Isabel II la organización del régimen liberal

2. LA I GUERRA CARLISTA: LA REGENCIA DE Mª Cristina, 1833-1840)
Al morir Fernando VII en 1833, Mª Cristina, madre de Isabel que tan solo tenía 3 años, tenía que enfrentarse a todos los que se opónían al testamento del rey y a la Pragmática Sanción, que permitía a
Isabel heredar el trono.
La oposición estaba formada por los tradicionalistas (Nobleza rural, Iglesia, pequeños campesinos católicos, foralistas) mientras que contaba con ela poyo de los liberales más moderados (burguésía, sectores urbanos populares)
Pero este enfrentamiento no se debía solo a la sucesión al trono, sino que más bien enfrentaba a los partidarios de la tradición (Antiguo Régimen) con los partidarios de las nuevas ideas del Liberalismo (El Nuevo Orden).
2.1. LA CONSTRUCCIÓN DEL SISITEMA LIBERAL ENTRE 1833-1840)
Gobiernos de transición, 1833-1835: El Estatuto Real.
La Regencia de Mª Cristina comenzó con el gobierno de Cea Bermúdez (exministro de Fernando VII) que intentó llevar a cabo un Régimen basado en el Despotismo IIustrado liderado por un consejo de absolutistas moderados.
Francisco de Burgos divide España en 49 provincias, que se convertirán en 50 en 1927, al dividirse las Canarias en dos.
La oposición armada del Carlismo y de los Liberales que pedían más reformas, obligó a la Regente, Mª Cristina, a buscar apoyos con una política más liberal.
Por eso, sustituyó a Cea Bermúdez por Martínez de
la Rosa en 1834. Era un antiguo liberal radical reconvertido al Liberalismo moderado.
Buscó el apoyo de la burguésía, pero respetando los derechos de los grupos dominantes del antiguo Régimen.
En 1834 se aprueba el ESTATUTO REAL (carta otorgada concedida por la Regente al pueblo). Se caracterizaba por:
-Cortes Bicamerales compuestas por:
a) Estamento de los Próceres, elegidos por la Corona.
b) Estamento de los Procuradores, elegidos por sufragio censitario indirecto.
Estas Cortes no eran un auténtico poder legislativo, ya que se limitaba a proponer leyes que la Corona aprobaba o no. El rey podía ejercer el veto absoluto sobre las leyes propuestas por las Cortes.
Los liberales moderados apoyaron el Estatuto, mientras que los progresistas lo rechazaron.
Gobiernos progresistas de 1835 a 1837. Disolución del Régimen Señorial y Constitución de 1837:
Se producen revueltas progresistas y populares en 1835 que suponen la creación de Juntas y organización de Milicias Locales. Los revolucionarios pedían la convocatoria de Cortes, libertad de prensa, nueva ley electoral y creación de la milicia nacional.
El Estamento de los Procuradores destituye a Martínez de La Rosa y nombra al progresista
Mendizábal que reclutó a 100.000 hombres para la guerra
Carlista, convirtió la milicia nacional en Guardia Nacional y
decretó la Reforma de la propiedad de la tierra, desamortización eclesiástica, desvinculación de mayorazgos.
En 1836 Calatrava accede al gobierno después de la rebelión de los Sargentos de la Granja. Restablece la constitución de 1812 e inicia la redacción de la Constitución de 1837. Mientras Mendizábal como Ministro
de Hacienda continúa la tarea de reformar jurídicamente la propiedad de la tierra con una serie de Decretos y Leyes como: Abolición de la Mesta (organización de ricos ganaderos castellanos), el diezmo (impuesto que cobraba la iglesia) y los privilegios gremiales.
La Ley de 1837 disuelve los señoríos jurisdiccionales y territoriales, que permite a los señores conservar la propiedad de la tierra, a no ser que los campesinos tuvieran los títulos de propiedad.
El Decreto de Desvinculación abolíó los mayorazgos, los vínculos de propiedad de la Iglesia y de los municipios, permitiendo vender estas propiedades, tras su expropiación en pública subasta. Así,
pretendían obtener fondos para resolver la crisis de Hacienda, costear la Guerra Carlista, y crear un grupo social favorable al Estado Liberal.
En Febrero de 1936 se nacionalizaron los bienes del clero y se ordenó subastarlos públicamente.
La Constitución de 1837: Está inspirada en la de 1812.
Se intentó recoger principios progresistas y moderados. Sus carácterísticas:
-Las Cortes estarían formadas por dos Cámaras (Congreso y Senado) y tenían iniciativa legislativa
-El Congresos se elegía por Sufragio Censitario (supónía que solo un 4% de la población fueran electores)
-El Senado sería elegido por el Rey
-El Rey tenía veto absoluto y nombraba a los Ministros.
-Contemplaba la igualdad jurídica de todos los ciudadanos, libertad de imprenta, inviolabilidad de domicilio,
prohíbe la práctica de otras religiones que no sean la Católica.
-Ayuntamientos elegidos por sufragio Censitario.
Los moderados gobiernan después de las elecciones de 1837 e imponen un sufragio más restringido,
limitando la libertad de imprenta e intentando devolver bienes desamortizados al clero. En 1840 aprueban
una ley de Ayuntamientos que provoca una insurrección progresista y popular que conlleva la dimisión de la Regente Mª Cristina cuando Isabel solo tenía 10 años, y la sustitución de su madre por el General
Espartero como Regente.
2.2. LA I GUERRA CARLISTA (1833-1839):
Con la muerte de Fernando VII y la Pragmática Sanción (que posibilitaba a las mujeres reinar en España) se produjo un levantamiento de los Carlistas que apoyaban al hermano de FVII, D. Carlos Mª Isidro, en lugar de a su hija, Isabel. Este levantamiento provocó una Guerra Civil, la guerra carlista que
terminaría en 1839.
Los partidarios de D. Carlos (carlistas) eran tradicionalistas, absolutistas radicales y estaban de acuerdo en mantener los Fueros vasco-navarros, así como en defender la religión católica. Se opónían a que Isabel, sobrina de D. Carlos, fuera la legítima heredera.
Los carlistas defendían el Antiguo Régimen, es decir, el Absolutismo, la sociedad estamental y la economía agraria basada en el régimen tradicional de la propiedad, bajo el lema ”Altar y Trono”.
Les apoyaban los clérigos tradicionalistas, la nobleza rural, el pequeño campesinado y los defensores de los fueros. Sobre todo las zonas de Navarra, País Vasco, Cataluña, Aragón y Valencia.
El resto de la población, la mayoría se identificaba con lsabel (isabelinos) y también, con la legalidad vigente, con las reformas políticas y económicas liberales, por eso, se llamaban liberales.
LA PRIMERA GUERRA CARLISTA se inició con el levantamiento de 1933 y se prolongó hasta 1840. En esta guerra se utilizaron tácticas guerrilleras.
Se pueden diferenciar 3 etapas:
1) De 1833-35. En esta etapa los carlistas lograron importantes éxitos. Los carlistas contaban con un líder indiscutible, Zumalacárregui que quería llegar a Madrid, pero el resto de los dirigentes preferían centrarse en el control del País Vasco, Navarra, Aragón, Cataluña…
En el sitio del Bilbao, muere Zumalacárregui, poniendo fin a esta etapa expansionista.
2) De 1835-1837. Las expediciones al Sur del Ebro extienden el conflicto, pero fracasan en la defensa de las grandes ciudades: Madrid y Bilbao. Espartero, militar de signo liberal, triunfa en la defensa
de Bilbao.
3) De 1837-39. El Carlismo se divide en dos:
-Los Intransigentes con D. Carlos y Cabrera apoyados por el campesinado y el clero que no quieren pactar la rendición.
– Y los Moderados de Maroto, partidarios de un acuerdo de paz. Estos firman la Paz de Vergara en 1839 con Espartero, reconociendo la victoria liberal a cambio del ingreso en el ejército Liberal de los oficiales carlistas y de la promesa de mantener los fueros vascos y navarros.. La guerra continuó en el Maestrazgo hasta 1840.
Consecuencias: La guerra supuso un montón de muertos y la inclinación definitiva de la monarquía isabelina al bando liberal.
Los gastos de la guerra acabaron arruinando las finanzas públicas, a pesar de los ingresos procedentes de la Desamortización de Mendizábal de 1836.
El Carlismo no desaparecíó totalmente, hubo una II Guerra Carlista de 1846 a 1849 al fracasar los intentos de casar a la reina Isabel con el primogénito de D. Carlos. Y una III Guerra Carlista al no considerar el gobierno del general Prim la candidatura de D.Carlos(Carlos VII) a la corona
española.

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