Vacío de poder tras la marcha de Carlos IV y Fernando VII
Surgimiento de las Juntas de Defensa
Características
Afirmación de la soberanía nacional: El poder residía en el pueblo, representado en las Cortes.
Monarquía limitada: División de poderes entre las Cortes (legislativo), el monarca y el gobierno (ejecutivo), y los tribunales (judicial).
Sufragio universal e indirecto: Los diputados representaban a los ciudadanos, no a los estamentos.
Derechos y libertades individuales: Educación, libertad de pensamiento y opinión, libertad de imprenta, propiedad privada, inviolabilidad del domicilio.
Confesionalidad católica: Tolerancia religiosa defendida con la supresión de la Inquisición.
Organización territorial: Provincias con diputaciones provinciales y municipios con ayuntamientos elegidos por el pueblo.
Milicia Nacional: Cuerpo de civiles armados para la defensa del sistema constitucional.
Consecuencias
Primer intento serio de racionalizar el Estado y el ejercicio del poder sobre principios liberales.
Admirada e imitada en otros países.
Constitución de 1869: La Primera Democrática
Antecedentes
Revolución de 1868 «La Glorios»)
Exilio de Isabel II
Gobierno provisional presidido por Serrano
Características
Soberanía nacional de base popular: Monarquía constitucional y democrática.
Sufragio universal masculino: Para mayores de 25 años.
Separación completa de poderes:
Ejecutivo: Gobierno y monarca.
Legislativo: Cortes bicamerales (Congreso y Senado).
Judicial: Jueces y tribunales independientes.
Amplio régimen de derechos y libertades: Manifestación, asociación, enseñanza, opinión, imprenta, propiedad privada, inviolabilidad del domicilio, libertad religiosa.
Provincias de ultramar: Mismos derechos que los peninsulares, excepto Filipinas.
Consecuencias
Primera Constitución democrática de España.
Establecimiento de una nueva dinastía (Amadeo I de Saboya).