Al-Ándalus: De la Conquista a la Desintegración

Introducción

Ifriqiyya y la Llegada a la Península

En el siglo VIII, Ifriqiyya (territorio del norte de África) estaba gobernada por Musa ben Nusayr. Sus habitantes, los bereberes, vieron su oportunidad en el año 711, cuando Aquila (pretendiente al trono visigodo) pidió ayuda a los musulmanes contra el rey Don Rodrigo. Musa envió a su lugarteniente Tariq con 12.000 hombres. Se enfrentaron en la batalla de Guadalete, donde Don Rodrigo fue derrotado y muerto. Tariq, sin embargo, decidió quedarse con el territorio conquistado.

Conquista Rápida y Pactada

Los musulmanes ofrecieron condiciones benevolas a los poblados que no ofrecían resistencia, lo que facilitó una rápida expansión por la península.

Etapas de Al-Ándalus

  1. Emirato dependiente
  2. Emirato independiente
  3. Reinos de Taifas
  4. Califato de Córdoba
  5. Reinos de Taifas (segundas taifas)

Época Omeya

En el año 750, los abasíes se sublevaron contra la familia omeya. La capital del imperio islámico fue trasladada a Bagdad. El único omeya que consiguió sobrevivir, Abderramán I, huyó a Al-Ándalus. Se proclamó emir independiente en el 752.

Abderramán I organizó el territorio para una administración y defensa eficaz. Lo dividió en coras, dirigidas por un wali. La frontera se dividió en tres tramos, cada uno con su capital y un jefe militar: el cadí.

Emirato Dependiente

Inicialmente, los emires dependían del califa, quien los nombraba y destituía. Después de Abderramán I, el cargo de emir se hizo hereditario, pasando de padres a hijos. La nobleza ocupó puestos de responsabilidad, y se emplearon esclavos bien preparados y fieles.

La Crisis del Emirato

En el siglo IX, los walies y la familia Banu Qasi se independizaron. Omar ben Hafsun lideró un grupo de rebeldes que atacaban las comunicaciones entre Córdoba y otras regiones de Al-Ándalus.

Abderramán III y el Califato

Abderramán III subió al trono en 912 y emprendió la recuperación del emirato. Eliminó a los rebeldes de la Serranía de Ronda, combatió contra los cristianos del norte, logró el regreso de las coras rebeldes y derrotó al emir de Egipto. En 929, se proclamó califa.

Con Abderramán III, Al-Ándalus alcanzó su máximo esplendor. La estabilidad continuó durante el gobierno de su hijo, Alhakán II.

Almanzor

Durante el reinado de Alhakán II, un funcionario llamado Muhamed ben Abi Amir (Almanzor) ganó la confianza del hijo del califa, Hixam. Le ayudó a subir al trono, convirtiéndose en la segunda persona más importante. Quemó la biblioteca de Alhakán II, amplió la mezquita de Córdoba y, para financiar sus gastos y mantener al ejército (formado por mercenarios), organizó aceifas (incursiones en tierras cristianas).

Almanzor murió en Medinaceli en 1002. Su hijo, Abdalmalik, le sucedió, pero murió poco después. El siguiente sucesor, Abderramán Sanchuelo, era un emir débil. Los walies se sublevaron, estalló una guerra civil y Córdoba perdió poder.

Economía Andalusí

La economía andalusí se basaba en la agricultura. La mayoría de la población, sobre todo bereberes, vivía en el campo. Se recuperaron las norias y acequias en los valles. Las ciudades consumían la mayor parte del aceite y trigo. Los talleres artesanales fabricaban productos preciados en el mundo cristiano, como seda, cordobanes (cuero) y cerámica vidriada.

Comercio

Se utilizaban el dinar, el dirhem y el felús como monedas.

Sociedad Andalusí

Había dos grupos principales:

  • Muladíes: Cristianos conversos al islam, con menos derechos y más obligaciones.
  • Baladíes: Descendientes de los primeros musulmanes conquistadores, con las mejores tierras y puestos.

Los cristianos que permanecieron en territorio musulmán se llamaban mozárabes.

Los judíos eran una comunidad numerosa. Ocuparon puestos importantes como filósofos, científicos y médicos.

Arte Andalusí

Las representaciones humanas y animales estaban prohibidas. Casi no existía escultura ni pintura, aunque hay excepciones: miniaturas, tapices y cerámica.

Los edificios no eran muy altos, construidos con materiales pobres como yeso o madera. La decoración, sin embargo, era rica: placas de yeso y azulejos. Características principales:

  1. Materiales pobres
  2. Decoración rica en interiores
  3. Uso de arcos: de herradura, lobulados y polilobulados
  4. Bóveda de nervios

Etapas del arte andalusí:

  1. Arte califal: Mezquita de Córdoba
  2. Arquitectura de los reinos de taifas: Alhambra de Granada
  3. Arquitectura almohade: Giralda de Sevilla

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