INTRODUCCIÓN:
El texto que me dispongo a comentar se basa en un discurso de Federico Echevarria, oligarca vizcaíno dueño e una parte de Altos Hornos. Su título va sobre el Librecambismo y el Proteccionismo. El tipo de texto según la fuente es histórico-primaria ya que está redactado en la misma época en la que sucedieron los hechos, de carácter político-económico
. Su autor como he citado antes es Federico Echevarría. Está dirigido a un colectivo y su finalidad es pública ya que va dirigido al gobierno de Madrid para pedir medidas de protección y proteger la economía.
El discurso fue en Bilbao el día 9 de Diciembre de 1893.
Nos encontramos en la industrialización vasca, Vizcaína. En ello, tenemos dos partidos:
Conservadores y liberales
. Los conservadores pretenden proteger la economía, en cambio los liberales quieren tener libertad de negocio, un sistema capital. Están dentro de la Restauración. Por ello, es un mitin, un discurso que da en contra de un tratado entre España y Alemania, ya que va a terminar con la industria Vizcaína y Bilbaína.
IDEAS PRINCIPALES:
El texto a analizar trata el meeting en contra del acuerdo entre España y Alemania. Podemos destacar las siguientes ideas principales :
El librecambismo es una doctrina económica y que no haya intervención estatal en el comercio internacional. El proteccionismo, en cambio, es una doctrina económica que quiere favorecer la producción nacional.
El tema central del texto es la defensa del proteccionismo en beneficio de la industria vasca, y deriva en ideas principales como las consecuencias económicas de la supresión de aranceles y del tratado hispano-alemán, además de la petición al gobierno de mantener el proteccionismo. El librecambismo ha surgido a raíz de la no intervención del Estado en la economía, pretendía favorecer las relaciones comerciales con el extranjero. Echeverría defiende la idea de que el librecambismo y la supresión de aranceles empeoraría la economía del país, y en concreto la bizkaína, que se vería afectada en la fabricación de máquinas y en los Altos Hornos de Bilbao, aunque otros sectores como la producción de acero, las fundiciones y empresas de material ferroviario quedarían afectadas. Los proyectos de nuevas fábricas dependientes de la Ley arancelaria se suspenden. Echeverría exigirá el mantenimiento tanto del proteccionismo como de los aranceles
DESARROLLO:
La industrialización, por el cual una sociedad agraria pasa a estar mantenida por la industria, surgíó en Inglaterra a finales del Siglo XVIII. En XIX se extendíó por Centroeuropa pero no fue hasta la segunda mitad del mismo siglo cuando se instauró en España. La siderurgia, tras un primer intento en Marbella y un segundo en Asturias se asentó en Vizcaya, donde había mineral de hierro, de gran calidad, de fácil extracción y próximo al mar. Pero la competencia de la industria europea que ya llevaba más de medio siglo funcionando, hacía que la siderurgia en Vizcaya y en otros sectores industriales en España fuera muy complicado.
Además de luchar por el desarrollo de la industria, la siderurgia vizcaína tenía que enfrentarse a la llegada de productos más baratos que los nacionales del exterior. Federico Echevarría estaba muy interesado en este tema, ya que era propietario de una industria siderúrgica y formaba parte de los oligarcas siderúrgicos vizcaínos, enriquecidos con la exportación de mineral de hierro a Gran Bretaña y mucho más con la construcción de altos hornos. Con los beneficios que obtuvieron, aprovecharon para levantar modernos altos hornos y la venta se destínó al mercado español. Por esta razón, el proteccionismo fue muy demandado por burgueses y oligarcas, dueños de fábricas, durante toda la Restauración .
El sistema canovista, aunque prohibíó los aranceles de la ley de libertad económica del Bienio Progresista, impuso un régimen arancelario a los productos extranjeros para favorecer la producción nacional. La siderurgia vizcaína se vio muy beneficiada por este principio económico y pudo hacer frente a la competencia extranjera, convirtiéndose en la principal zona productora de hierro de país, lo que derivó en el desarrollo de otros sectores industriales como el naval, químico y metalúrgico. Como ya hemos mencionado, la oligarquía siderúrgica vizcaína presionaba a los gobiernos de Madrid. Su empuje había hecho que en los años 80 fuera la siderurgia más potente de España.
Cuando los gobiernos del Partido Liberal establecieron sus políticas librecambistas, no les afectó. Pero a medida que llega la década de los 90 y la competencia extranjera llega a las puertas, los oligarcas de la siderurgia presionaran al partido Liberal para mantener el proteccionismo. El propio Partido Liberal cedíó paso al proteccionismo para salvar la industria nacional. Pero a su vez se gestaba su propia ruina ya que al no existir competencia externa su modernización y preparación fue menor, de forma que no podía exportar y además siempre tenía que vivir protegida del gobierno.
CONCLUSIÓN:
Tras haber analizado el texto podemos concluir que a pesar del fuerte desarrollo industrial de finales del Siglo XIX, la industria española y vasca aún no estaba capacitada para hacer frente a la competencia de productos extranjeros más baratos, por ello, las fábricas vizcaínas dependían de la Ley Arancelaria y del proteccionismo. Debido a la importancia del proteccionismo, los burgueses y oligarcas, dueños de la siderurgia vasca y de la industria textil catalana lo demandarían durante la Restauración oponiéndose a su supresión como fue el caso de Federico Echevarría en el meeting de 1893 contra los Tratados de Comercio. El tratado no se firmó y la industria siguió disfrutando de la política proteccionista. La importancia del documento del discurso de Echevarría es una clara representación de lo que quiere mantener la élite económica vasca.