LA EVOLUCIÓN POLÍTICA DEL SEXENIO DEMOCRÁTICO (1868-1874)
INTRODUCCIÓN
La Revolución de «La Gloriosa» en 1868, que derrocó a Isabel II, marcó el inicio de un periodo de seis años de experimentación democrática en España. Este periodo incluyó la Constitución de 1869, el reinado de Amadeo I de Saboya (1871-1873) y la Primera República Española (1873-1874). Finalmente, un golpe de Estado en 1874 restauró la monarquía borbónica con Alfonso XII.
LA REVOLUCIÓN DE 1868 Y LA CONSTITUCIÓN DE 1869
La Revolución de «La Gloriosa» fue resultado de causas políticas, económicas e ideológicas. El descrédito de la Corona, la crisis económica y la difusión del ideario democrático llevaron al Pacto de Ostende (1866) y a la sublevación en Cádiz. Tras el triunfo, se estableció un Gobierno Provisional y se redactó la Constitución de 1869, la primera constitución democrática de España, que estableció una monarquía democrática con división de poderes y amplios derechos y libertades.
EL REINADO DE AMADEO DE SABOYA (1871-1873)
Amadeo de Saboya fue elegido rey en 1871. Sin embargo, su reinado enfrentó dificultades debido a la inestabilidad política, la oposición de diversos sectores y problemas como la Guerra de los Diez Años en Cuba y la tercera guerra carlista. Tras dos años, abdicó en 1873.
LA PRIMERA REPÚBLICA ESPAÑOLA (1873-1874)
Tras la abdicación de Amadeo I, se proclamó la Primera República Española. Sin embargo, esta república enfrentó una profunda crisis política marcada por las disputas entre federalistas y unitaristas. Se sucedieron cuatro presidentes en once meses: Figueras, Pi y Margall, Salmerón y Castelar. La república enfrentó conflictos sociales, la guerra carlista y la revolución cantonalista. Finalmente, un golpe de Estado en 1874 puso fin a la Primera República.
LA ECONOMÍA ESPAÑOLA EN EL SIGLO XIX
La economía española del siglo XIX experimentó una lenta expansión y cambios hacia un sistema capitalista. Se distinguen tres etapas:
- 1800-1830: Interrupción del crecimiento.
- 1830-1875: Crecimiento progresivo y desarrollo de la burguesía industrial.
- 1875-1914: Desarrollo industrial, especialmente la siderurgia vasca y la textil catalana.
LA AGRICULTURA
La agricultura española experimentó cambios significativos, pero no logró mejorar sustancialmente las condiciones de vida de los campesinos. La desamortización, un proceso político-jurídico clave, buscó reestructurar la propiedad agraria, pero la mayoría de las tierras acabaron en manos de aristócratas y burgueses. Los cultivos principales fueron el cereal y la viticultura.
LA INDUSTRIALIZACIÓN
España se sumó tardíamente a la Revolución Industrial debido a problemas como las guerras, el lento crecimiento de la población, la falta de infraestructuras y la escasez de capital. La industria textil en Cataluña y la siderúrgica en el País Vasco fueron las más destacadas. A partir de 1880, la industria se difundió a otras regiones, pero el proteccionismo generó problemas.
LOS TRANSPORTES
Se implementaron importantes proyectos de infraestructura, como la Ley General de Carreteras de 1857 y la Ley de Ferrocarriles de 1855. El desarrollo ferroviario enfrentó problemas como la falta de rentabilidad y la dependencia de subvenciones estatales.
LA INFRAESTRUCTURA FINANCIERA
España enfrentó graves problemas financieros. Se implementaron reformas tributarias y se establecieron instituciones como el Código de Comercio, la Bolsa de Valores de Madrid, el Banco de España y la peseta como unidad monetaria. El comercio exterior se basó en la importación de productos manufacturados y la exportación de minerales y productos agrarios.
LA SOCIEDAD ESPAÑOLA EN EL SIGLO XIX
La sociedad española del siglo XIX se caracterizaba por profundas desigualdades. La mayoría de la población era analfabeta. La revolución liberal provocó una transformación hacia una sociedad capitalista de clases.
LOS CAMBIOS POLÍTICOS Y LEGALES
La irrupción del liberalismo y la Constitución de 1812 establecieron la igualdad de todos los españoles ante la ley, marcando el fin del régimen estamental. En 1837, se eliminó definitivamente el régimen señorial.
LOS CAMBIOS ECONÓMICOS
Las transformaciones económicas del siglo XIX dieron lugar al surgimiento de la alta burguesía, la burguesía latifundista, las clases medias y el sector obrero. La nobleza mantuvo su posición de poder. Los campesinos, sin embargo, continuaron en la base de la pirámide social.
CAMBIOS DEMOGRÁFICOS
La población española experimentó un crecimiento considerable, con una alta natalidad y mortalidad. Se produjeron migraciones internas del campo a la ciudad y migraciones externas hacia Francia, el norte de África y las Américas.
PROCESO DE URBANIZACIÓN
A principios del siglo XX, se observa un ligero incremento en la población urbana. Ciudades como Madrid y Barcelona experimentaron un notable crecimiento. Se llevaron a cabo planes de reorganización urbanística.
A pesar de los cambios, los grupos privilegiados mantuvieron el poder económico y político, lo que provocó descontento entre las capas más desfavorecidas. El siglo XIX dejó pendiente la modernización económica y social que España necesitaba.