El Reinado de Carlos I de España
Política Interior
La dinastía austriaca llegó al trono español por el matrimonio de Juana, hija y heredera de los Reyes Católicos, y el príncipe Felipe de Habsburgo, hijo de Maximiliano, archiduque de Austria y emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico. Este matrimonio formaba parte de la política de alianzas matrimoniales que llevaron a cabo los Reyes Católicos con sus hijos, con el objetivo de ampliar poder en Europa y aislar a su gran enemiga Francia. Tras la muerte de Fernando el Católico en 1516 y dada la incapacidad de Juana de Castilla para gobernar, Carlos I, su hijo (nacido en Gante en 1500) fue proclamado rey en Bruselas, y llegó a España en 1517. Cuando en 1519 falleció su abuelo, el emperador Maximiliano, Carlos fue además elegido emperador con el nombre de Carlos V de Alemania.
Carlos I había sido educado en Flandes y apenas conocía el castellano. Heredó el trono en una situación especial, ya que su madre estaba encerrada en Tordesillas (Valladolid). El monarca llegó a Castilla rodeado de sus consejeros de Flandes y Borgoña, a quienes encomendó las tareas de gobierno. Esto hizo crecer la desconfianza de la nobleza, en especial, la de Castilla, que veía a Carlos como un rey extranjero. El descontento aumentó cuando se exigieron nuevos impuestos para financiar las guerras con Europa, que acabó provocando graves revueltas contra la política de Carlos I, como la guerra de las Comunidades de Castilla y las Germanías en el Reino de Valencia y en las islas Baleares.
Las Comunidades
Los comuneros fueron:
- Nobles (hidalgos) de ciudades como Toledo, Burgos y Segovia, que pensaban que el rey protegía más los intereses de Flandes que los de Castilla.
- Artesanos y campesinos castellanos que se oponían a pagar nuevos impuestos para financiar las guerras europeas y su coronación como emperador.
- Todos ellos rechazaban el poder de los consejeros extranjeros del rey.
Los comuneros reclamaban:
- La protección industrial nacional
- El respeto a las leyes del reino
- Una mayor participación política
- La permanencia del rey en Castilla en temporadas más largas y que aprendiera castellano.
El conflicto se desencadenó por la marcha de Carlos I hacia Alemania en 1520 dejando como regente a Adriano de Utrecht. En Tordesillas pidieron a Juana, la madre del rey, que reclamase el trono de la monarquía hispánica, pero ella lo rechazó. La batalla decisiva tuvo lugar en Villalar (Valladolid, 23 de abril de 1521) en la que las tropas reales vencieron a los comuneros y sus principales líderes (Bravo, Maldonado y Padilla) fueron ajusticiados. Los comuneros resistieron un poco más en la ciudad de Toledo, pero finalmente fueron derrotados en 1522.
Las Germanías
- Se dieron en la Corona de Aragón: especialmente en el reino de Valencia y en las islas Baleares.
- En estas revueltas al descontento político se le unió la conflictividad social.
- Los artesanos se aliaron con los campesinos para protestar por los abusos de la nobleza que acaparaba los cargos municipales de las ciudades y cobraba arrendamientos abusivos a los campesinos.
- La revuelta acabó en 1523 cuando el rey apoyó a la nobleza para poner fin a las protestas.
Política Exterior
Carlos I heredó el título de emperador en unas circunstancias sumamente difíciles:
- Se acababa de producir una rebelión religiosa y política de los protestantes en Europa central.
- Francia aspiraba al dominio de Italia.
- En el Mediterráneo aparecía cada vez más amenazadora la expansión del imperio turco.
Ante estas amenazas, Carlos I llevó a cabo su política con el objetivo de mantener una monarquía cristiana y universal. Para defender este proyecto se vio inmerso en continuas guerras:
- Contra Francia, que rivalizaba con los Habsburgo por el control de la península italiana y el rey francés Francisco I fue uno de los grandes opositores de Carlos I. Carlos I le derrotó en la batalla de Pavía en 1525. Como resultado, el Milanesado quedó incorporado al Imperio Hispánico.
- Contra los príncipes alemanes protestantes. En 1555 firmó la Paz de Augsburgo que aceptaba la expansión del protestantismo.
- Contra los turcos. Tras la toma de Constantinopla en 1453, el imperio turco-otomano continuó su expansión por el Mediterráneo y el norte de África. Carlos I, ocupó Túnez (1535) para detener el avance turco, pero no fue suficiente.
A los 56 años, con graves problemas de salud abdicó en su hijo Felipe II, a quien decidió cederle la Corona y todos sus territorios, salvo los dominios del archiducado de Austria y los derechos al título imperial, que fueron cedidos a su hermano Fernando.