Transición del Antiguo Régimen al régimen liberal
Tras la muerte de Fernando VII la princesa heredera tiene 3 años. Ocupa la Regencia su madre María Cristina de Borbón (1833-1840).
Al estallar la Guerra Civil y para atraerse a sectores moderados de los liberales se inician un conjunto de reformas desde planteamientos muy moderados.
Fases de la Transición
Cea Bermúdez (1833-34)
presidente del gobierno.
A Cea Bermúdez le sustituye Martínez de la Rosa (1834-1835), que siendo consciente que es imposible llegar a un acuerdo con los carlistas, inicia unas tímidas reformas donde destaca la aprobación del Estatuto Real.
Como, además, la Regenta y los isabelinos necesitan el apoyo de los liberales para contrarrestar el movimiento carlista, María Cristina se ve »obligada» a conceder reformas que, en la práctica, van a facilitar la implantación del régimen liberal.
Con el nombramiento de Mendizábal (1835), progresista de prestigio, se inicia propiamente la revolución liberal.
Le sustituye como presidente lstúriz (1836), hombre moderado que es rechazado por los sectores más progresistas del país.
La división entre moderados y progresistas se hizo ya definitiva
Con un país al borde de la revolución, con los carlistas recorriendo la península y un gobierno sin apoyos, se subleva la guarnición de la Guardia Real de la Granja pronunciándose a favor de la C. En estas circunstancias María Cristina se ve obligada a nombrar a los progresistas Calatrava (Presidente) y Mendizábal (Hacienda) para formar un gobierno progresista con tres objetivos claros:
La instauración de un régimen liberal
Impulsar la acción militar necesaria para ganar la guerra a los carlistas
Elaborar una Constitución
Entre Agosto de 1836 y 1837, los liberales progresistas llevaron a cabo el desmantelamiento jurídico del Antiguo Régimen e instauraron un nuevo sistema construido a partir de una constitución en forma de monarquía parlamentaria.
REGENCIA DE Espartero (1840-1843)
Durante tres años gobernó generando el rechazo de muchos liberales por su autoritarismo. Este hecho junto a los intentos de derrocarle por parte de militares moderados junto a la conspiración de María Cristina desde el exilio, explica que tras la dura represión gubernamental sobre los pronunciamientos moderados fuera destituido por el golpe del general Narváez, obligando a Espartero a huir hacia el exilio.
REINADO DE Isabel II
DÉCADA MODERADA (1843-54). Líder: Narváez
EI hombre fuerte desde su inicio es el general Narváez. Se inicia un periodo caracterizado por el ejercicio de la jefatura del estado en la figura de la reina Isabel II, que tiene 13 años (en 1843), y un equipo de políticos moderados al frente del gobierno.
En síntesis.
La Constitución de 1845 va ser el instrumento que articule el sistema político diseñado por los moderados y ha de garantizar el dominio de la nueva oligarquía.
Se desarrolla una política conservadora donde la censura se va a utilizar para callar cualquier tipo de oposición
Es una etapa marcada por la crisis económica y la Segunda Guerra Carlista (1846-49)
Se crea la Guardia Civil en 1844, con el fin primordial de tener controlada la agitación en el medio rural y para proteger tanto a las personas como a las propiedades.
Se firma el Concordato de 1851 que normaliza las relaciones con el Vaticano
Se lleva a cabo la unificación administrativa y la creación de los gobernadores civiles. Para unificar las leyes se aprobó el Código Penal de 1851.
Se reorganizaron los distintos impuestos unificándolos en la reforma de la Hacienda en 1845
En la última fase, el gobierno de Bravo Murillo (muy conservador y represivo) va a provocar la oposición de amplios sectores políticos (parte de los moderados, los progresistas y la prensa).
EI régimen y sus protagonistas se caracterizan por la corrupción
BIENIO PROGRESISTA (1854-56)
Líderes: O’Donnell (moderado aperturista) y Espartero.
Revolución de 1854:
Los escándalos y la corrupción económica y política van a provocar reacciones de agitación social que van a alarmar a sectores del ejército y el liberalismo progresista. En este contexto, el general O’Donnel inicia un pronunciamiento que no provoca importantes adhesiones al comienzo. Se le une el general Serrano que con la publicación del Manifiesto de Manzanares (obra de Cánovas del Castillo), donde promete importantes reformas, da lugar a un levantamiento generalizado de carácter popular.
Isabel
II se ve obligada a entregar el poder al general Espartero.
En la revolución confluyen tres movimientos:
a.- Revolución moderada: responde a la inquietud de los moderados por el gobierno del conde San Luis. Su líder es O’Donnell, que se subleva contra el gobierno. Es apoyado por el joven Cánovas del Castillo como hace ver en el Manifiesto del Manzanares.
b.- Movilización de los progresistas. Tiene por objetivo llegar al gobierno por una vía revolucionaria.
c.- Surge una sublevación popular dirigida por líderes demócratas y republicanos que da lugar a levantamientos en muchas ciudades.
El Bienio lo podemos concretar con las siguientes carácterísticas:
Cánovas consigue frenar la revolución y que la reina nombre a Espartero (progresista) presidente del gobierno para que dirija el país con el apoyo de O’Donnell.
Se redacta la constitución de 1856 (non nata).
Se profundizan las medidas liberalizadoras, donde destacan la desamortización de Madoz (1855) sobre bienes eclesiásticos y civiles, y la Ley General de Ferrocarriles que tenía por objetivo favorecer el desarrollo económico.
Es una etapa de gran inestabilidad y conflictividad social.
En 1856, la reina destituye a Espartero y nombra presidente del gobierno a O’Donnell.
LA UníÓN LIBERAL (1856-1868):
partido que controló la vida política desde 1856 hasta 1868, estaba formada por todos los sectores partidarios de crear un partido intermedio entre el moderado y el progresista. Su fin era mantener el orden y llevar a cabo las reformas necesarias para recuperar el prestigio de las instituciones.
Tras un breve periodo de gobierno de O’DonneII la Reina nombra a Narváez, el cual paralizó el proceso de desamortización y restauró una política claramente conservadora.
Casi desde un principio, el régimen fue encaminándose hacia una crisis profunda que podemos analizar desde tres vertientes:
Crisis moral
Los partidos actúan directamente sobre la Corona logrando el encargo de formar gobierno o un decreto de disolución que permita, ya desde el poder, convocar unas elecciones que el gobierno siempre gana.
Crisis económica
La grave crisis europea que va desde 1856 hasta 1866 se manifiesta en España haciendo quebrar varias instituciones de crédito y provocando que la burguésía industrial y financiera se aleje del régimen.Crisis política
Es consecuencia del agotamiento del sistema y de sus protagonistas (por la edad). Esta crisis se manifiesta en los enfrentamientos entre los unionistas y los moderados. Desde 1863 hasta 1868, la crisis fue agudizándose con el descrédito de la Uníón Liberal, y el carácter cada vez más autoritario y conservador de los sucesivos gobiernos.
Diversas sublevaciones de algunos cuarteles, el deterioro del régimen y el objetivo de evitar una revolución social, facilita el acuerdo entre los demócratas, republicanos y progresistas en el Pacto de Ostende (Bélgica). En este acuerdo se considera a la Reina culpable de la situación y propónían una convocatoria urgente de las Cortes por sufragio universal. En 1867, tras la muerte de O’DonneII, la propia Uníón Liberal se incorpora al Pacto dado el inevitable hundimiento de la monarquía.
Partidos políticos fundamentales en la era isabelina
Partido Moderado
Representaba a los intereses de los grandes propietarios, aristocracia, alta burguésía, altos mandos del ejército y el alto clero. Su ideario se refleja en la Constitución de 1845. No gozaba de apoyo popular.
Partido Progresista
Representaba los intereses de la alta burguésía financiera e industrial. Se apoyaba en las clases medias urbanas. Rechazaban cambios revolucionarios, partidarios de las libertades pero no las de reuníón, huelga y asociación.
Partido Demócrata
Surge en 1849 del sector radical de los progresistas. Lo apoyan las clases medias, clases populares, intelectuales. Plantean el sufragio universal masculino. Estado aconfesional. Papel destacado en la revolución de 1868.
Los Republicanos
Realmente no era un partido. Eran un movimiento que en gran medida estaba dentro de las filas de los demócratas.
La Uníón Liberal
Este partido aparece en 1854 como escisión del liberalismo moderado. Agrupa al sector más conservador de los progresistas y al más “izquierdista” de los moderados Formado por “notables” de las dos tendencias. Líder: General O’Donnell.
EL PROCESO CONSTITUCIONAL
los liberales aprobaron una serie de instrumentos jurídicos (constituciones) para consolidar el nuevo régimen y desmantelar el A.R. Durante el reinado de Isabel II se aprobaron:
Estatuto Real (1834)
Era un proyecto de régimen que no llegaba a ser una constitución. Tenía un contenido extremadamente conservador e insuficiente para los liberales progresistas.
Redactado por los liberales moderados propugnaba una doble soberanía: el rey y las Cortes, por Io que no recogía el principio de soberanía depositado en la nacíón. Tampoco definía ni garantizaba los derechos individuales. Pretendía regular el funcionamiento de las Cortes dividíéndola en dos cámaras:
Estamento de Próceres: Formado por los grandes de España y otros representantes designados por la corona.
Estamento de Procuradores: Se elegía por sufragio censitario donde había que tener una renta anual de 12.000 reales para poder votar (sólo votaban el 0,15 % de la población)
EI Estatuto Real, por lo tanto, era como una especie de constitución no aprobada por las Cortes
Constitución de 1837
Con esta constitución se instaura definitivamente el régimen liberal, Pese a su tendencia progresista, tenía importantes concesiones a los moderados. Reconocía la soberanía nacional y reconocía ampliamente algunos derechos individuales, pero reforzaba el poder ejecutivo, atribuido a la Corona, y otorgaba conjuntamente el legislativo a las Cortes con el Rey. Éste nombraba a los ministros, pero éstos podrían ser objeto de censura por las Cortes, Io que obligaba a la Corona a inclinarse por la mayoría parlamentaria.
Carácterísticas:
Es progresista.
La soberanía es compartida por el rey y las Cortes. EI Rey podía suspender o disolver las Cortes y podía ejercer el veto sobre las leyes aprobadas por estas.
Cortes bicamerales: Senado y Congreso.
Sufragio censitario directo muy restringido. Para votar se exigía ser propietario o pagar unas contribuciones, lo cual excluía a las clases trabajadoras.
Declaración de algunos derechos de los ciudadanos.
Permite la existencia legal de otras religiones.
Se garantiza la separación de los poderes
Constitución de 1845
AI subir al poder los moderados presididos por Narváez, se considera necesario reformar la Constitución de 1837. Resultado de esta reforma es la C. De 1845. Aunque es un reflejo de la primera, realmente es un nuevo texto, muy conservador y que responde al ideario de los moderados. La redacción y aprobación de esta Constitución pone de manifiesto que cada partido tiene su texto constitucional.
Carácterísticas fundamentales
Poder legislativo: compartido (Cortes y el Rey). No hay una concepción de soberanía nacional. EI rey nombraba a los senadores y las Cortes no podían reunirse si la Corona no los convocaba.
No hay separación de poderes.
Reconocimiento de los derechos muy restringido. Hay una subordinación de la libertad al orden.
Religión oficial: la católica.
Se suprime la Milicia Nacional.
Ideología: conservadora.
Ley electoral: restringida. Votaban unos 99.000 electores de 12 millones de habitantes.
EI Rey nombrabas a los alcaldes y presidentes de las diputaciones.
Es, por tanto, una constitución que impedía, de hecho, la alternancia en el poder y beneficiaba al partido moderado. Todas estas carácterísticas hacían del reinado de Isabel II un sistema político reaccionario y al servicio de unas minorías oligárquicas dominantes. En síntesis, en esta constitución, la concepción política era similar a la que inspiraba el Estatuto Real.
LA LEGISLACIÓN ECONÓMICA DE SIGNO LIBERAL
tres medidas fundamentales:
La eliminación del régimen señorial
La eliminación de los mayorazgos
La desamortización
La desamortización de Mendizábal
En 1836 se aprueba la primera ley siendo ministro de Hacienda el liberal progresista Mendizábal.
El Decreto formaba parte de un programa que perseguía ganar la guerra consiguiendo fondos que permitiera poder pagar a la tropa y reformar la hacienda pública. Esta primera gran operación desamortizadora se aplicó, fundamentalmente, a los bienes del clero regular y secular, es por lo tanto una desamortización eclesiástica.
La desamortización de Madoz
Es la segunda gran desamortización de los liberales y se inicia con la Ley de 1855, en pleno Bienio Progresista del reinado de Isabel II. Una desamortización general, civil y eclesiástica. Se trataba, por tanto, de completar y terminar el proceso iniciado por Mendizábal. A diferencia con ésta, la Ley Madoz se desarrolla a gran velocidad.
Consecuencias de la desamortización:
Supuso el desmantelamiento casi completo de la propiedad de la Iglesia y de sus fuentes de riqueza, toda vez que el diezmo fue suprimido en 1837.
No resolvíó el problema de la deuda, pero si atenuó el déficit público.
No produjo un aumento de la producción agraria. Los nuevos propietarios, en general, se limitaron a seguir cobrando las rentas al sustituir el pago de los derechos señoriales y diezmos por nuevos contratos de arrendamiento. Además, las nuevas tierras que se pusieron en cultivo eran marginales, de baja calidad.
La desamortización provocó un refuerzo de la estructura de la propiedad de la tierra: acentuó el latifundismo en Andalucía y Extremadura y el minifundio en el Norte. Las tierras y fincas fueron a parar a los antiguos terratenientes locales, a nuevos inversores de la burguésía financiera, a intermediarios o especuladores.
Se constituyó una nueva elite (ya sea del partido progresista o moderado) plenamente identificada con el régimen liberal.
En las ciudades ocurríó lo mismo que en medio rural. Los mejores edificios fueron adquiridos por la alta burguésía, excluyendo a las clases medias, que copaban las viejas viviendas, y dejando para los obreros los arrabales de la periferia.
LA NUEVA SOCIEDAD DE CLASES
Desde la muerte de Fernando VII se inició el proceso de cambio de la sociedad estamental a una sociedad de clases. La nueva se estructuraba desde el mérito personal y la capacidad para adquirir propiedades. Los grupos sociales son abiertos y el lugar que se ocupa en el escalafón social depende del poder económico de cada persona o familia.
Clase dominante
Formada por las élites del A.R. En la medida que la alta nobleza mantiene su poder económico y se integra con los nuevos sectores dominantes como la alta burguésía. Ésta se enriquece con el proceso de desamortización y sus negocios en las actividades industriales y el desarrollo del ferrocarril. Así pues, la nueva oligarquía está formada por la aristocracia rica y la élite burguesa terrateniente, industrial y financiera.
Clases Medias
Es un grupo muy heterogéneo, formado por la mediana burguésía de las ciudades (pequeños empresarios, funcionarios, profesionales, comerciantes). En el medio rural se sitúan los pequeños y medianos propietarios de tierras que mantienen unos modos de vida tradicionales del medio rural.
Clases Populares
Formadas por la mayoría de la población. Los campesinos son la mayoría en un país esencialmente rural. El proletariado de las fábricas que se localiza en Cataluña y País Vasco, pero que aún es minoritario en España.