La República de Weimar y la Crisis Económica
La República de Weimar fue un gobierno provisional formado por miembros del Partido Socialdemócrata que controlaban la política del país. En Berlín, el gobierno había sido derrocado tras la imposición del Partido Espartaquista, liderado por Rosa Luxemburgo, que buscaba instaurar un estado comunista en Alemania. Los espartaquistas, base del futuro Partido Comunista, participaron en las elecciones, proponiendo una política de huelgas y luchas.
Se enfrentaban los socialdemócratas y los espartaquistas. Aunque ambos fueron derrotados, hubo muchas luchas en las calles, ya que todos los partidos querían adueñarse del poder. Finalmente, el triunfo cayó en manos de los comunistas, aunque posteriormente hubo otras elecciones. A raíz del Tratado de Versalles, Alemania perdió su condición de gran potencia.
En 1919, se creó la constitución que organizó el régimen de Weimar. Alemania se constituyó en una república federal democrática. La Primera Guerra Mundial trajo problemas económicos, como la inflación y una gran deuda nacional. Hubo una pérdida del valor del dinero y de la producción, así como un aumento del desempleo.
La Caída de Wall Street y su Impacto en Alemania
Estados Unidos ayudaba a otros países con créditos, ya que era una gran potencia después de la guerra, e instaló empresas en Europa. Todos compraban acciones, al punto que subieron tanto que llegaron a su límite y empezaron a perder valor. Entonces, las acciones bajaron y muchos quisieron venderlas, lo que generó grandes deudas. Alemania había recuperado su economía gracias a las empresas estadounidenses, pero cuando EE. UU. quebró, Alemania cayó en recesión. Alemania dependía de inversiones extranjeras que ya no tenía, muchos bancos quebraron y faltaba capital. La industria no podía producir y no se podía exportar, ya que los derechos aduaneros eran caros. El gobierno redujo los salarios y creció el desempleo.
El Ascenso del Nacionalsocialismo
Debido a este contexto y a la «puñalada por la espalda», una traición que sintió Alemania cuando los aliados (Francia, Inglaterra y Estados Unidos) la obligaron a firmar el Tratado de Versalles, que la dejaría en quiebra. Ludendorff y Hindenburg lo firmaron para evitar perder más soldados, pero se consideró una traición a Alemania.
En medio de la tensión social y la violencia política, se fue formando el nacionalsocialismo, que culpaba a los judíos de la crisis. Se decía que se adueñaban de la economía, que quitaban el lugar a los desempleados, que eran una raza y no una comunidad, que no se los podía ver como alemanes judíos sino como judíos alemanes, y que había que aislarlos.
La Vida de Hitler
Adolf Hitler nació el 20 de abril de 1889 en una familia de clase baja. Repitió de grado en primero; era inteligente pero perezoso y le gustaba el dibujo. Tras la muerte de su padre, cobró la herencia y se fue a Viena para estudiar arte, pero fue rechazado. Con su frustración, adhirió a ideas nacionalistas, especialmente contra el antisemitismo, que era algo cotidiano en la época.
Después se fue a Múnich, Alemania, y se unió al ejército. Ascendió y le dieron la Cruz de Hierro. Quedó ciego por un tiempo. La derrota en la Primera Guerra Mundial lo llevó al inicio de su carrera política y su camino al poder, ya que se sintió frustrado. Le dieron trabajo de espía y lo mandaron al Partido Obrero Alemán.
El Partido Obrero Alemán y la Creación de la SA
Después de la guerra, en 1919, se creó el Partido Obrero Alemán. No estaban de acuerdo con la «puñalada por la espalda». Hitler ingresó al partido y difundió sus ideas antisemitas.
En 1920, se renombraron como Partido Obrero Alemán Nacionalsocialista. Crearon una bandera y la SA, un ejército ilegal privado que mantenía el orden en las reuniones y creaba disturbios contra los opositores. Röhm, el líder de la SA, conoció a Hitler al terminar la guerra. También compraron un diario antisemita para difundirse.
Hitler conoció a gente rica e importante que se unió al partido, ayudándolo con los gastos y la difusión, como Haffenstagen. Creció muchísimo el número de afiliados, incluyendo militantes de clase media, la burguesía y las capas obreras.
El Putsch de la Cervecería y la Cárcel
La República de Weimar era inestable, con constantes golpes de estado, y nadie aprobaba el Tratado de Versalles. El presidente también era débil. Hitler se alió con distintos grupos políticos de derecha para desestabilizar el gobierno. Creyendo que Ludendorff lo apoyaba, organizó el Putsch de la Cervecería, un golpe de estado, pero fue engañado. El ejército lo capturó y lo mandaron preso.
La Creación de la SS y la Consolidación del Poder
Cuando salió de la cárcel, su partido estaba prohibido, pero no duró mucho. Volvió al Partido Obrero Alemán, del cual se convirtió en líder supremo y de la SA. En 1929, se creó la SS, una organización legal que eran guardaespaldas del partido y que se convirtió en la más poderosa del partido y del estado nazi.
Hitler estableció plataformas políticas que incluían:
- Igualdad de derechos para los alemanes y la anulación del Tratado de Versalles y el de Saint-Germain.
- Solo los que eran de sangre alemana podían ser ciudadanos; los judíos no podían ser ciudadanos.
- Los no ciudadanos solo podían vivir en Alemania como huéspedes y eran considerados extranjeros.
La Llegada de Hitler al Poder
Hitler asumió como canciller el 30 de enero. El Parlamento debía tener mayoría para que una ley se aprobara; si no, caía el gobierno y se llamaba a elecciones. El partido nazi no le daba la mayoría a la socialdemocracia, y siempre ganaba Hindenburg. Pero cuando Hindenburg le ofreció la cancillería, los nazis aprobaron las leyes del Parlamento, y así Hitler ascendió al poder.
El Incendio del Reichstag y la Ley de Plenos Poderes
Se realizó la quema del Reichstag, la representación del poder legislativo, y se culpó a los comunistas. Hitler se presentó como líder contra el comunismo. Se creó Dachau, un campo para presos políticos y opositores. La Ley de Plenos Poderes le dio todos los poderes a Hitler, ya que el Parlamento se había quemado, y decidió quitar las libertades individuales.
El Boicot Económico contra los Judíos
Se implementó un boicot económico como medida defensiva, ya que se decía que los judíos afectaban la economía de Alemania. El boicot fue un sábado, coincidiendo con las festividades judías. Tuvo consecuencias negativas: los que tenían acciones en tiendas de judíos y los no judíos con acciones también se perjudicaron, y muchos empleados fueron despedidos, aumentando el desempleo.
Se atacó un negocio creyendo que era judío, pero el dueño no lo era, aunque se había bautizado y sus abuelos sí lo eran. No podían definir quién era de la raza aria, pero aun así, los consideraban judíos.