11.3 LA OPOSICIÓN A LA DICTADURA: PRINCIPALES GRUPOS Y EVOLUCIÓN EN EL TIEMPO. LA CRISIS DEL FRANQUISMO DESDE 1973 A LA MUERTE DE Franco.
El 1 de Abril de 1939 Franco firma el último parte de guerra. Comenzaba entonces 36 años de dictadura a cuyo frente se sitúa el Caudillo. El sistema político, denominado Franquismo que contó desde el principio con el apoyo de las llamadas “familias”, el ejército, la falange, la iglesia católica y los monárquicos. Hasta 1957 España sufríó los rigores de la posguerra, de la autarquía y del aislamiento internacional. Durante los años 60 la situación cambia tras el Plan de Estabilización y España comienza el llamado desarrollismo, que trajo una nueva situación económica y con ella, un cambio en la sociedad con una mayor apertura aunque siempre desde el control gubernamental. Los últimos años del franquismo y sobre todo desde 1973, la crisis es evidente en lo que se conoce como la “agonía del Franquismo”.
La oposición al régimen
Durante los primeros años de la dictadura, la oposición fue bastante escasa debido fundamentalmente a la poca uníón que existía entre los grupos opositores y a la fuerza represiva que manténía la dictadura sobre todo recurriendo al aparato legal: la Ley de Responabilidades Políticas (1939), la Ley para la supresión de la masonería y el comunismo en1950 y la Ley para la Seguridad del Estado en 1941.
Durante las primeras décadas la oposición giraba en torno a los republicanos en el exilio.
Aunque mantuvieron las instituciones no unieron sus intereses para aprovechar la coyuntura internacional tras la Segunda Guerra Mundial.
Los maquis, partidas de guerrilleros fundamentalmente en el monte, que realizaron acciones hasta 1952.
Hay que destacar también la actividad de don Juan de Borbón, que tras una primera aproximación a los rebeldes, desde 1945 mantuvo una reivindicación permanente para llamar la atención de las democracias mundiales sobre la dictadura de Franco. ( Manifiesto de Lausana, 1945).
Los movimientos vecinales, que amparados en reivindicaciones de infraestructuras urbanas, canalizaron una protesta política.
En la década de los años 60 y de mano de los cambios económicos y sociales, la oposición se hace cada vez mayor en distintos grupos:
Las protestas estudiantiles, al cambio social de los jóvenes se une el apoyo de algunos profesores ( Tierno Galván, García Calvo…), expulsados de sus cátedras por su postura crítica contra el régimen.
Por su parte la Iglesia mantuvo su propia postura: las altas jerarquías siguieron prestando apoyo al régimen, pero las bases cristianas comenzaron a movilizar las organizaciones del apostolado obrero. Desde los años 70 algunos hechos ponen de manifiesto las divergencias dentro de las filas de la iglesia, como por ejemplo las protestas de los obispos vascos frente a las condenas de ETA, o la declaración pidiendo perdón a los españoles para el papel de la Iglesia durante la Guerra Civil. Cabe destacar también la actitud crítica de el cardenal de Madrid, Vicente Tarancón.
Mientras el movimiento obrero continua consolidándose; gracias a la ley de 1958 se permite la negociación de las condiciones laborales en cada empresa y sector, así nacen las primeras comisiones obreras que se disuelven tras la negociación. Estas comisiones comienzan a estabilizarse a partir de 1964 cuando aprovechando la legalidad que se les confiere y el impulso desde el PCE y se van extendiendo a todo el Estado. A partir de 1967 éstas son declaradas ilegales y tras algunas reuniones clandestinas, son detenidos los principales líderes en 1972. Su juicio, el llamado “proceso 1001”, se convirtió en una prueba de fuerza para el régimen. En la fecha señalada para el mismo, 20 de Diciembre 1973, un comando de ETA asesinaba a Carrero Blanco. Además las huelgas pasaron a ser habituales en las grandes ciudades como Madrid y Barcelona, y especialmente reivindicativas en Guipúzcoa, Vizcaya o Asturias.
Pero sin duda la oposición más violenta viene de mano del terrorismo, fundamentalmente ETA. Nace en 1959 como resultado de la fusión del colectivo cultural Ekin y un sector de las juventudes del PNV, descontentos por su pasividad ante el régimen. Su primer atentado lo cometen en 1968 y a partir de entonces su “ guerra contra el estado” , los mantiene en activo incluso durante la Democracia. Fueron perseguido y juzgados como en el Proceso de Burgos, donde 16 terroristas fueron condenados a muerte en 1970. Tras muchas presiones internacionales, incluido el Pontífice Pablo VI, su pena fue conmutada. La banda terrorista continuó su escalada de terror llegando a asesinar al Presidente Carrero Blanco en 1973.
Surgieron también otros grupos de terroristas de extrema izquierda como el FRAP y los GRAPO. El régimen no se manténía impasible ante ellos, el Tribunal de Orden Publicó, mantuvo multitud de sentencias represivas. Cabe destacar el fusilamiento del dirigente comunista Julián Grimau, la ejecución del anarquista Salvador Puig Antich y las cinco ejecuciones de acusados de terrorismo en Septiembre de 1975.
La oposición política, fue fundamental en el interior desde la clandestinidad, como en el exterior. La fuerza principal fue el PCE, liderado por Santiago Carriillo, vinculado a los movimientos que empezaban a aparecer entre los estudiantes, movimientos vecinales y sindicales. Su estrategia será la colaboración entre todas las fuerzas antifranquistas, y favorecer el movimiento revisionista conocido como “eurocomunismo”. Que se opónía a las directrices soviéticas.
Por su parte el PSOE se distancia y sufre distintas crisis motivadas por la falta de coordinación . Desde 1960 surge con fuerza la figura de Tierno Galván, fundador del Partido Socialista Popular. Tras algunos incidentes motivados por la tensión entre la dirección, que seguía en el exilio, y los nuevos militantes del interior, en 1970 una nueva plataforma formada por figuras como Felipe González, Alfonso Guerra o Luis Yáñez, consiguen imponer la renovación de las tesis ideológicas y la formación de una dirección del partido con predominio de la organización existente en el interior. Su renovación definitiva se sitúa en el Congreso de Suresnes, en 1974 que llevó a Felipe González a la dirección del mismo.
Junta estos grupos se constituyó una oposición moderada, formada por personalidades políticas e intelectuales, que han evolucionado desde el apoyo al franquismo, hasta la adopción de posiciones liberales, democristianas o socialdemócratas. No llegan a ser alternativa porque falta coordinación con los movimientos sociales. Destaca. La labor de Gil Robles artífice de la plataforma de Múnich.
La crisis del franquismo. 1973-1975
Desde 1973 la crisis del franquismo es palpable tanto a nivel interior como exterior. El 20 de Diciembre de 1973 un comando de ETA asesina a Carrero Blanco, siendo sustituido por Carlos Arias Navarro, representante de la línea dura del franquismo, partidarios de un gobierno de “mano dura”, ante el creciente aumento de huelgas y movilizaciones que empiezan arrojar incluso víctimas.
El nuevo gobierno comienza incorporar hombres aperturistas como Pío Cabanillas o Fraga Iribarne. El 12 de Febrero se presenta en las Cortes el nuevo programa de gobierno, con medidas liberalizadoras que se entienden con una transición hacia la monarquía, como la elección de alcaldes, la reforma sindical o el estatuto que permite el nacimiento de asociaciones políticas. Pero no todos los miembros del gobierno están en la misma línea, algunos sectores ultra temen el cambio, máxime cuando se produce en Portugal “La revolución de los claveles”, que pone fin a la dictadura del país vecino. Aprovechando el atentado cometido por ETA en la calle Correos de Madrid, en el que se quiere vincular al PCE, la presión de los ultra crece y consiguen la destitución de Pío Cabanillas, partidario de esta transición en vida del Generalísimo. Pero el régimen estaba ya en vías de extinción. El 1 de Octubre Franco reúne en la plaza de Oriente los españoles para contrarrestar la campaña internacional.
En estos últimos momentos del franquismo la oposición se organizó en torno a dos formaciones :
Junta Democrática de España, nacida en Julio de 1974 en París, formada por el PCE, personalidades liberales y monárquicas, a las que pronto se une el PSP. Esta Junta recoge en su manifiesto los principios democratizadores necesarios para hacer una transición.
Por su parte el PSOE, renovado tras el Congreso de Suresnes, no se integra en la Junta y propone su propia reivindicación. Tras varios contactos con otras fuerzas políticas como los nacionalistas del PNV, o algunas organizaciones comunistas, fundan la Plataforma de Convergencia Democrática en Octubre de 1975. Finalmente decide unir esfuerzos en la llamada “Platajunta”.
Además el régimen comienza a quedarse aislado internacionalmente, a ello contribuyeron hechos con el fin de las dictaduras en Portugal o en Grecia ambos de 1974 que dejaban España como única dictadura superviviente de la Europa Occidental.
El 20 de Noviembre de 1975 Franco muere y se instala un Consejo de Regencia. Deja tras de sí e un estado en crisis y un nuevo jefe de gobierno, Juan Carlos I.