Tras la muerte de Franco, el 20 de noviembre de 1975, comenzó la Transición española, un proceso de cambios políticos cuyos objetivos eran eliminar el franquismo y establecer un nuevo sistema democrático. Además, fue un cambio brusco que triunfó debido a la política de consenso y al acuerdo sobre la reforma de la economía española que se establecieron en los Pactos de la Moncloa, un acuerdo para salir de la crisis firmado por el Gobierno, las principales formaciones políticas, la Patronal y los sindicatos. Este proceso político se plasmó en la Constitución de 1978 y se consolidó con los primeros gobiernos democráticos.
El Reinado de Juan Carlos I y los Primeros Gobiernos
El 22 de noviembre de 1975, Juan Carlos de Borbón fue proclamado Rey mediante la Ley de Sucesión a la Jefatura del Estado de 1946 por la cual Franco le había nombrado su sucesor en 1969. Nació en Roma en 1938. Con diez años llegó a España para recibir educación y formación militar bajo la tutela de Franco, pero existía el temor de que fuera el continuador del franquismo ya que su discurso de investidura en las Cortes solo dejó entrever algunas aspiraciones de cambio y decepcionó a quienes esperaban un mensaje más aperturista.
Primer Gobierno de la Monarquía
En el primer gobierno de la Monarquía, el Rey optó por mantener como Presidente del Gobierno Provisional al franquista e inmovilista Carlos Arias Navarro. No obstante, introdujo en su gobierno a ministros reformistas como Manuel Fraga. Pronto aparecieron contradicciones y diferencias entre ministros y presidente. El inmovilismo del presidente provisional provocó una gran movilización ciudadana en 1976, donde se produjeron manifestaciones y huelgas destacando Vitoria, donde la policía disparó contra los obreros provocando la muerte de cinco trabajadores. En ese mismo año, los organismos opositores al franquismo, la Junta Democrática y la Plataforma de Convergencia Democrática, se fusionaron en la Coordinada Democrática (Platajunta).
Segundo Gobierno de la Monarquía y la Reforma Política
En el segundo gobierno de la Monarquía, que comenzó en 1976, el Rey destituyó a Arias Navarro y nombró a Adolfo Suárez como nuevo Presidente del Gobierno Provisional. Este nuevo gobierno, formado por personas jóvenes y poco conocidas, concedió la amnistía para los presos políticos, inició la reforma política para establecer la democracia española, y convocó elecciones generales. Para hacer posible la reforma política, se inició el diálogo con la oposición todavía ilegalizada del PSOE y PCE, lideradas por Felipe González y Santiago Carrillo respectivamente.
En noviembre de 1976, Adolfo Suárez presentó en las Cortes la Ley para la Reforma Política, un breve texto que defendía la democracia y la soberanía nacional estableciendo un Parlamento bicameral, formado por el Congreso de los Diputados y el Senado, que se encargaría de redactar la Constitución española de 1978 cuyo fin sería acabar con el franquismo, siendo esta aprobada mediante Referéndum por amplia mayoría.
Las Primeras Elecciones Democráticas y la Constitución de 1978
A partir de dicho Referéndum, transcurrieron los meses más difíciles de la Transición ya que las medidas liberalizadoras del Gobierno Provisional provocaron una violenta reacción por parte de grupos de ultraderecha que asesinaron a los abogados laboralistas de Atocha. Además, ETA y GRAPO, grupos terroristas, intensificaron su escalada de secuestros y asesinatos. A pesar de esto, Adolfo Suárez y su Gobierno Provisional continuaron con el proceso de cambio político legalizando la oposición y los sindicatos (UGT, CNT y CCOO).
En junio de 1977 se celebraron las primeras elecciones generales democráticas desde 1936 votando el 79% de la población. Ganó la UCD convirtiendo a Adolfo Suárez en Presidente del Gobierno y siendo el PSOE el segundo partido más votado. Atrás quedaron el PCE y Alianza Popular, liderada por Manuel Fraga. También obtuvieron votos partidos nacionalistas como la CIU y el PNV. La Falange de extrema derecha no obtuvo representación política en el Parlamento. Así, en julio de 1977 se constituyeron las nuevas Cortes que redactaron la Constitución de 1978.
Tras la aprobación de la Constitución de 1978, la UCD ganó las segundas elecciones generales democráticas en marzo de 1979.
Política Exterior y la Dimisión de Adolfo Suárez
En política exterior, la UCD estableció relaciones diplomáticas plenas con los países europeos, ingresó a España en la OTAN (mayo de 1982) y comenzó a negociar el ingreso de esta en la CEE.
Adolfo Suárez ejerció como Presidente del Gobierno hasta enero de 1981 cuando, además de las tensiones y el acoso político, dimitió por:
- La descomposición de su propio partido, condicionado por rivalidades y luchas internas entre aquellos que querían alcanzar el poder.
- El terrorismo de ETA y GRAPO que atentaban contra el Ejército y la Guardia Civil con el objetivo de provocar la desestabilización política.
- El deterioro de la economía española debido a las secuelas de la Crisis del Petróleo de 1973 que provocó un aumento en la inflación y en el desempleo. A pesar de que los Pactos de la Moncloa sirvieron para mejorar el déficit público, bajar la inflación y aumentar los beneficios empresariales, no solucionaron el aumento del desempleo y la baja renta per cápita.
- Los enfrentamientos y discusiones entre las regiones españolas originados por la configuración del Estado de las Autonomías.
- La oposición eclesiástica católica a la legalización del divorcio y a las reformas educativas.
- El fin de la “política de consenso” establecida en los Pactos de la Moncloa ya que tras la victoria de las fuerzas izquierdistas (PSOE y PCE) en las elecciones municipales de las grandes ciudades en abril de 1980, el PSOE inició una dura oposición, y en mayo de 1980 una moción de censura, al gobierno de Adolfo Suárez.
El Golpe de Estado del 23-F y la Consolidación de la Democracia
Tras la dimisión de Adolfo Suárez, otro alto cargo político de la UCD, Leopoldo Calvo Sotelo lo sustituirá.
Durante la votación de investidura del nuevo presidente, el 23 de febrero de 1981 (23-F), se produjo un intento de golpe de Estado por parte de un grupo de guardias civiles liderados por el teniente coronel Antonio Tejero y el general Alfonso Armada. Este hecho, la descomposición de la UCD por las rivalidades internas y la oposición eclesiástica católica a la Ley del Divorcio, acabaron con el gobierno de Calvo Sotelo, siendo la antesala de las terceras elecciones generales democráticas en octubre de 1982, ganadas esta vez por el PSOE.
Entre 1982 y 1993, el PSOE gobernó durante cuatro legislaturas hasta mayo de 1996 cuando perdieron frente al PP liderado por José María Aznar. A partir de 1982 se consolidó la democracia española, finalizando el proceso autonómico e integrándose España en la OTAN y en la CEE.