TURNISMO:
Sistema político de la Restauración, basado
en la creación de dos grandes partidos, unos en sentido conservador y otro en
sentido liberal, que se turnaban en el poder y no a través de las urnas sino de
mutuo acuerdo, por lo que era un fraude electoral.
CONCORDATO:
Acuerdo adoptado en 1851 por el que quedaba
zanjada la ruptura que se había producido entre la Iglesia y el Estado liberal
por la desamortización, en el que la Santa Sede ratificó el Patronato Regio.
CEDA:
Confederación Española de Derechas Autónomas
dirigida por Gil Robles creada en 1933 mediante la agrupación de los partidos
de derechas para las elecciones, cuyo resultado llevo a la derecha al poder,
dando lugar al Bienio Conservador
BLAS INFANTE
: Notario malagueño figura del regionalismo
andaluz quien estructuro unas bases de contenido ideológico y cuyo objetivo era
la toma de conciencia por parte de los andaluces de su propia identidad, así
surgió el andalucismo histórico.
REGENERACIONISMO:
Movimiento durante la crisis de la Restauración, que defendía la necesidad de
regenerar el cuerpo enfermo de España, el cual apoyaba el Rey Alfonso XIII y
cuyo principal teórico fue Joaquín Costa.
+ OLIGARQUÍA Y CACIQUISMO
La
alternancia en el poder predeterminada por los sectores políticos y sociales se
denominó oligarquía y caciquismo.
La
oligarquía estaba formada por los dirigentes políticos de ambos partidos
relacionados con la burguesía adinerada y los terratenientes, y a su servicio
estaba el cacique, una persona de gran poder económico en la comarca o pueblo
que empleaba su poder para dominar políticamente a los habitantes de su zona de
influencia. Esta situación demuestra el desfase existente en esta época entre
la España oficial de legalidad constitucional, y la real de oligarquía y
caciquismo.
Este fenómeno era mayoritariamente propio de una sociedad rural y
subdesarrollada, en la que había una fuerte dicotomía entre campo y ciudad, por
eso el caciquismo era visto como la única práctica natural de articular
políticamente el Estado al conseguir enlazar las oligarquías nacionales con los
caciques locales y comarcales. Y por estas mismas razones el caciquismo también
se dio en otras partes de la Europa mediterránea como Portugal e Italia.
+CONSTITUCION 1931
La Constitución de 1931 fue una de las prioridades de las Cortes en las elecciones de ese año, para responder a la nueva realidad política del país. Jiménez de Asúa catedrático de Derecho Penal y diputado socialista, presidió la comisión encargada de elaborar el texto, donde participaron personalidades del mundo jurídico. El texto tuvo un amplio respaldo a pesar de las fuertes tensiones, y fue aprobado el 9 de diciembre por 368 a favor y ninguno en contra, aunque estuvieron ausentes un centenar de diputados.
La
Constitución de 1931 consta de 125 artículos contenidos en nueve títulos,
además de disposiciones transitorias. Sus rasgos más importantes eran de
carácter democrático y progresista, así como su fuerte contenido social.
El Titulo I se refería a la forma del Estado donde tenía cabida las autonomías regionales, lo que provocó un fuerte debate ya que los diputados al hecho de la proclamación de Generalitat de Cataluña como Estado autónomo. El artículo primero definía a España como república democrática de trabajadores de toda clase, el tercero declaraba un Estado aconfesional y entre otros artículos señalaban derechos religiosos, la cuestión confesional. Quedaban recogidos en el texto constitucional los derechos y deberes, finalmente no se abolió la pena de muerte y abría la posibilidad de acometer la reforma agraria. La comisión que redactó el borrador inicial y los diputados estuvieron obsesionados por garantizar los derechos individuales y por que el texto reflejase los avances sociales de la época. Su punto más controvertido fue el artículo 26 que regulaba las relaciones del Estado con la Iglesia ya que era la primera vez que un texto constitucional declaraba un Estado laico, donde se prohibía impartir enseñanza a las órdenes religiosas, lo que restó apoyo a la República
+TEXTO
Se trata de un texto de 14 líneas que trata del ejército como clase social media de la nueva estructura social por las transformaciones sociales del siglo XIX.
En un estrato distinto de la aristocracia y la burguesía estaban las clases medias, que numéricamente tenían una importancia muy restringida y a la que pertenecían los intelectuales, el ejército y el artesanado.
Los intelectualesposeían una instrucción superior a la del resto de las clases medias, lo que les permitió gozar de cierta dignidad económica e intervenir activamente en la vida pública. Entre ellos destacaron los médicos y abogados.
El ejército de lo que trata el texto, fue uno de los grupos sociales más importantes de la vida española del siglo XIX. Sus generales, jefes y oficiales formaron parte de las clases media, y a veces del estrato superior de la sociedad. A lo largo del periodo fue llamado en ocasiones para arbitrar los conflictos políticos como se puede ver en el texto la orden del Ministerio- Regencia, por lo que se consideró intérprete de la voluntad popular. Dentro del ejército los generales gozaban del poder e influencia y preparaban conspiraciones con la alta sociedad. La oficialidad se formaba en centros de enseñanza específicos, el más prestigioso el Real Colegio de Artillería. La revolución de 1868 les sorprendió por su carácter democrático y antimilitarismo.
Los artesanos formaron durante un tiempo la base de las clases medias, pero entraron en crisis al no poder resistir el impacto de la introducción de la máquina de vapor y la supresión definitiva de la organización gremial. Serían los pequeños industriales y los dueños de medianos y pequeños comercios los que formarían la nueva base de las clases medias.