La expansión colonial

A finales del siglo XIX, la rivalidad entre potencias europeas desató una carrera colonial por conquistar y dominar territorios de África y Asia.

África

África, un territorio con baja densidad de población, fue el continente más colonizado. En él rivalizaron principalmente el proyecto británico y el proyecto francés. Más tarde, otros Estados (Alemania, Bélgica, Portugal…) también se asentaron en África. Ante la creciente rivalidad, se convocó la Conferencia de Berlín (1885), donde el canciller Bismarck reunió a las potencias europeas para organizar el reparto de África.

Asia

En Asia, la colonización británica se centró en la India, donde la Compañía Británica de las Indias Orientales poseía enclaves comerciales desde el siglo XVII (Madrás, Calcuta y Bombay). Francia tuvo su centro de expansión en Indochina, donde en 1887 estableció la Unión Indochina. El imperio Ruso se expandió hacia Siberia y hacia el sur, ocupando la zona de Asia central. China, aunque no fue ocupada por ningún país, vio cómo los ingleses establecían algunos enclaves comerciales como Hong Kong.

La resistencia a la conquista

La superioridad técnica y militar de las metrópolis comportó que la conquista de las colonias fuese rápida, pero no sin resistencia. Se produjeron algunas revueltas de los pueblos autóctonos contra la ocupación extranjera:

• Cipayos (1857): Se rebelaron contra el dominio británico en la India, pero fueron derrotados.
• Tribus zulúes: Se resistieron a la conquista británica, lo que desencadenó la guerra en 1879.
• Revuelta de los bóxers (1899, China): Con el objetivo de expulsar a los extranjeros.

LA ORGANIZACIÓN DE LOS IMPERIOS COLONIALES

La administración de las colonias

Una vez explorados y conquistados militarmente, los territorios quedaban bajo la administración de la metrópoli. Se distinguen dos tipos principales de colonias:

• Colonias de explotación: Con una población emigrada escasa que ejercía el control político y económico.
• Colonias de poblamiento: Que recibían un fuerte contingente de población metropolitana.

Principales tipos de dominación colonial:

• Colonia: Territorio conquistado que no tenía gobierno propio y dependía totalmente de la metrópoli. El control era ejercido por un gobernador, un reducido grupo de funcionarios y un ejército de ocupación.
• Protectorado: El territorio conservaba un gobierno indígena, aunque gran parte de las funciones relevantes (como el mando del ejército y la política exterior) eran ejercidas por la metrópoli.
• Dominio: El territorio tenía una organización política propia, pero estaba bajo soberanía británica.
• Concesión: Era una zona cedida a la metrópoli durante un tiempo determinado, generalmente enclaves comerciales.
• Enclave estratégico: Se trataba de un pequeño territorio situado en un lugar decisivo para asegurar el control marítimo, favorecer el comercio y garantizar la defensa.
• Mandato: Era un territorio colonial que había pertenecido a los países vencidos en la Primera Guerra Mundial y que estaba administrado bajo supervisión de la Sociedad de Naciones.
• Territorio metropolitano: Era una colonia de poblamiento en la que los colonos estaban representados por las instituciones de la metrópoli.

El impacto sobre los pueblos colonizados

Los colonizadores establecieron como prioridad sus intereses económicos o políticos e ignoraron la historia y los rasgos propios de las poblaciones indígenas. El impacto del colonialismo se sintió en diversos ámbitos:

En el ámbito económico:

• Imposición de una economía de mercado con condiciones comerciales favorables a la metrópoli.
• Expropiación de tierras a los nativos, lo que supuso un retroceso de la agricultura de subsistencia.
• Expoliación de las riquezas naturales y el inicio de una dependencia económica.
• Construcción de grandes infraestructuras para explotar y comunicar los territorios conquistados.

En el ámbito político y social:

• Fin de las estructuras y jerarquías tradicionales e imposición de una nueva élite dirigente formada por europeos privilegiados.
• Establecimiento de límites entre imperios que unió a grupos enfrentados o dividió antiguas naciones, creando numerosas fronteras artificiales y generando conflictos.
• Introducción de vacunas y medidas higiénicas, y construcción de hospitales por parte de los misioneros, lo que redujo la mortalidad y favoreció el aumento de la población. Sin embargo, el desequilibrio entre la población y los recursos provocó hambrunas.

En el ámbito cultural:

• Imposición de las lenguas, el cristianismo y las formas de vida europeas, lo que afectó a las creencias y tradiciones de las poblaciones autóctonas. En África se produjo una notable aculturación y una pérdida de la identidad.
• Difusión de la enseñanza, que contribuyó a la alfabetización de los nativos, pero con el principal objetivo de inculcar la superioridad de los valores de la civilización occidental.