España en el Norte de África y la Crisis de la Restauración
A partir de 1900 España consolidó su penetración en el norte de África. En la Conferencia de Algeciras (1906), a la que acudieron diversos países europeos, y en el posterior Tratado hispanofrancés (1912) se estableció un protectorado francoespañol en Marruecos. A España le correspondió el territorio del Rif. España sobre todo buscaba recuperar su prestigio internacional.
La Semana Trágica (1909)
En 1909 los rifeños infligieron una importante derrota a las tropas españolas en el Barranco del Lobo. Se decidió entonces aumentar el número de reservistas y se dispuso que partieran algunos regimientos desde Barcelona. Así se llegó a la Semana Trágica de Barcelona, una huelga de protesta ante la salida de soldados que acabó en una revuelta popular que superó la protesta por Marruecos y acabó siendo un estallido espontáneo de todas las tensiones sociales acumuladas.
Las autoridades respondieron declarando el Estado de Guerra y enviando refuerzos para reprimir las manifestaciones. La represión posterior fue muy dura por parte del gobierno de Maura. La represión de la Semana Trágica levantó una oleada de protestas por su violencia y arbitrariedad, que provocó el fin del gobierno de Maura.
La Primera Guerra Mundial y la Huelga de 1917
Cuando comenzó la Primera Guerra Mundial, Dato declaró la neutralidad. Una situación que supuso una extraordinaria oportunidad para la economía del país. La guerra en Europa permitió exportar productos industriales y agrarios a los combatientes por los cuales estaban dispuestos a pagar altos precios. Los industriales vascos y catalanes hicieron grandes negocios.
Sin embargo, al exportar tantos productos, los productos en España subieron de precios, y la carestía se convirtió en un problema para las clases populares. El empeoramiento del nivel de vida acabaría en el movimiento huelguístico de 1917.
La huelga de 1917 fue una crisis generalizada en la que se vieron implicados militares, partidos de la oposición y organizaciones obreras.
Crisis Militar
Es una crisis militar producida por el descontento de este estamento con sus salarios y el sistema de ascensos que favorecía a los africanistas. Aparecen así Juntas Militares de Defensa, que contarían con el apoyo del rey y que deja al descubierto la debilidad del gobierno, ya que serán legalizadas y aumentarán los sueldos de los militares.
Crisis Política
También es una crisis política con la creación de la Asamblea de Parlamentarios de Barcelona formada por los marginados del turnismo (nacionalistas, catalanes, republicanos y socialistas) que exigen reformas constitucionales y la autonomía de Cataluña. Será disuelta sin violencia y el gobierno incorporará a dos miembros de la Lliga.
Crisis Social
También es una crisis social, manifestada en la huelga general indefinida convocada por la UGT y CNT debido a la inflación y las pésimas condiciones de vida de los trabajadores. No contarán con el apoyo de las Juntas Militares, ni con el de la Asamblea, siendo disuelta por el gobierno que declaró el estado de guerra.
Esta crisis supone la vuelta del ejército a la escena política y la imposibilidad de volver al turno pacífico con la aparición de gobiernos de concentración.
El Trienio Bolchevique (1918-1921)
Las protestas huelguísticas continuaron, destacando Barcelona. En Andalucía, la situación de miseria del campesinado reforzada por el aumento de los precios dio paso al trienio bolchevique (1918-1921). Se quemaron cosechas, se ocuparon tierras y muchos municipios llegaron a estar controlados por los Comités de Huelga, siendo Córdoba el máximo referente del movimiento. La declaración del Estado de guerra, la ilegalización de las organizaciones obreras y la detención de sus líderes pusieron fin a la rebelión.
El Desastre de Annual (1921)
Al comenzar la década de 1920, en la zona oriental del protectorado de Marruecos, en torno a Melilla, las tribus rifeñas hostigaban al ejército español de forma permanente. En 1921 se intentaron varias operaciones con el fin de controlar a los rebeldes. El general Silvestre inició una ofensiva hacia el interior del territorio para intentar conquistar la bahía de Alhucemas pero que acabó en el conocido como desastre de Annual, produciéndose entre 10.000 y 13.000 bajas, incluido Silvestre.
El desastre de Annual supone la crispación de la opinión pública ante el altísimo coste de la guerra de Marruecos que culpa al gobierno y al ejército por su incapacidad de hacer frente a la situación. Además se decidió la creación de una comisión de investigación a cargo del general Picasso, que da lugar al polémico Expediente Picasso (que salpicaba a altos mandos del ejército y que podía llegar hasta el propio Alfonso XIII) que crispa los ánimos en el ejército. El informe movilizó a sectores del ejército y de la derecha y dicho expediente nunca llegará a las Cortes porque en 1923 el general Primo de Rivera dará un golpe de estado.