Va a decidir declarar la guerra al emperador contando con el apoyo del bando luterano y el respaldo económico de Inglaterra y Países Bajos. Las tropas van a ser duramente derrotadas por Wallestein en las batallas de Dessau y Lutter Esto permite ocupar Junlandia y comerania y obligar a Dinamarca a negociar la paz, que finalmente se va a firmar en Lubeck en 1620 en la que el emperador devuelve a Dinamarca los territorios ocupados siempre que renuncie a los obispados que perseguía y a intervenir en cualquier otro momento en el Imperio.
Esta paz va a ser seguida de una fuerte política de recatolización de los territorios del Imperio por Fernando II. Va a generar una fuerte oposición de los luteranos que se hace más fuerte tras la destitución de las figuras calvinistas que había en el gobierno. Además, esa reacción y oposición de los príncipes luteranos, va a correr junto al temor de que Austria volviera a convertirse en la gran potencia que había sido en tiempos de Carlos V. Los estados europeos se sitçuan en alerta, sobre todo Francia que lidera la operación anti-Habsburgo, que se había mantenido ajena al conflicto directamente, aunque intervino indirectamente incitando la participación de otros o alentando insurrecciones en los territorios de los Habsburgo. Pero ahora, Francia se limita a acciones concretas de gran importancia. Interviene en el problema de la sucesión a los ducados de Mantua y Montferrato, donde la monarquía Hispánica apoya a un candidato, y Francia al otro. Será elegido el candidato francés.
A esta acción en Italia que se puede considerar de repercusiones limitadas, sigue otra de mayor importancia: la diplomacia francesa y Richelieu se muestran eficaces a la hora de conseguir que un nuevo estado entre en el conflicto: Suecia, donde reinaba Gustavo Adolfo, que tenía ente sus objetivos el convertir a Suecia en una gran potencia económica buscando desbancar el control danés del comercio del Báltico, y buscaba convertir a su estado en una gran potencia dotándola de un ejército potente y modernizar sus armas. Se podía poner en peligro si en las tierras del norte del Imperio el catolicismo era mayoritario, hegemónico. Por eso el rey de Suecia presta apoyo a los príncipes protestantes que estaban descontentos con el edicto de Restitución. Suecia negoció hábilmente consiguiendo que respaldaran Rusia, Francia, Transilvania, Turquía, y los príncipes luteranos del Imperio que veían en Gustavo Adolfo el príncipe que podía salvar su causa. Entró ocupando la zona de Pomerania donde consiguió en 1631 una importante victoria sobre el ejército imperial que le permitíó cruzar el norte de Alemania, Baviera, llegando a ocupar Múnich. Esto se ve culminado con una gran victoria que acaba con la decadencia del poder sueco.
En 1632 los ejércitos suecos vuelven a derrotar a los imperiales en la Batalla de Lützen, pero el monarca va a morir, lo que siembra el desconcierto en todo el bando protestante. También se contagia el bando católico imperial, pero por diferentes motivos: la primera derrota de los ejércitos imperiales había llevado a la destitución de Wallestein y el emperador manda que se le asesine. Esto siembra el desconcierto del bando católico. Este descontento de los dos bandos es más intenso en los protestantes donde los ejércitos suecos empiezan la retirada, en la que sufren una importante derrota a manos de los tercios españoles capitaneados por el cardenal infante en Nordlingen en 1634. Es la última gran victoria de los Tercios españoles en campos europeos. En 1635 los suecos firman con el emperador la Paz de Praga, en la que se acuerda una amnistía general, suspender por 80 años el edicto de Restitución y disolver las uniones armadas, tanto de católicos como de protestantes. No podía ser más favorable a Austria, a los Habsburgo. Esta situación es la que lleva a Richelieu a decidir la entrada de Francia en la guerra. Se inicia la última etapa.
Los ejércitos franceses invaden territorio del Imperio ocupando la zona limítrofe de Alsacia y Lorena. Es apoyado por . La entrada en la alianza de las Provincias unidas significa una declaración de guerra a la monarquía hispánica que solo puede contar con el apoyo de Dinamarca y Austria. En 1636, la guerra es un hecho de nuevo, y los frentes se multiplican tanto en el atlántico, báltico o mediterráneo, Hungría, Alpes… La monarquía hispánica consiguió resistir los ataques de Francia y enfrentamiento en los P. Bajos hasta 1637. A partir de ese momento las derrotas se multiplican como las del os ejércitos imperiales. En el 39 tiene lugar una sucesión de derrotas en Italia y el desastre naval de las Dunas. En 1640 se levantan Portugal, Cataluña y Nápoles. En el 43 el Araque de las tropas imperiales que avanzan hacia parís, son detenidas por … en la batalla de Rocroi. En el 46 los suecos derrotan a los daneses e invaden Baviera. Esto va a hacer que se inicien serias conversaciones de paz. A pesar de ello, la guerra continua, pero entre Francia y España. Esta guerra se alargará otros 10 años más. Pero mientras seguían enfrentados, en el Imperio se negociaba la paz, que va a culminar en el 48 con la Firma de los Tratados de Westfalia.
Fueron negociados en las ciudades donde se firman: Münster y Osnabrück. En Müsnter se reúnen los príncipes y estados católicos, en la otra, los protestantes. Los acuerdos de Westfalia van a tener un especial significado porque van a representar el nacimiento de un nuevo orden internacional e imperial. Se van a poner las bases de una nueva estructura política y van a ser considerados como ley dentro del Imperio. Esta consideración de leyes es lo que justifica que para los juristas alemanes estos acuerdos se conozcan con el nombre de Constitución de Westfalia. Desde el p de vista internacional, intentan buscar un nuevo orden en el que la supremacía de un estado sobre los restantes que había caracterizado la política europea de XVI y principios del XVII se sustituyera por un equilibrio entre las potencias. Terminar con la hegemonía de los Habsburgo. La más interesada era Francia que además recibíó una serie de compensaciones de tipo territorial. Recibíó los territorios de los obispados de Metz, Tour Verdum, la alta y baja Alsacia, y dos plazas en territorios de Renania. Suecia tb territorios en Alsacia y dominio del báltico. La zona de Pomerania y los obispados de … Estos territorios del Imperio le dan derecho a intervenir en un futuro en cuestiones del Imperio. Westfalia también moverá fronteras entre los estados en razón de la participación en el conflicto.
Esta paz va a ser seguida de una fuerte política de recatolización de los territorios del Imperio por Fernando II. Va a generar una fuerte oposición de los luteranos que se hace más fuerte tras la destitución de las figuras calvinistas que había en el gobierno. Además, esa reacción y oposición de los príncipes luteranos, va a correr junto al temor de que Austria volviera a convertirse en la gran potencia que había sido en tiempos de Carlos V. Los estados europeos se sitçuan en alerta, sobre todo Francia que lidera la operación anti-Habsburgo, que se había mantenido ajena al conflicto directamente, aunque intervino indirectamente incitando la participación de otros o alentando insurrecciones en los territorios de los Habsburgo. Pero ahora, Francia se limita a acciones concretas de gran importancia. Interviene en el problema de la sucesión a los ducados de Mantua y Montferrato, donde la monarquía Hispánica apoya a un candidato, y Francia al otro. Será elegido el candidato francés.
A esta acción en Italia que se puede considerar de repercusiones limitadas, sigue otra de mayor importancia: la diplomacia francesa y Richelieu se muestran eficaces a la hora de conseguir que un nuevo estado entre en el conflicto: Suecia, donde reinaba Gustavo Adolfo, que tenía ente sus objetivos el convertir a Suecia en una gran potencia económica buscando desbancar el control danés del comercio del Báltico, y buscaba convertir a su estado en una gran potencia dotándola de un ejército potente y modernizar sus armas. Se podía poner en peligro si en las tierras del norte del Imperio el catolicismo era mayoritario, hegemónico. Por eso el rey de Suecia presta apoyo a los príncipes protestantes que estaban descontentos con el edicto de Restitución. Suecia negoció hábilmente consiguiendo que respaldaran Rusia, Francia, Transilvania, Turquía, y los príncipes luteranos del Imperio que veían en Gustavo Adolfo el príncipe que podía salvar su causa. Entró ocupando la zona de Pomerania donde consiguió en 1631 una importante victoria sobre el ejército imperial que le permitíó cruzar el norte de Alemania, Baviera, llegando a ocupar Múnich. Esto se ve culminado con una gran victoria que acaba con la decadencia del poder sueco.
En 1632 los ejércitos suecos vuelven a derrotar a los imperiales en la Batalla de Lützen, pero el monarca va a morir, lo que siembra el desconcierto en todo el bando protestante. También se contagia el bando católico imperial, pero por diferentes motivos: la primera derrota de los ejércitos imperiales había llevado a la destitución de Wallestein y el emperador manda que se le asesine. Esto siembra el desconcierto del bando católico. Este descontento de los dos bandos es más intenso en los protestantes donde los ejércitos suecos empiezan la retirada, en la que sufren una importante derrota a manos de los tercios españoles capitaneados por el cardenal infante en Nordlingen en 1634. Es la última gran victoria de los Tercios españoles en campos europeos. En 1635 los suecos firman con el emperador la Paz de Praga, en la que se acuerda una amnistía general, suspender por 80 años el edicto de Restitución y disolver las uniones armadas, tanto de católicos como de protestantes. No podía ser más favorable a Austria, a los Habsburgo. Esta situación es la que lleva a Richelieu a decidir la entrada de Francia en la guerra. Se inicia la última etapa.
Los ejércitos franceses invaden territorio del Imperio ocupando la zona limítrofe de Alsacia y Lorena. Es apoyado por . La entrada en la alianza de las Provincias unidas significa una declaración de guerra a la monarquía hispánica que solo puede contar con el apoyo de Dinamarca y Austria. En 1636, la guerra es un hecho de nuevo, y los frentes se multiplican tanto en el atlántico, báltico o mediterráneo, Hungría, Alpes… La monarquía hispánica consiguió resistir los ataques de Francia y enfrentamiento en los P. Bajos hasta 1637. A partir de ese momento las derrotas se multiplican como las del os ejércitos imperiales. En el 39 tiene lugar una sucesión de derrotas en Italia y el desastre naval de las Dunas. En 1640 se levantan Portugal, Cataluña y Nápoles. En el 43 el Araque de las tropas imperiales que avanzan hacia parís, son detenidas por … en la batalla de Rocroi. En el 46 los suecos derrotan a los daneses e invaden Baviera. Esto va a hacer que se inicien serias conversaciones de paz. A pesar de ello, la guerra continua, pero entre Francia y España. Esta guerra se alargará otros 10 años más. Pero mientras seguían enfrentados, en el Imperio se negociaba la paz, que va a culminar en el 48 con la Firma de los Tratados de Westfalia.
Fueron negociados en las ciudades donde se firman: Münster y Osnabrück. En Müsnter se reúnen los príncipes y estados católicos, en la otra, los protestantes. Los acuerdos de Westfalia van a tener un especial significado porque van a representar el nacimiento de un nuevo orden internacional e imperial. Se van a poner las bases de una nueva estructura política y van a ser considerados como ley dentro del Imperio. Esta consideración de leyes es lo que justifica que para los juristas alemanes estos acuerdos se conozcan con el nombre de Constitución de Westfalia. Desde el p de vista internacional, intentan buscar un nuevo orden en el que la supremacía de un estado sobre los restantes que había caracterizado la política europea de XVI y principios del XVII se sustituyera por un equilibrio entre las potencias. Terminar con la hegemonía de los Habsburgo. La más interesada era Francia que además recibíó una serie de compensaciones de tipo territorial. Recibíó los territorios de los obispados de Metz, Tour Verdum, la alta y baja Alsacia, y dos plazas en territorios de Renania. Suecia tb territorios en Alsacia y dominio del báltico. La zona de Pomerania y los obispados de … Estos territorios del Imperio le dan derecho a intervenir en un futuro en cuestiones del Imperio. Westfalia también moverá fronteras entre los estados en razón de la participación en el conflicto.