El Contraataque y la Victoria Aliada (1942-1945)

1942: El Año Decisivo

Alemania, Italia y Japón pasaron a la defensiva. En el Pacífico, Japón sufrió serias derrotas en Midway y Guadalcanal, que le hicieron perder sus mejores pilotos y portaaviones. En el norte de África, el ejército alemán fue derrotado por los británicos en El Alamein, a 100 km de Alejandría. Además, en Marruecos y Argelia desembarcaron tropas estadounidenses que atacaron por la retaguardia y cercaron a los alemanes.

El Avance Soviético en el Frente Oriental

El momento decisivo se produjo en el frente oriental en noviembre de 1942: una contraofensiva soviética cercó al ejército alemán que luchaba en Stalingrado. Fue una gran derrota para la causa del nazismo, hasta entonces victorioso, y supuso el aumento del prestigio del Ejército Rojo. Desde 1943, la URSS lanzó muchas ofensivas. En verano de 1943 rompió el frente en Kursk, en la mayor batalla de tanques de la historia, tras la cual Alemania sufrió una gran derrota. En 1944 comenzó la liberación de los estados satélites nazis. Grecia quedó fuera de la influencia soviética por un acuerdo con los británicos. Yugoslavia fue liberada gracias a la actuación de un ejército rebelde de partisanos dirigidos por Tito. En abril de 1945, el Ejército Rojo llegó a Berlín.

La Campaña de Italia

Después de derrotar a los alemanes en el norte de África, el ejército aliado desembarcó en el sur de Italia con el objetivo de aliviar el esfuerzo del Ejército Rojo abriendo otro frente de guerra. Mussolini dimitió tras ser arrestado, fue liberado por los alemanes y se creó una guerra civil en Italia entre fascistas y antifascistas. El ejército aliado avanzó lentamente por Italia y en 1945 estaba estancado a la altura de Florencia.

Liberación de Francia y el Paso del Rin

Tras reunir un numeroso ejército en Gran Bretaña, los aliados desembarcaron en las costas de Normandía el 6 de junio de 1944. Previamente, aviones habían bombardeado las defensas atlánticas alemanas. Después, el ejército aliado liberó París y se encaminó hacia el Rin en noviembre de 1944. El avance aliado se retrasó por rivalidades entre los generales al mando de las tropas, deseosos de imponer sus propios planes. Eisenhower, estadounidense, se mostraba muy prudente, mientras que Montgomery, británico, y Patton, estadounidense, rivalizaban por atravesar el Rin en primer lugar; a ellos se unió el francés De Gaulle. Los alemanes lanzaron una ofensiva a través del macizo de Las Ardenas, pero al fracasar, su capacidad de defensa se resintió mucho y los estadounidenses cruzaron el Rin e invadieron Alemania. El 25 de abril de 1945 se encontraron las tropas estadounidenses con el Ejército Soviético en Berlín. La resistencia alemana fue importante y hasta el último momento mantuvo el respaldo a Hitler. La rendición alemana se produjo el 7 de mayo de 1945.

La Guerra en el Pacífico y Capitulación de Japón

Las rivalidades sobre la dirección de la guerra afectaron a las operaciones estadounidenses en el Pacífico: el almirante Nimitz, al mando de la flota con base en las islas Hawái, consideraba que el ataque debía realizarlo la Armada en el centro del Pacífico; el general MacArthur, al cargo de las tropas con base en Australia, era partidario de llevar a cabo un ataque por el sur, liberando islas y archipiélagos. Al final, se aplicaron ambas tácticas, lo que retrasó el avance estadounidense y la rendición de Japón. Los desembarcos y conquistas de las islas del Pacífico por parte de los marines estadounidenses fueron muy duros debido a la tenaz resistencia japonesa. Las batallas más importantes fueron en Tarawa, Filipinas, Iwo Jima y Okinawa. Los bombardeos sobre Japón se incrementaron y en agosto de 1945 los estadounidenses lanzaron bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki. El poder destructor de esta nueva arma obligó al emperador japonés Hirohito a capitular el 2 de septiembre de 1945.

La Resistencia

La difícil alianza entre conservadores, liberales, demócratas y comunistas se formó a partir de 1941. La entrada de la URSS movilizó al comunismo internacional. Los distintos partidos comunistas, minoritarios en los países europeos, se convirtieron en los principales animadores de la oposición interior. Estos grupos de saboteadores, partisanos y guerrilleros, conocidos como la Resistencia, lucharon contra los invasores extranjeros al igual que contra los regímenes colaboracionistas.

Movimientos de la Resistencia:

• En Yugoslavia y Albania, la resistencia liberó ambos países.
• En Francia e Italia, apoyó a las fuerzas de liberación.
• En Polonia y Grecia, temían tanto a los ocupantes como a los libertadores, por lo que no pudieron expulsar a los alemanes.