La victoria de Franco en la Guerra Civil tuvo repercusiones negativas a corto y largo plazo en la economía española. Sumió en el hambre y la miseria a muchos españoles y dificultó la reconstrucción y el crecimiento económico de la posguerra.
Recuperación económica lenta
Tras la Guerra Civil, la recuperación económica fue muy lenta. La Segunda Guerra Mundial no benefició a España, ya que estuvo vinculada a las potencias fascistas a las que pagó las ayudas recibidas en la guerra.
Política autárquica
Las autoridades franquistas llevaron a cabo una política que favoreció poco la producción industrial. Se creó el Instituto Nacional de Industria en 1941 para relanzar la industria española en la posguerra, canalizando el ahorro hacia empresas públicas que desarrollaron sectores industriales durante la autarquía.
Racionamiento y mercado negro
El racionamiento controlado por el Estado provocó la aparición de un mercado negro, donde los estraperlistas realizaban transacciones al margen de la ley. Esto generó desabastecimiento de alimentos y colas, manteniendo las cartillas de racionamiento hasta 1951.
Plan de Estabilización
En 1959, se implementó el Plan de Estabilización con medidas fiscales y monetarias para lograr un equilibrio económico interno y externo. Se redujo la actividad económica y aumentó el desempleo, lo que impulsó la emigración a Europa como válvula de escape.
Modernización y crisis del petróleo
En los años 60, se desarrollaron Planes de Desarrollo que modernizaron los equipamientos industriales y aumentaron las exportaciones. Sin embargo, la dependencia del extranjero provocó la crisis del petróleo, a la que el Gobierno no reaccionó adecuadamente, sumiendo al país en otra gran crisis económica.