La Historia de España: Del Reinado de Carlos IV al Sexenio Democrático

El Reinado de Carlos IV y la Guerra de la Independencia

En 1788 muere Carlos III, sucediendo en el trono su hijo Carlos IV (1788-1808). La España que hereda arrastra graves problemas que se acentúan durante su reinado: una economía atrasada de base agraria, una crisis de subsistencia, la persistencia de una sociedad estamental y un déficit crónico de Hacienda.

El gobierno de Carlos IV estuvo muy influenciado por la evolución política de la vecina Francia. Tras el estallido de la Revolución Francesa en 1789, y por miedo a que sucediera lo mismo en España, el rey puso fin a las reformas ilustradas y llevó al país a participar en la Guerra de la Convención (1793-1795) contra la Francia revolucionaria. Con la llegada de Napoleón al poder, las relaciones cambiaron y se produjo una alianza entre ambos Estados a través de los tratados de San Ildefonso y, posteriormente, el Tratado de Fontainebleau, por el que se concedía permiso al ejército francés para cruzar España en su marcha contra Portugal.

La Impopularidad de los Reyes y el Ascenso de Napoleón

Uno de los grandes problemas que tuvo que afrontar la monarquía fue la impopularidad de los reyes, agravada por el rechazo al favorito del rey, Manuel Godoy. Esto dio lugar a conspiraciones contra los reyes, culminando en el Motín de Aranjuez de 1808, una revuelta popular que forzó la abdicación de Carlos IV y la proclamación de su hijo, el príncipe Fernando.

Napoleón, con la intención de mediar en la situación, reunió a padre e hijo en Bayona. Allí se produjeron las Abdicaciones de Bayona, donde Napoleón obligó a Carlos IV y Fernando VII a entregar la corona de España a su hermano, José I Bonaparte, comenzando así la ocupación francesa del reino.

La Guerra de la Independencia (1808-1814)

La Guerra de la Independencia comenzó el 2 de mayo de 1808 con un levantamiento popular en Madrid contra la ocupación francesa, y se prolongó hasta 1814. Esta guerra enfrentó a las Juntas de Defensa contra el ejército francés, y contó con el apoyo del Reino Unido.

Fases de la Guerra:

  1. Junio-noviembre de 1808: Contagio de la insurrección de Madrid a otras regiones y victoria española en la batalla de Bailén.
  2. 1808-1812: Intervención de Napoleón, ocupación de la mayor parte de la península, victoria francesa en la batalla de Ocaña y desarrollo de la guerra de guerrillas.
  3. 1812-1814: Victoria anglo-española en las batallas de Arapiles y Vitoria. El fin de la guerra se reguló con el Tratado de Valençay, reconociendo a Fernando VII como rey de España.

La Constitución de 1812 y el Reinado de Fernando VII

Tras año y medio de discusión, se promulgó el 19 de marzo de 1812 la nueva constitución, conocida popularmente como “La Pepa”. Esta constitución buscaba conciliar las tradiciones del pasado con el nuevo espíritu revolucionario surgido en Francia.

Principios de la Constitución de 1812:

  • Soberanía nacional.
  • Reconocimiento de los derechos y libertades individuales e igualdad ante la ley.
  • División de poderes: Cortes unicamerales (legislativo), rey y gobierno (ejecutivo) y poder judicial independiente.
  • Religión católica como única religión oficial.
  • Sufragio universal masculino.
  • Creación de la Milicia Nacional.
  • Monarquía moderada con derecho de veto transitorio para el rey.
  • Libertad económica.

La Constitución de 1812 apenas pudo aplicarse debido al regreso de Fernando VII.

El Reinado de Fernando VII (1814-1833)

El reinado de Fernando VII se caracterizó por la pugna entre el absolutismo y el liberalismo, y se divide en tres etapas:

1. Sexenio Absolutista (1814-1820)

Fernando VII, en desacuerdo con la Constitución de 1812, se apoyó en los absolutistas y firmó el Manifiesto de los Persas, documento que lo animaba a gobernar de forma absolutista. El rey abolió la Constitución, lo que provocó la oposición de los liberales, quienes protagonizaron varios pronunciamientos.

2. Trienio Liberal (1820-1823)

El pronunciamiento del Coronel Riego en 1820 triunfó, restableciendo la Constitución de 1812 y obligando al rey a jurarla. Se impuso un régimen liberal, dividiéndose los liberales entre doceañistas (moderados) y veinteañistas (radicales). La oposición antiliberal, la Regencia de Urgel y la intervención de la Santa Alianza con los Cien Mil Hijos de San Luis restauraron el absolutismo.

3. Década Ominosa (1823-1833)

Fernando VII recuperó el poder absoluto e inició una fuerte represión, provocando el exilio de muchos liberales. Se suprimieron las reformas liberales y se restableció el Antiguo Régimen. La crisis de la Hacienda Pública, agravada por la pérdida de las colonias americanas, fue enfrentada por Luis López Ballesteros con medidas como la creación del Banco de San Fernando y el primer Código de Comercio de España.

Ante la falta de descendencia masculina, Fernando VII promulgó la Pragmática Sanción, permitiendo la sucesión femenina en ausencia de un heredero varón. Esta decisión sería clave para el futuro de España.

El Reinado de Isabel II y la Construcción del Estado Liberal

La muerte de Fernando VII en 1833 abrió un conflicto sucesorio entre los partidarios de Isabel II, hija de Fernando VII, y los de Carlos María Isidro, hermano del rey. Este conflicto desembocó en la Primera Guerra Carlista (1833-1840).

La Primera Guerra Carlista (1833-1840)

La guerra enfrentó a los liberales, partidarios de Isabel II, con los carlistas, defensores del absolutismo y los fueros. La guerra se desarrolló en tres fases, finalizando con la victoria isabelina tras el Convenio de Vergara (1839). A pesar de la derrota, el carlismo se mantuvo activo durante el siglo XIX.

El Período de Regencias (1833-1843)

Durante la minoría de edad de Isabel II, se sucedieron dos regencias: la de María Cristina de Borbón (1833-1840) y la del general Espartero (1840-1843). En este período se inició la construcción del Estado liberal en España.

Regencia de María Cristina (1833-1840)

María Cristina se apoyó en los liberales, divididos entre moderados y progresistas. Durante su regencia se aprobó el Estatuto Real (1834), se realizó la desamortización de Mendizábal (1836) y se promulgó la Constitución de 1837.

Regencia de Espartero (1840-1843)

El general Espartero, de ideas progresistas, gobernó de forma autoritaria, lo que provocó un levantamiento que lo obligó a exiliarse.

La Década Moderada (1844-1854)

Con la mayoría de edad de Isabel II, los moderados controlaron el gobierno. Se aprobó la Constitución de 1845, de carácter conservador. El general Narváez fue una figura clave en este período. El pronunciamiento de Vicálvaro en 1854 puso fin a la Década Moderada.

El Sexenio Democrático (1868-1874)

El Sexenio Democrático fue un período de inestabilidad política que comenzó con la Revolución de 1868, conocida como “La Gloriosa”, que provocó el exilio de Isabel II.

La Revolución de 1868 y el Gobierno Provisional

La Revolución de 1868 estuvo motivada por una crisis económica, política y social. El pronunciamiento del almirante Topete en Cádiz dio inicio a la revolución, que culminó con el exilio de Isabel II. Se formó un Gobierno Provisional presidido por Serrano y Prim.

La Constitución de 1869 y la Monarquía de Amadeo I (1871-1873)

Las Cortes Constituyentes aprobaron la Constitución de 1869, que establecía una monarquía parlamentaria. Tras una búsqueda de un nuevo rey, se eligió a Amadeo de Saboya. El reinado de Amadeo I estuvo marcado por la inestabilidad política, la Tercera Guerra Carlista y la Guerra de Cuba. Amadeo I abdicó en 1873.

La Primera República (1873-1874)

Tras la abdicación de Amadeo I, se proclamó la Primera República Española. La República tuvo que hacer frente a graves problemas: la Guerra Carlista, la Guerra de Cuba, la crisis económica y la oposición de diversos sectores. La falta de consenso y las divisiones internas provocaron su caída en 1874.

Dictadura de Serrano y la Restauración Borbónica

Tras un breve período de dictadura del general Serrano, el pronunciamiento del general Martínez Campos en 1874 restauró la monarquía borbónica en la figura de Alfonso XII, hijo de Isabel II. Con la Restauración se iniciaba una nueva etapa en la historia de España.

Conclusión

El período que abarca desde el reinado de Carlos IV hasta el Sexenio Democrático fue una época de grandes cambios y convulsiones en España. La Guerra de la Independencia, la Constitución de 1812, el reinado de Fernando VII, las Guerras Carlistas, el reinado de Isabel II, el Sexenio Democrático y la Restauración Borbónica son hitos que marcaron la historia de España en el siglo XIX, un siglo de construcción del Estado liberal y de búsqueda de un modelo político estable.

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