Alemania en la posguerra: La debilidad de la República de Weimar
El fin del Imperio Alemán y el nacimiento de la República
Tras la derrota en la Primera Guerra Mundial, el emperador alemán abdicó. Una asamblea constituyente, reunida en Weimar, elaboró una nueva constitución que instauró una república gobernada por un régimen democrático. El partido más importante era el Partido Socialdemócrata, con mayoría parlamentaria y control del gobierno.
Oposición a la República de Weimar
Desde el principio, la nueva democracia enfrentó la oposición de grupos políticos extremistas:
- Extrema izquierda: Grupos como los espartaquistas, que buscaban un régimen comunista similar al ruso, intentaron tomar el poder en 1919, provocando una violenta insurrección.
- Extrema derecha: Grupos conservadores consideraban ilegítimo el nuevo régimen por aceptar las condiciones del Tratado de Versalles. En 1920, Hitler creó el Partido Nacionalsocialista (NSDAP), atrayendo a los descontentos. Un intento de golpe de Estado en 1923 fracasó.
La situación económica agravó el descontento. Las duras condiciones económicas impuestas por los tratados de paz obligaron al gobierno a imprimir grandes cantidades de billetes, provocando hiperinflación.
La ideología del nazismo: Un racismo radical
El nazismo, una variante del fascismo, se basaba en una concepción racista y radical de la historia. Para Hitler, los alemanes pertenecían a la raza aria, considerada superior y destinada a dominar a razas inferiores (latinos, eslavos, gitanos y judíos). Se priorizó la pureza racial, persiguiendo y asesinando a personas consideradas racialmente imperfectas: locos, discapacitados, homosexuales, etc. Se implantó una política antisemita sistemática:
- Prohibición a los judíos de ejercer la mayoría de las profesiones.
- Prohibición de matrimonios y relaciones sexuales entre judíos y arios (1935).
- Maltrato físico a los judíos.
- Noche de los cristales rotos (1938): Asesinatos, encarcelamientos y saqueos de tiendas judías.
- Solución final (1942): Deportación y exterminio de judíos y gitanos en campos de concentración (al menos 5 millones de judíos murieron).
Hitler llega al poder: Consecuencias políticas de la crisis
El auge del descontento y el apoyo a opciones extremistas
La crisis económica incrementó el descontento y la tensión social. El paro afectó a obreros y clases medias, llevando a muchos a apoyar opciones extremistas. Ante el temor a una revolución obrera, industriales y financieros apoyaron económicamente al partido nazi, viéndolo como el único capaz de restablecer el orden y mantener sus intereses.
El ascenso de Hitler al poder (1933)
En 1933, tras elecciones parlamentarias y presidenciales donde ningún partido obtuvo mayoría absoluta, el mariscal Hindenburg nombró canciller a Hitler en enero de 1933.
La eliminación de la oposición
Los nazis consolidaron su poder rápidamente:
- Eliminación de partidos de oposición: Tras el incendio del Reichstag (28 de febrero de 1933), los comunistas fueron encarcelados y todos los partidos, excepto el nazi, fueron ilegalizados.
- Purga interna: Hitler eliminó a sus opositores dentro del partido nazi, en la Noche de los cuchillos largos (junio de 1934).
- Concentración del poder: Tras la muerte de Hindenburg en agosto de 1934, Hitler se convirtió en jefe de Estado, jefe de gobierno y presidente de la República.
La ideología del nazismo: El ideario de Hitler
Encarcelado tras el fracaso del Putsch de Múnich (1923), Hitler escribió Mein Kampf, donde plasmó su ideario. Este recogía rasgos del fascismo (culto al jefe, primacia del Estado, exaltación de la violencia y la juventud), pero también incorporaba valores tradicionales.