisa, y le manda asesinar. Manda detener a todos los cabecillas de la Liga Santa. Enrique, al encontrarse sin apoyos, acude al rey de Navarra para que le ayude a volver a París, su ejército, junto al ejército francés entran en París, donde Enrique III es asesinado. Pero antes, había reconocido como sucesor al rey de Navarra. Pero esta acción no será acatada por los jefes católicos. Se niegan a reconocer al nuevo rey de Francia. Se está produciendo otro problema sucesorio. Los católicos buscan un monarca que les represente.
-Miran hacia Felipe II que era hijo de una francesa, y había estado casado con una princesa francesa. El rey piensa en su hija Isabel Clara Eugenia, con derechos sucesorios.
-En 1593, estando reunidos los estados generales, Enrique de Navarra expresa su deseo de convertirse al catolicismo. Suspende el Parlamento en París, y rechaza la fe protestante y dice la frase de: París bien merece una misa. Para reinar en Francia, merece la pena convertirse.
-Un año después, este rey, Enrique IV entra en París, mientras Felipe
II ha visto como se frustraban sus deseos, sigue apoyando a Enrique IV. Pero esto no tendrá ningún éxito porque en el 98 se firma el tratado de Vervins en el cual Francia renuncia a sus ambiciones sobre sus territorios italianos, y acuerda con España la lucha unida contra el protestantismo. Además renuncia a su demanda de soberanía en Flandes. A cambio, Felipe II le reconoce como legítimo rey de Francia, y le devuelve las plazas que había ocupado. Enrique IV se ve con las manos libres para terminar con las guerras de religión, y consigue pacificar el país y terminar con los enfrentamientos internos que habían ocupado toda la segunda mitad del XVI y XVII.
A comienzos del XVII, ese periodo de conflictividad que vive Europa durante el XVI con motivo de la reforma, parece que había terminado. En la monarquía hispánica, la subida de Felipe III inicia una etapa de pacificación que está representada por la expulsión de los moriscos o la Tregua de los 12 años. En Francia, Enrique IV ha terminado con todas las guerras civiles. Hay una etapa de tranquilidad en Inglaterra con Isabel I, y se verá sucedida por los Estuardo, católicos con tendencias absolutistas.