La Guerra Civil Española: Causas, Desarrollo y Consecuencias (1936-1939)
1. Introducción
La Guerra Civil fue la consecuencia de la radicalización política durante la Segunda República y del enfrentamiento ideológico que se planteaba en Europa por el ascenso de los fascismos.
2. Del Golpe de Estado a la Guerra Civil
El golpe de Estado que se gestó el 17 de julio en Marruecos y se extendió por la península durante el día 18 no fue resolutivo: en buena parte del país no triunfó, pero la República tampoco fue capaz de aplastarlo por completo. Ello fue lo que originó la Guerra Civil.
Desde la revolución de octubre del 34, el clima del país se había enrarecido por la oposición de los conservadores a la democratización política y al reformismo introducido por la República. Poco a poco surgió la idea de que la única solución pasaba por el golpe de Estado.
La sublevación militar fue preparada por el general Mola desde Navarra, y contó con importantes apoyos entre los militares de Marruecos y de Franco desde Canarias. También contaba con el apoyo de partidos monárquicos, carlistas, falangistas y con el apoyo financiero de Juan March.
La sublevación se inició en Marruecos y al siguiente día en la Península. Los sublevados triunfaron en el Marruecos español y parte de Andalucía, pero fracasó en los principales centros industriales. Podemos decir así que el golpe de Estado fracasó.
3. La Guerra
a) Julio de 1936 – Principios de 1937
El ejército de África logró cruzar el Estrecho iniciando el avance hacia Madrid. En el camino quería tomar Badajoz (brutal represión) y más tarde, Franco desvió de nuevo las tropas para rescatar Toledo, que se hizo fuerte en el Alcázar (importante propaganda para Franco).
El conflicto se convirtió en una guerra de desgaste a causa de la resistencia de Madrid, bombardeada por aire y rodeada por todos lados. El ejército republicano, debido a la movilización popular y a los refuerzos extranjeros (Brigadas Internacionales), rechazó un ataque frontal en la Ciudad Universitaria.
Las tropas franquistas, al fracasar el ataque frontal a Madrid, intentaron cercarla. Franco cambió de estrategia y decidió atacar el territorio republicano del norte.
b) Marzo 1937 – 1938
Tras el dramático episodio del bombardeo de Guernica por la Legión Cóndor alemana en abril de 1937, cayó Bilbao, y en agosto Santander. La resistencia continuó en Asturias hasta la caída de Gijón en octubre.
El ejército popular emprendió varias ofensivas republicanas para detener el avance franquista, pero solo lo logró parcialmente. En el verano de 1937, en la batalla de Brunete, el ejército republicano no pudo romper las líneas de las tropas franquistas; y tras la batalla de Belchite, no logró ocupar Zaragoza.
En el frente de Aragón, el ejército de Franco inició una ofensiva por el Valle del Ebro para alcanzar las costas del Mediterráneo y dividir el territorio republicano: la batalla del Ebro, hasta que Franco consiguió romper el frente republicano.
Tras la batalla del Ebro, Franco dio la orden de iniciar la ofensiva final contra Cataluña.
c) Febrero – Marzo 1939: El Final de la Guerra
Se produce así el final de la guerra, pues el bando republicano no tenía nada que hacer. Inglaterra y Francia reconocieron al gobierno de Franco y Azaña presentó su dimisión como presidente de la República.
3.2. El Bando Republicano: Revolución en la España Republicana
A. El Sueño de la Revolución
La sublevación militar se había intentado justificar con el argumento de que la República estaba preparando una revolución al estilo ruso en la que desaparecería la propiedad privada, la religión y el Estado. Pero nada de ello tenía fundamento.
El gobierno de la República carecía de autoridad. Las milicias obreras y campesinas armadas formaron comités con total independencia del gobierno. Estalló una revolución social espontánea, liderada por los sindicatos UGT y CNT que realizaron incautaciones y colectivizaciones de servicios públicos, fábricas y tierras.
B. El Derrumbe del Estado Republicano
Ante la pasividad del gobierno de Casares Quiroga, los comités obreros se armaron por sí mismos. Este gobierno fue sustituido por el gobierno Giral que aceptó armar a los obreros pero que, de hecho, carecía de todo poder en buena parte del territorio.
Azaña encargó formar un nuevo gobierno al socialista Negrín y de nuevo aparecieron las discrepancias.
3.3. El Bando Sublevado
La dirección del alzamiento nacional la ejercía una Junta de Defensa Nacional creada en Burgos y formada por militares. Franco se convirtió en el líder militar y fue proclamado jefe de Estado y Generalísimo de los ejércitos el 1 de octubre de 1936, estableciendo una dictadura personal.
En el campo político, ante las discrepancias entre falangistas y tradicionalistas (carlistas), Franco promulgó en abril de 1937 un Decreto de Unificación por el que se creaba un partido único al estilo fascista, FET y de las JONS o Movimiento Nacional, del que sería el jefe indiscutible. Se cerraba así el círculo de su poder absoluto: Generalísimo del Ejército, jefe de Estado, jefe del partido único y jefe del Gobierno (desde 1938).
En el campo social, estableció el sindicalismo vertical; y la economía fue controlada por el Estado, que impuso la autarquía.
3.4. La Posición Internacional ante la Guerra: La Farsa de la No Intervención
Aunque los orígenes de la guerra son españoles, en su evolución y resultado final tienen gran importancia los factores internacionales.
- Alemania e Italia: Franco pidió ayuda a Hitler y a Mussolini. La guerra española representaba una oportunidad de experimentar las armas alemanas de cara a una futura guerra.
- Gran Bretaña: Su política era de No Intervención. Se trataba de no intervenir a favor de ningún bando. Este pacto de No Intervención supuso la muerte de la Segunda República.
- URSS: Al principio, no mostró demasiado interés en el conflicto. La ayuda soviética nunca fue suficiente para que la República ganara la guerra; de hecho, más bien contribuyó al mantenimiento del conflicto.