La revolución de 1868 no fue solo el derrocamiento de una reina. Era el momento de llevar a cabo una serie de transformaciones políticas y económicas que trajera al sistema político a las capas populares.
El levantamiento cívico-militar
El levantamiento cívico-militar fue un pronunciamiento especial debido a que las expectativas eran diferentes en las clases sociales. Tuvo una gran participación popular. Los unionistas y progresistas intentaron estabilizar el nuevo régimen marginando demócratas y republicanos.
Desmantelamiento de las juntas revolucionarias
Para llevar a cabo esta estabilización había que desmantelar las juntas revolucionarias, a raíz del destronamiento de Isabel II. Todas las juntas coincidían en unos puntos básicos en cuanto al ideario demócrata: sufragio universal, libertad de imprenta, libertad de cultos, eliminación de impuesto de consumos, abolición de quintas…
Las Cortes de 1869
Hasta las Cortes de 1869 hubo dos fases. Primero el poder estaba en las juntas revolucionarias, a favor de las inclinaciones republicanas.
Problemas surgidos
El choque frontal gobierno provisional-iglesia.
Los primeros embriones de secesión en Cuba denominado grito de Yara.
Fuerzas políticas en 1869
Los carlistas, que renacen.
Los moderados postulan el retorno de Isabel II.
La tendencia monárquico-demócrata.
El partido republicano.
Elecciones a Cortes constituyentes
En 1869 se celebran las elecciones a Cortes constituyentes por sufragio universal directo, tenían derecho a voto todos los varones mayores de 25 años. Se elaboró la Constitución de 1869.
La llegada de Amadeo de Saboya
Amadeo de Saboya sería elegido como rey de España (1870- 73).
El fin del reinado de Amadeo
En 1870-1873 en un ambiente de tal inestabilidad Amadeo de Saboya abdica y retorna a Italia.
Proclamación de la I República
En febrero de 1873 la I República era proclamada por el congreso y el Senado por mayoría.
El fin del sexenio democrático
Se trata del fin del sexenio democrático y el inicio de la restauración borbónica, en los últimos meses de la República.
La restauración borbónica
La restauración era cuestión de muy poco tiempo. El único punto de discusión era el cómo proceder al acto de restaurar, por la vía militar o civil.
Cánovas del Castillo, que había recibido poderes de la casa Real en el exilio para dirigir el movimiento alfonsino, quería evitar una medida de fuerza creando un estado de opinión favorable (vía civil).
El General Martínez Campos se pronunció en Sagunto por la monarquía de Alfonso XII. La restauración venía de las manos de un ejército, que desde el golpe de pavía se había vinculado a las clases conservadoras.