El reinado de los Reyes Católicos (1479-1516) supuso el comienzo de la Edad Moderna en España. En 1469 se produjo el matrimonio entre la princesa Isabel, hermana del rey de Castilla, y el príncipe Fernando, hijo del rey y heredero de la Corona de Aragón. En 1479, Isabel fue reconocida como reina de Castilla (Fernando II rey de Aragón, Valencia y Mallorca, y Príncipe de Cataluña)
Isabel y Fernando, habían llegado a un acuerdo (la Concordia de Segovia de 1475), por el que ambos tendrían la misma capacidad de decisión política en las dos Coronas, y las órdenes irían firmadas por ambos. Se trataba de una uníón dinástica. Castilla y los reinos de la Corona de Aragón reconocían la autoridad de unos mismos reyes, pero seguían conservando sus leyes, instituciones, monedas y fronteras. No era un Estado unificado. Así nacíó la Monarquía Hispánica una confederación de reinos unidos solo por la Corona. En 1512, el rey Fernando conquistaba el reino de Navarra, que se incorporaba a Castilla, pero conservando sus fueros e instituciones propias.
Los Reyes Católicos crearon las siguientes instituciones de gobierno:
- Los Consejos, órganos consultivos y de asesoramiento (Consejo de Castilla, y de Aragón)
Las Audiencias o Chancillerías para la administración de Justicia.
Los Corregidores o representantes de los reyes en las ciudades de Castilla, controlaban a alcaldes y regidores, y recaudaban impuestos.
La Santa Hermandad, cuerpo de policía rural cuya misión era vigilar los caminos para evitar las luchas entre los señores locales.
El Tribunal de la Inquisición, para perseguir a los falsos conversos y a los sospechosos de herejía. Fue la única institución común a todos los reinos de la Monarquía Hispánica, y permitíó imponer su política religiosa.
En la Corona de Aragón, los Reyes Católicos tuvieron Virreyes (representantes de la autoridad real en cada reino), y debido al pactismo apenas se produjeron cambios institucionales, no ejercieron el poder autoritario que manténían en Castilla.
El reinado de los Reyes Católicos (1479-1516) supuso el comienzo de la Edad Moderna en España. En 1469 se produjo el matrimonio entre la princesa Isabel, hermana del rey de Castilla, y el príncipe Fernando, hijo del rey y heredero de la Corona de Aragón. En 1479, Isabel fue reconocida como reina de Castilla (Fernando II rey de Aragón, Valencia y Mallorca, y Príncipe de Cataluña)
Isabel y Fernando, habían llegado a un acuerdo (la Concordia de Segovia de 1475), por el que ambos tendrían la misma capacidad de decisión política en las dos Coronas, y las órdenes irían firmadas por ambos. Se trataba de una uníón dinástica. Castilla y los reinos de la Corona de Aragón reconocían la autoridad de unos mismos reyes, pero seguían conservando sus leyes, instituciones, monedas y fronteras. No era un Estado unificado. Así nacíó la Monarquía Hispánica una confederación de reinos unidos solo por la Corona. En 1512, el rey Fernando conquistaba el reino de Navarra, que se incorporaba a Castilla, pero conservando sus fueros e instituciones propias.
Los Reyes
Católicos crearon las siguientes instituciones de gobierno:
- Los Consejos, órganos consultivos y de asesoramiento (Consejo de Castilla, y de Aragón)
Las Audiencias o Chancillerías para la administración de Justicia.
Los Corregidores o representantes de los reyes en las ciudades de Castilla, controlaban a alcaldes y regidores, y recaudaban impuestos.
La Santa Hermandad, cuerpo de policía rural cuya misión era vigilar los caminos para evitar las luchas entre los señores locales.
El Tribunal de la Inquisición, para perseguir a los falsos conversos y a los sospechosos de herejía. Fue la única institución común a todos los reinos de la Monarquía Hispánica, y permitíó imponer su política religiosa.
En la Corona de Aragón, los Reyes Católicos tuvieron Virreyes (representantes de la autoridad real en cada reino), y debido al pactismo apenas se produjeron cambios institucionales, no ejercieron el poder autoritario que manténían en Castilla.
El reinado de los Reyes Católicos (1479-1516) supuso el comienzo de la Edad Moderna en España. En 1469 se produjo el matrimonio entre la princesa Isabel, hermana del rey de Castilla, y el príncipe Fernando, hijo del rey y heredero de la Corona de Aragón. En 1479, Isabel fue reconocida como reina de Castilla (Fernando II rey de Aragón, Valencia y Mallorca, y Príncipe de Cataluña)
Isabel y Fernando, habían llegado a un acuerdo (la Concordia de Segovia de 1475), por el que ambos tendrían la misma capacidad de decisión política en las dos Coronas, y las órdenes irían firmadas por ambos. Se trataba de una uníón dinástica. Castilla y los reinos de la Corona de Aragón reconocían la autoridad de unos mismos reyes, pero seguían conservando sus leyes, instituciones, monedas y fronteras. No era un Estado unificado. Así nacíó la Monarquía Hispánica una confederación de reinos unidos solo por la Corona. En 1512, el rey Fernando conquistaba el reino de Navarra, que se incorporaba a Castilla, pero conservando sus fueros e instituciones propias.
Los Reyes Católicos crearon las siguientes instituciones de gobierno:
- Los Consejos, órganos consultivos y de asesoramiento (Consejo de Castilla, y de Aragón)
Las Audiencias o Chancillerías para la administración de Justicia.
Los Corregidores o representantes de los reyes en las ciudades de Castilla, controlaban a alcaldes y regidores, y recaudaban impuestos.
La Santa Hermandad, cuerpo de policía rural cuya misión era vigilar los caminos para evitar las luchas entre los señores locales.
El Tribunal de la Inquisición, para perseguir a los falsos conversos y a los sospechosos de herejía. Fue la única institución común a todos los reinos de la Monarquía Hispánica, y permitíó imponer su política religiosa.
En la Corona de Aragón, los Reyes Católicos tuvieron Virreyes (representantes de la autoridad real en cada reino), y debido al pactismo apenas se produjeron cambios institucionales, no ejercieron el poder autoritario que manténían en Castilla.