Consolidación del Estado Moderno: El Reinado de los Reyes Católicos

Los Reyes Católicos: La Construcción del Estado Moderno en España

La Unión Dinástica: Integración de las Coronas de Castilla y Aragón

El matrimonio de los Reyes Católicos, Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, supuso una unión dinástica y personal entre Castilla y Aragón, no una unión territorial. Isabel I accedió al trono, pero estalló una guerra civil entre los partidarios de Isabel y los de Juana «la Beltraneja». Portugal y Francia apoyaron a Juana, mientras que Aragón apoyó a Isabel. La guerra finalizó en 1479 con el triunfo de Isabel, reconocida por Portugal en el Tratado de Alcaçovas. Los Reyes Católicos trataron de extender su autoridad por toda la península. La unión dinástica conseguida por los Reyes Católicos estuvo a punto de fracasar con el matrimonio de Fernando y Germana de Foix. Sin embargo, al no haber herederos de este matrimonio, la unión pudo mantenerse.

La Conquista del Reino Nazarí y la Incorporación del Reino de Navarra

El Reino de Granada era el único reino musulmán que quedaba en la Península Ibérica. En el siglo XV, este reino estaba en crisis debido a la lucha por el poder. Su existencia se basaba en las parias que pagaba a Castilla. En 1481, los Reyes Católicos tomaron la fortaleza de Zahara. La conquista se dividió en dos fases: hasta 1487 fue una guerra medieval, en la que los nobles conquistaron diversas fortalezas; luego se convirtió en una guerra moderna, en la que el ejército era permanente y estaba bien organizado. Los Reyes Católicos ganaron la guerra en 1492. Esta guerra, desde el punto de vista ideológico, supuso el final de la Reconquista, terminando con el reino islámico y añadiendo nuevos territorios a Castilla. Desde el punto de vista estratégico, supuso un cambio en las tácticas de guerra. En 1512, aprovechando las disputas internas, Fernando envió al Duque de Alba con un ejército que ocupó Pamplona y Navarra sin resistencia. Estos territorios fueron incorporados a Castilla, no a Aragón, aunque conservaron sus leyes e instituciones propias.

La Integración de las Canarias y la Aproximación a Portugal

Las Islas Canarias se habían convertido en un punto estratégico en la política atlántica de Castilla. Dos nobles normandos, Bethencourt y La Salle, iniciaron la conquista. Durante el siglo XV, la población castellana se fue asentando en las islas. Tras el Tratado de Alcaçovas, que reconocía las Canarias como zona de influencia castellana, se decidió completar la conquista. Las Canarias se convirtieron en escala obligada en las rutas hacia América. Una vez solucionados los conflictos con Portugal, los Reyes Católicos continuaron su política con el objetivo de que todos los territorios estuviesen bajo la misma corona, llevando a cabo una aproximación a Portugal mediante el matrimonio de su primogénita, Isabel, con el príncipe Alfonso. Esta política no logró su objetivo inicialmente. Durante el reinado de Felipe II, se logró de forma temporal, pero no fue aceptada por los portugueses, quienes aprovecharon para independizarse.

La Organización del Estado: Instituciones de Gobierno

Los Reyes Católicos crearon el Estado moderno basado en la monarquía autoritaria. Las Cortes de Toledo de 1480 aprobaron una serie de medidas:

  • Se reforzaron y diversificaron los consejos, divididos en temáticas y territoriales.
  • En la administración judicial, se reforzaron las audiencias, como la de Valladolid.
  • En 1484, se aprobaron las Ordenanzas Reales de Castilla.
  • En las instituciones, se creó una burocracia.
  • Se creó un ejército permanente mandado por el rey.
  • En 1476, se creó la Santa Hermandad.
  • Se nombraron embajadores permanentes en Londres, Roma, Bruselas y Austria, que defendían los intereses de los reyes.

Para reforzar la autoridad de la monarquía, se procuró lograr la unidad religiosa con la expulsión de los judíos en 1492 y la presión sobre los musulmanes para que se convirtiesen.

La Proyección Exterior: Política Italiana y Norteafricana

Fernando dirigió la política italiana, un asunto exclusivamente aragonés. En Italia, se enfrentaron los españoles y los franceses, que defendían sus respectivos intereses. El conflicto surgió cuando los franceses ocuparon Nápoles. Fernando creó la Liga Santa, aliándose con ciudades italianas para aislar a Francia dentro de Italia. Francia se rindió, aunque las luchas persistieron. En 1503, los franceses contraatacaron, pero el Gran Capitán, Gonzalo Fernández de Córdoba, los derrotó en Ceriñola y Garellano. Nápoles se incorporó definitivamente a Aragón. La política norteafricana implicó a Castilla y a Aragón. El regreso de los musulmanes a África tras la toma de Granada y la ocupación de Melilla crearon un sentimiento anticristiano favorable a los berberiscos y corsarios, que atacaban la economía castellana. Sin embargo, los españoles ocuparon el territorio de Vélez de la Gomera, Orán y Bugía, pero sufrieron una gran derrota en Los Gelves, que frenó la expansión hacia el norte de África.

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