Fundamentos ideológicos
El nuevo régimen se definía por la concentración de todos los poderes políticos en la figura del Jefe del Estado, Franco, que concentra el poder ejecutivo y legislativo. Incluso parte del poder Judicial, convirtiéndolo en un instrumento del ejecutivo. Todos los organismos creados durante la guerra (Consejo de Ministros) eran órganos meramente consultivos.
El dictador era, además, generalísimo de los tres ejércitos, jefe del partido único (FET y de las JONS), el ‘Caudillo’ era jefe del gobierno, del Estado, generalísimo y por si no fuera suficiente responsable ante Dios y ante la Historia’. La constitución de 1931 fue suprimida, así como los partidos y sindicatos. Sólo se reconocía el partido único.
Para crear una cierta estructura institucional, el dictador aprobó una serie de leyes fundamentales:
- Fuero del Trabajo 1938 (declarada ley fundamental el 1947)
- Fuero de los españoles (recogía derechos y deberes de los españoles) 1945
- Ley del Referéndum nacional 1945
- Ley de sucesión en la jefatura del Estado 1947 (España se definía como ‘Reino’)
Se trataba de garantizar la continuidad del sistema en un momento de aislamiento internacional.
El nuevo sistema quedó articulado como una mezcla de fascismo (caudillo, partido único y sindicato único) y de conservadurismo tradicional (defensa de los intereses de la oligarquía agraria, del ejército y de la iglesia).
El régimen efectuó un rígido control social a través de la Falange. Ascenso de una serie de personas que por su adhesión al régimen gozaron de privilegios en tiempos de escasez y de hambre. La Falange dotó al régimen de una parafernalia (himnos, uniformes, desfiles) y de una cierta política.
Evolución del régimen
1.1 Evolución y coyuntura exterior: 1939-1959
A) 1939-1942. Franco decide una política de neutralidad, a pesar de que durante la guerra civil Alemania e Italia le habían ayudado. En la formación de gobiernos con predominio de falangistas y militares, la presencia de Serrano Suñer (partidario del apoyo a Alemania), se encuentran las señales del apoyo no formal, pero si evidente al bloque fascista. En 1940 se pasa de la neutralidad a la ‘no beligerancia’ y en octubre se produce la entrevista de Hendaya, que equivalía a un alineamiento moral con el Eje. El momento de máxima colaboración se produjo en junio de 1941, con la formación de la División Azul, ‘voluntarios’ para colaborar en el combate contra el ‘comunismo’.
B) A partir de 1942, la pérdida progresiva de posiciones por parte de Alemania provocó una rectificación, Serrano Suñer fue apartado para iniciar una aproximación a los aliados, a los que se garantizó la neutralidad.
C) La victoria aliada en 1945, sensación de peligro, que no era bien visto por los vencedores. El Caudillo impuso cambios en los signos externos: disolvió la organización paramilitar de la Falange, promulgó el Fuero de los Españoles y cambió de gobierno con más presencia de católicos.
La ONU rechazó por aclamación la entrada de España y una resolución de la misma en 1946 pedía la retirada de embajadores de España. Aislamiento de España.
CONTEXTO MUNDIAL 1945-1959
Tras la Segunda Guerra Mundial se inicia también un periodo de tensión entre EEUU y la URSS (aliados en la guerra) que conocemos como guerra fría. El invierno de 1947-48 se inicia el bloqueo de Berlín y es en este contexto que surge la idea de crear un pacto militar antisocialista (OTAN en 1949), a lo que respondieron los países del Este con el Pacto de Varsovia (1955). El mundo se dividía en dos bloques y la geopolítica mundial giró desde entonces alrededor del nuevo conflicto. En la nueva organización del mundo, la España de Franco constituyó más un fiel aliado anticomunista que no un enemigo.
En 1953 se firmaron unos acuerdos bilaterales (Tratados de Amistad ESP/USA) que permitieron la ayuda norteamericana a cambio de la instalación de bases militares. España fue admitida en los organismos internacionales (ONU, FMI…). Europa vivía en los años 50 una época de prosperidad y reconstrucción, por lo que necesitaba mano de obra abundante y mercados sus capitales. Se abrieron fronteras a la emigración y se inició la llegada de turistas. 1953 para concordato con la Santa Sede, lo que significaba el reconocimiento absoluto de la legitimidad del régimen de Franco.
La consolidación del régimen: 1959-1973
La política económica de la autarquía había fracasado. La vida había subido un 40%, el déficit comercial había alcanzado cifras astronómicas. La vieja ideología comenzó a quedar totalmente anacrónica en una España que comenzaba a hacer del desarrollo económico y del Industrialismo la ideología oficial del Estado.
La entrada dentro del aparato del Estado de nuevas generaciones de políticos, los llamados tecnócratas, fue desplazando progresivamente falangistas. La entrada de un núcleo importante de miembros del Opus Dei. La pérdida de la influencia de los falangistas tuvo como signo más evidente la sustitución de la Falange por una nueva formación: el Movimiento Nacional.
Se aprueban nuevas leyes fundamentales:
- Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958) que reconocía España como ‘una monarquía tradicional, católica, social y representativa’
- En 1966 se aprobó la Ley Orgánica del Estado que caracterizaba a España como una democracia orgánica: se introducen en las Cortes 100 procuradores representantes de la Familia y de carácter electivo. Las Cortes aceptaron, en 1969, al príncipe Juan Carlos como sucesor a la jefatura del Estado con el título de rey (‘atado y bien atado’).
Intentos aperturistas que supondrán la aprobación de otras leyes reseñables como en 1966 de la Ley de Prensa (Fraga) que suprimía la censura previa, la Ley de Educación (1970).
El final del franquismo: 1973-1975
Continuaban las discrepancias. Las divisiones entre ‘aperturistas’, partidarios de una cierta liberalización política del régimen y los ‘inmovilistas’, Franco nombró a Luis Carrero Blanco vicepresidente del gobierno (1967). Sus años de gobierno se caracterizaron por el mantenimiento de una situación contradictoria que cabalgaba entre la reforma y la represión.
Tras el escándalo MATESA. El nuevo gobierno (1969) fue ‘monocolor’ en manos de miembros del Opus Dei (tecnócratas).
El año 1973, cuando Carrero Blanco fue nombrado presidente del Gobierno (hasta entonces Franco era Jefe del Estado y del Gobierno) la situación de crisis se agudizaba más. La muerte de Carrero Blanco en un atentado efectuado por miembros de ETA. Carlos Arias Navarro fue elegido para sustituirle, prometió importantes reformas (‘espíritu del 12 de febrero’) que se vieron frenadas por:
- La homilía de Monseñor Añoveros, obispo de Bilbao, que contenía duras censuras contra el régimen.
- Éxito de la revolución de los claveles en Portugal.
Franco enfermó y ya no se repondría.
Varios hechos marcaron los últimos meses de vida del régimen franquista:
- Ejecución en septiembre de 1975 de cinco acusados de actividades violentas, a pesar de las repetidas peticiones de clemencia.
- La Marcha Verde marroquí sobre el Sahara español (que suponía, de facto, la ocupación por parte de Marruecos de la ya excolonia española). Previamente en 1956 se producía la independencia del protectorado español del Norte de Marruecos.
- La muerte de Franco acontece el 20 de noviembre de 1975, debida a un ‘choque séptico’.