La guerra civil: la dimensión política e internacional del conflicto. Las consecuencias de la guerra.
Durante la guerra civil, los bandos enfrentados intentaron ejercer un sistema político adaptado a las circunstancias propias del momento, siendo distinto su desarrollo en cada una de las zonas.
En la España republicana, los sindicatos reclamaron la entrega de armas para defender la República, pero Casares Quiroga se negó. Gran parte de la Guardia Civil y mandos del Ejército se habían pasado al bando rebelde. Cae Casares Quiroga y se constituye otro Gobierno dirigido por Giral, que ordenó la distribución de armas entre los obreros. Se produjo la desarticulación del Estado republicano.
En el País Vasco, se constituyó un Gobierno autónomo dentro de la República. Ni siquiera en Madrid se pudo impedir la aparición de órganos de poder alternativos en manos de partidos y sindicatos.
En septiembre, se constituyó un nuevo Gobierno presidido por Largo Caballero. Se propuso crear un verdadero ejército unificado y restablecer el poder del Estado. Este gobierno tuvo que trasladarse a Valencia en noviembre de 1936, por el avance de las tropas franquistas, y Madrid quedó bajo el mando de una Junta de Defensa a cargo del general Miaja.
El objetivo político era someter al control del Estado los dos focos de poder revolucionario que aún se mantenían en Cataluña: la Generalitat y el Comité de las Milicias Antifascistas, que provocaron una insurrección junto al POUM. Esto conllevó la dimisión de Largo Caballero, pues se negó a ilegalizar el POUM.
A Largo Caballero le seguirá Negrín, que concedería la máxima prioridad a la guerra y tuvo que disolver el Consejo de Aragón. En 1938, se plantearon dos posibles estrategias ante la guerra: la de Negrín y los comunistas, que querían alargar la resistencia hasta que estallara la guerra en Europa, y la de amplios sectores republicanos y algunos socialistas, que querían negociar una paz aceptable. Se impuso la tesis de Negrín, pero en marzo de 1939, el coronel Casado se sublevó queriendo negociar una paz con Franco, pero éste solo aceptaba la rendición incondicional y el 1 de abril declaraba el final de la guerra.
En la zona ocupada por los sublevados, la evolución política se inició organizándose políticamente bajo una Junta de Defensa Nacional con base en Burgos. Los sublevados carecían de un proyecto político propio. Este vacío ideológico hizo que primase el autoritarismo sobre la concepción política: se prohibieron los sindicatos, se disolvieron los partidos políticos, se estableció una rígida censura de prensa y se destituyó a todos los cargos políticos republicanos.
Franco aprovechó para erigirse Jefe Supremo del Movimiento mediante maniobras políticas, se le nombró Jefe del Estado y Generalísimo de los Ejércitos. Comenzó una nueva etapa política con un poder concentrado y unipersonal en manos de Franco: la Junta de Defensa se transformó en Junta Técnica del Estado y las decisiones se tomarían en el cuartel general de Franco.
La Falange desempeñaba un papel importante; Primo de Rivera fue fusilado en noviembre de 1936. Franco promulgó el Decreto de Unificación por el que se fusionaban todas las organizaciones políticas en una sola: FET y de las JONS. Franco sería su jefe supremo. Después, se creó un nuevo Estado, constituyéndose el primer Gobierno con estructura ministerial en enero de 1938. El nuevo régimen franquista tenía las siguientes características:
- Franco acaparaba todo el poder.
- Régimen nacionalsindicalista, católico.
- Su programa se apoyaba en los 27 puntos de la Falange y en el Fuero del Trabajo.
- Medidas aprobadas durante la guerra eran provisionales.
La dimensión internacional del conflicto tiene dos enfoques diferentes:
- Prólogo de la Segunda Guerra Mundial; fue el primer enfrentamiento armado entre las ideologías dominantes: democracia, fascismo y comunismo.
- Reducirla a un conflicto marginal.
La intervención extranjera tuvo una importancia en el conflicto dentro de España.
Los países que ayudaron de forma directa fueron Alemania, Italia y Portugal.
La Alemania de Hitler ofreció ayuda en el ámbito militar con la participación directa de la Legión Cóndor de aviación, responsable del bombardeo de Guernica. Contribuyó con soldados y ayuda económica.
La Italia fascista de Mussolini proporcionó un gran aporte económico. Destacó el papel desempeñado por su armada.
Portugal proporcionó ayuda diplomática y aporte de voluntarios.
Las ayudas a la República estuvieron protagonizadas por la Unión Soviética, México y las Brigadas Internacionales de los países democráticos. La ayuda de la Unión Soviética se inició en octubre de 1936, con aportación de hombres y material armamentístico, aunque no fue gratuita. El Gobierno de México, presidido por Lázaro Cárdenas, proporcionó armamento, alimentos y apoyo diplomático. Las Brigadas Internacionales se trataban de cuerpos de voluntarios que se dirigieron a España al servicio de las fuerzas armadas de la República. Actuaban en solidaridad con la izquierda española.
Pero hubo actitudes ambiguas, como la de la Sociedad de Naciones o el Comité de No Intervención. Estados Unidos veía más peligroso el avance comunista que el franquista, por esto adoptó una política oficial de no intervención, como Francia y Gran Bretaña.
Consecuencias de la guerra
Consecuencias demográficas: Movimiento de un enorme número de personas; hubo muchas muertes, por lo que descenderá la tasa de natalidad. Muchos republicanos cruzaron la frontera y España perdió ciudadanos en el conflicto.
Consecuencias económicas: Pérdida de población activa, pérdidas materiales y la destrucción de infraestructuras. Las ciudades fueron destruidas, por lo que se tuvo que iniciar su reconstrucción. Los transportes quedaron seriamente dañados. Se redujo la producción de trigo, cebada y remolacha. También descendió la ganadería. Las fábricas y minas no fueron especialmente dañadas; en la cornisa cantábrica se produjo la reducción de producción de hierro y acero.
A la población le falta casi todo: se racionan los alimentos de primera necesidad, y el mercado negro incrementa la fortuna de unos pocos a costa de la miseria de la mayoría.
Consecuencias sociales: Miles de familias decidieron atravesar la frontera. La mayor parte de ellos terminaron hacinados en campos de refugiados para embarcar a América. Durante los primeros años de la postguerra, las cárceles estaban llenas de presos políticos que cumplían penas de trabajos forzados. Se inició una represión en el sector público y los cargos vacantes fueron ocupados por seguidores de Franco. Esta represión también fue económica, ya que muchos perdieron sus propiedades. En España, el Estado de guerra duró hasta 1948, pero sin dar signos de apertura hasta los años setenta.