Imperialismo y Colonialismo: Expansión Europea en África y Asia

I. Imperialismo y Colonialismo

El término colonización se refiere a una forma de dominio político, económico o cultural ejercida en distintas épocas de la historia, a menudo mediante esfuerzos privados. El imperialismo, en principio, configura estructuras políticas supranacionales. Su versión moderna, acuñada en 1840, se transformó en uno de los términos más complejos de la ciencia política, indicando cualquier forma de sujeción, generalmente a través de esfuerzos económicos.

Lenin denunció al imperialismo como el «estadio supremo del capitalismo», ante la necesidad de invertir capitales excedentes de las potencias occidentales en territorios de ultramar.

A fines del siglo XIX, el colonialismo e imperialismo adquieren un significado especial. La búsqueda de mercados y la explotación de materias primas impulsaron nuevos objetivos económicos: la exportación de capitales y fórmulas de dominación más sutiles, como el imperialismo norteamericano.

1. Interpretaciones Económicas del Imperialismo

  • Búsqueda de mercados: La competencia por la obtención de mercados, junto al proteccionismo iniciado por la mayoría de los países industrializados (excepto Gran Bretaña).
  • Obtención de materias primas: La búsqueda de materias primas para alimentar la maquinaria productiva de los países más industrializados.

2. Factores Demográficos y Sociales

Hasta 1914, más de 30 millones de europeos emigraron a ultramar, preferentemente a Estados Unidos. El colonialismo tuvo efectos beneficiosos desde el punto de vista social: contribuyó a paliar las fases de recesión económica y el paro. El aumento de la renta del proletariado provocó una disminución de la plusvalía de los capitales e incitó la inversión en las colonias, donde los salarios eran mucho menores.

3. Interpretaciones Políticas

Defendida por William Langer en «The Diplomacy of Imperialism» y más tarde por Winslow y Raymond Aron, esta interpretación sitúa la gloria, el poder y el prestigio como fundamentos del colonialismo. Las motivaciones políticas de la expansión colonial se entremezclan con elementos afectivos o de psicología social.

  • Razones diplomáticas: La política colonial de Bismarck de trasplantar el área colonial a la política de equilibrio europeo.
  • Preocupaciones geoestratégicas: Asegurar las rutas marítimas y zonas neurálgicas (Estrecho de Gibraltar, Canal de Suez). El nacionalismo conservador se manifiesta en la «mística imperialista», que utiliza argumentos como el honor nacional, el prestigio político y la misión civilizadora para justificar la expansión colonial.

4. Interpretaciones Ideológicas

Nació la idea de que el hombre civilizado debía guiar a los pueblos «atrasados», surgiendo un ideal misionero y evangelizador, tanto católico como protestante.

5. Interpretaciones Culturales

El interés por conocer el planeta impulsó numerosas expediciones geográficas bajo el amparo de sociedades científicas y de geografía, destacando las instituciones británicas. Estos descubrimientos impulsaron la industria farmacéutica y la química en general.

En Francia

El partido colonial representaba intereses diversos (financieros, militares, funcionariado colonial). Jules Ferry y Léon Gambetta impulsaron el colonialismo francés.

En Alemania

Las ideas nacionalistas se apoyaron en la «Nachbarschaftmission» (misión de vecindad), que veía la exploración y colonización como medio de evangelización. Los inicios de la política colonial alemana estuvieron motivados por el comercio y el crecimiento de la «Deutsche Kolonialverein» (Unión Colonial Alemana).

En Estados Unidos

El origen de la política colonialista se remonta a la doctrina Monroe: «América para los americanos», formulada para oponerse a la reconquista de Hispanoamérica. El corolario Olney afirmaba que ningún país europeo podía intervenir en América sin el consentimiento de Estados Unidos.

II. Expansión Europea en África y Asia

El sistema mercantilista entra en crisis con el desarrollo del liberalismo económico. Los teóricos de la escuela de Manchester (Adam Smith, David Ricardo, Jeremy Bentham) eran anticolonialistas. Las independencias de Estados Unidos y América Latina provocaron la crisis definitiva del colonialismo clásico.

El desarrollo del capitalismo financiero, con la creación de sociedades por acciones y entidades de crédito, junto a la transición del libre mercado al capitalismo monopolista (con la formación de trusts y cárteles), impulsaron el reparto del mercado mundial.

El reparto económico del mundo entre grupos monopolísticos y el reparto político entre las grandes potencias fueron fenómenos distintos, pero con una conexión innegable.

Reparto del Mundo

Gran Bretaña y Francia extendieron sus dominios en Asia y se lanzaron a la aventura africana. Alemania, bajo Bismarck, patrocinó el reparto de África en la Conferencia de Berlín. Tras el reparto, se iniciaron rivalidades que condujeron a la «paz armada» y a la Primera Guerra Mundial.

Formación del Imperio Colonial Británico

Gran Bretaña, la única gran potencia colonial en Europa, mantenía cinco tipos de colonias:

  1. Puertos de escala: Aseguraban el dominio de las rutas marítimas.
  2. Factorías comerciales: En la costa africana (Sierra Leona y Gambia).
  3. Colonias de plantación: Suministraban productos tropicales (Antillas, Honduras, Guyana).
  4. Dominios: Colonias de poblamiento blanco (Canadá, Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda).
  5. India: La mayor colonia de explotación, «la joya de la corona».

Conferencia de Berlín (1885)

Convocada por Bismarck para resolver las tensiones del reparto de ultramar, la Conferencia de Berlín tenía objetivos específicos, algunos ocultos:

  • Mantener el equilibrio europeo: Trasladar el sistema de Bismarck a las colonias.
  • Crear un imperio colonial para Alemania: El cierre de los mercados europeos dificultaba el crecimiento industrial alemán.

La conferencia reunió a representantes de 12 naciones europeas, Estados Unidos y Turquía. Los principios básicos fueron:

  • Libertad de navegación por los ríos Níger y Congo.
  • El control de la costa no implicaba ocupación efectiva del territorio.

El imperialismo militar venció al económico. En 1890, África estaba repartida. «The Times» definió este proceso como el «Scramble for Africa».

Guerra de los Bóers

Los ingleses desplazaron a los bóers (colonos holandeses) hacia el norte del río Orange, configurando dos repúblicas bóers (Transvaal y Orange) y colonias británicas (El Cabo y Natal). El descubrimiento de oro y diamantes en Transvaal provocó una avalancha de ingleses. La guerra estalló por el carácter discriminatorio del régimen bóer. A pesar de la resistencia, las tropas de Kitchener ocuparon Orange y Transvaal, que fueron incorporadas al imperio británico mediante el Tratado de Vereeniging.

Colonización de Asia

Similar al de África, el proceso se inició con factorías comerciales, principalmente británicas (India a través de la East India Company, y China, donde las actividades británicas provocaron la primera Guerra del Opio). La apertura del Canal de Suez abrió la ruta directa a Extremo Oriente.

A diferencia de África:

  1. Intervinieron potencias no europeas (Rusia, Japón, Estados Unidos).
  2. Se buscaba el control financiero y económico, mediante protectorados y concesiones.

India Británica

La India, con 5 millones de km² y 300 millones de habitantes, era un mercado importante y fuente de materias primas (algodón, té, yute, aceite). La ruina del artesanado indio provocó un movimiento nacionalista que culminó con la revuelta de la East India Company y la incorporación de la India a la Corona.

El nacionalismo indio resurgió con el Partido del Congreso, liderado por intelectuales formados en universidades anglosajonas (Gandhi), que buscaban la autonomía. Gran Bretaña se negó.

Administración Colonial

  1. Compañías privilegiadas: Obtenían amplias facultades para la explotación y administración. A partir de 1890, fueron desplazadas por la administración directa de los Estados.
  2. Administración centralizada: Utilizada por Francia, incorporaba el imperio colonial a la metrópoli. Funcionarios europeos controlaban el territorio.
  3. Protectorado: Se respetaba el gobierno indígena, que debía seguir las directrices de la metrópoli.
  4. Self-government: En colonias con fuerte poblamiento blanco, se instauró un gobierno autónomo en política interior, sometido a Gran Bretaña en política exterior. Este sistema, presente en Sudáfrica, Nueva Zelanda, Australia y Canadá, condujo a la independencia y a la Commonwealth.

III. Congreso de Viena

Encuentro internacional en Viena para restablecer las fronteras de Europa tras la derrota de Napoleón y reorganizar las ideologías políticas del Antiguo Régimen. Se basó en el principio monárquico de legitimidad y el principio de equilibrio. Los acuerdos tuvieron vigencia en Europa Central y del Este hasta la Primera Guerra Mundial. La paz se consiguió mediante el absolutismo. Convocado por Francisco I de Austria, el congreso restauró el Antiguo Régimen, aunque no pudo evitar la difusión de ideas liberales y socialistas.

Consecuencias

  • Formación de la Confederación Alemana.
  • Restauración de las dinastías en España y Portugal.

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