La Rusia Zarista y la Revolución Bolchevique

La Rusia Zarista a comienzos del siglo XX

A comienzos del siglo XX, Rusia era un inmenso imperio plurinacional que se extendía desde el Mar Báltico hasta China y el Pacífico. Los rusos eran la minoría étnica más numerosa y habían impuesto a pueblos muy diferentes una política de rusificación: administración, idioma ruso y religión ortodoxa.

Otros pueblos de Rusia eran eslavos, pero existían diferencias de idioma y religión. Los lituanos y los polacos eran católicos y tenían una lengua propia. Los musulmanes y los tártaros de Asia Central, los fineses de Escandinavia y los judíos estaban situados en varios lugares, pero no compartían con los rusos ni su religión ni su etnia. Únicamente les unía la autoridad del emperador, Nicolás II (Zar de todas las Rusias desde 1894), perteneciente a la familia Romanov desde el siglo XVII.

Atraso económico y social

El Imperio Ruso era un área económica y socialmente atrasada. Hacia 1914, el 80% de la población vivía de la agricultura. Desde 1861 se decretó la emancipación de los siervos, pero en la práctica los campesinos permanecían ligados a la vida rural como jornaleros o pequeños arrendatarios.

El desarrollo industrial fue tardío en Rusia. A partir de 1880 se aceleró, impulsado por el ferrocarril (como el Transiberiano), el capital extranjero y la financiación estatal.

Sistema autocrático

Los cambios en el plano político habían sido mínimos en el siglo XIX. Rusia tenía un sistema autocrático, no existía ningún tipo de órgano representativo y los partidos políticos no estaban permitidos.

Al servicio del Zar se encontraban la aristocracia, la Iglesia ortodoxa, el ejército, una burocracia muy centralizada y un aparato represivo encabezado por la policía política.

Oposición al régimen: El ensayo de 1905

Con ocasión de la guerra ruso-japonesa (1904-1905), el desastre militar provocó el descontento general y dio lugar a una revolución en 1905. Una manifestación pacífica fue brutalmente reprimida por el ejército, lo que hizo que el Zar y su imagen quedaran destrozados y provocó huelgas.

La revuelta obrera presionó para obtener mejoras laborales y se organizaron asambleas o consejos (Soviet). Se movilizaron los liberales apoyados por la clase media y estudiantes. Su objetivo era convencer al Zar para que convocara una asamblea constituyente que diera paso a una monarquía parlamentaria.

Efectos de 1905

Tras la revolución de 1905 se mantuvo la Duma, elegida sucesivamente por un sufragio cada vez más restringido, pero no llegó a ser un auténtico parlamento.

Lenin y los bolcheviques, al igual que Trotski, hicieron un balance de la revolución de 1905 y llegaron a una serie de conclusiones:

  • La burguesía como fuerza revolucionaria era débil y tímida. Por tanto, la clase obrera podía sustituirla, pero esto contradecía una idea socialista: la revolución burguesa debía preceder a la revolución obrera.
  • El campesinado, un grupo social que el marxismo consideraba conservador, podía ser revolucionario y que con una propaganda adecuada podía convertirse en aliado de los obreros industriales.
  • Un partido muy disciplinado debía sustituir a las fuerzas que habían actuado en la revolución de 1905. Lenin creía que el Partido Bolchevique debía dirigir la siguiente etapa revolucionaria en Rusia.

Revolución de 1917

La caída del Zar

La huelga del 23 de febrero de 1917, convocada en Petrogrado por las obreras del sector textil, se convirtió en una huelga general y más tarde tuvo lugar el amotinamiento de la guarnición militar. Se formó un Soviet generalmente dirigido por mencheviques y socialrevolucionarios.

La Duma estableció un gobierno provisional presidido por el príncipe Lvov que obligó al Zar Nicolás II a abdicar. El nuevo gobierno pactó con el Soviet y un socialista moderado, Kerenski, se convirtió en presidente del gobierno con el objetivo de convocar elecciones para formar una asamblea constituyente. Por ello se estableció un doble poder: el del gobierno y el del Soviet.

La ascensión de los bolcheviques

El socialismo europeo sufrió una división entre los que apoyaban a sus respectivos gobiernos frente a otros países y los que eran partidarios de aprovechar el conflicto bélico para enfrentar a trabajadores y burgueses.

Lenin, que se había exiliado tras la revolución y regresado a Rusia en abril de 1917, propuso las Tesis de Abril. El programa de Lenin se resumía en «Paz, pan y tierra».

El gobierno de Kerenski se negó a aceptar las peticiones y, como consecuencia, perdió apoyos entre la izquierda. Tampoco reprimió los movimientos de protesta ni un intento de golpe de estado. Por esta razón, perdió apoyos también entre la derecha.

En octubre de 1917, Lenin provocó una rebelión armada contra el gobierno. Los bolcheviques toman el poder.

Los primeros pasos del nuevo régimen

El objetivo de los bolcheviques era mantenerse en el poder, a la espera del estallido de la revolución en el resto de Europa. Lenin no creía que pudiese implantarse el socialismo en un solo país.

Los bolcheviques adoptaron una serie de medidas:

Primeras decisiones de los bolcheviques

  • Sobre la propiedad de la tierra: Desde octubre de 1917 las tierras, en lugar de ser nacionalizadas o colectivizadas, fueron confiscadas y repartidas por los Soviets. Se abolió la propiedad privada de la tierra y se prohibió el empleo de trabajo asalariado. Con estas medidas se atendía a la demanda de los campesinos pobres de acceder a una pequeña explotación agrícola independiente.
  • Sobre el trabajo: Se implantaron los comités o consejos de fábrica, dejando la producción bajo el control de los propios trabajadores, aunque los comités acabaron siendo en la práctica coordinados por los Soviets y más tarde por el Partido Bolchevique. Se nacionalizaron los bancos, se implantó la jornada laboral de 8 horas y no fueron reconocidas las deudas internacionales contraídas por el régimen zarista.
  • Sobre la guerra: El régimen bolchevique propuso poner fin a la guerra mediante la Paz de Brest-Litovsk (marzo 1918). Como consecuencia, Rusia perdió numerosos territorios: Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, parte de Bielorrusia, Ucrania y Besarabia en las fronteras occidentales; Georgia, Armenia y Azerbaiyán en el Cáucaso. Tras la Primera Guerra Mundial estas áreas se transformaron en estados independientes. Sin embargo, tras la guerra civil rusa solo permanecieron independientes Polonia, Finlandia y los tres estados bálticos.
  • Sobre la organización del estado: Los bolcheviques crearon un Consejo de Comisarios del Pueblo, un gobierno obrero y campesino (Lenin como presidente, Trotski en asuntos exteriores y Stalin como comisario para las nacionalidades). Este gobierno era independiente y con poderes ilimitados. La Asamblea Constituyente y el poder legislativo pasaron a los Soviets, que consiguieron la autodeterminación. Finalmente se aprobó una constitución para la República Federal Socialista Soviética.

La dictadura de Stalin

Tras la muerte de Lenin en 1924, Stalin marginó a Trotski y a otros dirigentes, haciéndose con el poder absoluto e instaurando una dictadura basada en:

  • Culto a la personalidad: Una propaganda que presentaba a Stalin como el gran padre benefactor de todos los rusos.
  • Partido de masas: La dictadura se sustentó sobre un partido de masas teñido de un nacionalismo. Dado que los militares, los economistas, los técnicos y los funcionarios tenían que formar parte del Partido Comunista, eran obedientes servidores de Stalin.
  • Marxismo-leninismo: Esta ideología se convirtió en una doctrina religiosa. Quien se apartaba de ella era considerado hereje y podía ser detenido y ejecutado.
  • Socialismo en un solo país: La Tercera Internacional se convirtió en un organismo al servicio de los intereses de la URSS como gran potencia. Debían someterse todos los partidos; de lo contrario podían ser expulsados.
  • Régimen de terror: Para mantener esta política se impuso un régimen de terror y se procedió a las purgas, en las que se condenó, juzgó y ejecutó a todos los que no se ajustaban a esta política.

Frente antibolchevique

Durante la guerra civil rusa (1918-1922), los bolcheviques se enfrentaron a un frente antibolchevique formado por:

  • Ejércitos de rusos blancos, llamados así por oposición a los rojos, dirigidos por generales zaristas y apoyados por el clero ortodoxo y por grupos conservadores.
  • Ejércitos de grupos marginados por los bolcheviques, entre ellos se encontraban los socialrevolucionarios y anarquistas.
  • Ejércitos de naciones periféricas, que veían en Rusia una amenaza.
  • Ejércitos aliados, integrados por combatientes extranjeros que apoyaron a los blancos.

¿Por qué triunfaron los bolcheviques en la guerra civil?

  • La desunión y heterogeneidad de sus adversarios.
  • El apoyo de campesinos y obreros temerosos de perder las conquistas de la revolución y la integridad territorial de Rusia.
  • La creación del Ejército Rojo organizado por Trotski.
  • Una fuerte represión interna a través de la Checa. El Partido Bolchevique, ahora comunista, se convirtió en la única fuerza política.
  • Una economía de guerra en la que todos los recursos se encaminaron a abastecer el frente. Para ello se llevó a cabo una política conocida como comunismo de guerra, basada en la nacionalización. Este malestar, combinado con la dura represión, provocó motines y revueltas que fueron aplastadas brutalmente.

La Tercera Internacional

Los bolcheviques diseñaron un nuevo partido revolucionario mundial y crearon una nueva Internacional Socialista formada por todos los partidos del mundo. Formaron nuevos partidos comunistas y se fundó la Tercera Internacional o Internacional Comunista en 1919.

En la Tercera Internacional podían formar parte grupos comunistas, es decir, partidos que hubiesen adoptado el modelo bolchevique. Aunque en principio muchos partidos socialistas simpatizaron con la revolución internacional, las condiciones exigidas provocaron roturas. La Tercera Internacional supuso la división del movimiento obrero marxista y no impidió el aislamiento internacional del régimen bolchevique.

Construcción de la URSS

La Nueva Política Económica (NEP)

A partir de 1921 y ante el descontento popular, el Partido Comunista puso en marcha la Nueva Política Económica (NEP), una serie de medidas que incluían:

  • Finalización de las confiscaciones de tierras. Los campesinos pudieron disponer libremente de ellas y comercializar sus productos.
  • Las pequeñas industrias dejaron de ser nacionalizadas y volvieron a manos privadas. La producción aumentó y mejoró el abastecimiento. Sin embargo, los precios agrarios comenzaron a subir.

La NEP provocó un clima de debate político y económico. En la práctica, supuso un reforzamiento del partido único y de la centralización territorial del poder. Así nació en 1922 la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS o CCCP, en ruso).

Ascensión de Stalin

Lenin se mantuvo al frente de la URSS hasta su muerte en 1924. La dirección del partido iba a ser colegiada entre los principales dirigentes, incluyendo a Trotski.

Trotski podía considerarse el sucesor de Lenin, pero Stalin lo marginó y acabó expulsándolo. Más tarde hizo lo mismo con otros dirigentes que le hacían sombra. En 1940, Trotski fue asesinado por un comunista catalán llamado Ramón Mercader.

La política económica de Stalin

En el ámbito económico se sustituyó la NEP por una planificación autoritaria y centralizada de la economía. El objetivo era industrializar el país en el menor tiempo posible.

Medidas económicas:

  • Establecimiento de los planes quinquenales, que lograron pasar la crisis de 1929.
  • La colectivización de la agricultura. La propiedad privada en el campo desapareció y fue sustituida por los koljoses y los sovjoses.
  • La apuesta por la industria pesada. Se desarrolló también la industria de bienes de producción frente a la de bienes de consumo.

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