Ascenso de Totalitarismos en Europa: Fascismo, Nazismo y Estalinismo (1920-1939)

Los Felices Años 20

Tras la devastación de la Primera Guerra Mundial, Europa se sumerge en un periodo de reconstrucción. La necesidad de olvidar los horrores de la guerra impulsa un ambiente de ocio y diversión, especialmente en las grandes ciudades. Estados Unidos emerge como la principal potencia mundial, con el dólar y la Bolsa de Nueva York como símbolos de su poderío económico. La influencia estadounidense se extiende a la cultura, con la moda de la «falda menguante, pierna creciente» y la popularización de géneros musicales como el jazz, el blues y el charlestón. El tango argentino también gana adeptos en Europa. El cine, tanto europeo como estadounidense (Hollywood), comienza a consolidarse como una forma de entretenimiento masivo.

El Crac del 29 y el Ascenso de las Dictaduras

Sin embargo, la bonanza económica de los años 20 se ve truncada por el Crac del 29, una crisis financiera de proporciones globales que tendrá profundas repercusiones políticas y sociales. En este contexto de inestabilidad, surgen en Europa diversos regímenes dictatoriales.

La URSS y el Estalinismo

Tras la Revolución de 1917 y la llegada al poder de Lenin, Rusia experimenta profundas transformaciones. Se implementa una reforma agraria basada en la colectivización de tierras (sovjoses y koljoses) y la socialización de la industria. Se crea la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y se instaura una dictadura del proletariado, que en la práctica se convierte en una dictadura del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS). La Duma es reemplazada por el Politburó, el Comité Central del PCUS. Se funda la Tercera Internacional (Komintern). La guerra civil enfrenta a los mencheviques (rusos blancos) liderados por Kerenski, apoyados por potencias europeas, y a los bolcheviques (Ejército Rojo) liderados por Trotski. Los bolcheviques se alzan con la victoria.

En 1924, tras la muerte de Lenin, se desata una lucha por el poder que culmina con el triunfo de Iósif Stalin. El estalinismo se caracteriza por un régimen totalitario, un fuerte culto a la personalidad del líder, la creación de una policía política (Checa) y un aparato de espionaje (KGB). Se llevan a cabo purgas dentro del partido y se abren campos de concentración para los disidentes.

El Fascismo Italiano

Benito Mussolini (1883-1945), antiguo socialista, funda la revista Il Popolo d’Italia y crea el Partido Fascista Italiano. Tras la Primera Guerra Mundial, los fascistas llevan a cabo actividades políticas y terroristas. A pesar de la derrota electoral en 1919, Mussolini gana popularidad. El 28 de octubre de 1922, la Marcha sobre Roma fuerza al rey Víctor Manuel III a entregar el poder a Mussolini, quien lo mantendrá hasta 1943. Se instaura una dictadura, se persigue a la oposición y se militariza a la población con el objetivo de crear un nuevo Imperio Romano. En 1935, Italia invade Abisinia (Etiopía).

El Nazismo Alemán

El Ascenso de Hitler

Adolf Hitler (1889-1945) difunde su ideología de odio racial y desprecio por la democracia a través de mítines y organizaciones paramilitares. Se convierte en una figura clave en la política de Baviera gracias al apoyo de oficiales y empresarios. En 1923, el fallido «Putsch de Múnich» le lleva a prisión, donde escribe Mein Kampf (Mi Lucha). Tras su liberación en 1924, reorganiza el Partido Nazi. La crisis económica de 1929 facilita la aceptación de su teoría conspirativa que culpa a judíos y comunistas. Hitler promete reconstruir una Alemania fuerte, crear empleos y restaurar la gloria nacional. El Partido Nazi aumenta su representación en el Reichstag (Parlamento) de 12 diputados en 1928 a 107 en 1930.

En enero de 1933, Hitler es nombrado canciller. Los grandes empresarios creen poder controlarlo, pero Hitler rápidamente se autoproclama dictador, acumulando la presidencia del Reich y la cancillería con el título de Reichsführer. Miles de opositores son perseguidos y encarcelados.

Consolidación del Régimen Nazi

  • Quema del Reichstag: Incendio provocado que sirve como pretexto para reprimir a la oposición.
  • Quema de libros: Destrucción de obras consideradas «anti-alemanas».
  • Noche de los Cristales Rotos (9-10 de noviembre de 1938): Pogromo contra la comunidad judía, con 91 muertos, cientos de heridos y más de 30.000 detenidos enviados a campos de concentración.
  • «Milagro alemán»: Programa de obras públicas y rearme que impulsa la economía alemana.
  • Creación del Tercer Reich: Establecimiento de un régimen totalitario basado en la ideología nazi.

Entre 1936 y 1939, Alemania interviene en la Guerra Civil Española apoyando al general Franco con la Legión Cóndor (Guernica). En 1938, se anexiona Austria mediante un plebiscito y ocupa la región de los Sudetes en Checoslovaquia. Firma el Pacto de Acero con la URSS y se une a Italia y Japón en el Eje Berlín-Roma-Tokio, liderado por Adolf Hitler, Benito Mussolini e Hirohito, respectivamente.

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