EVOLUCION DE LOS PARTIDOS POLITICOS
El PSOE y la UGT, tras negarse a participar en la Asamblea Nacional y ante la crisis de la dictadura, modifican su posición con respecto a ella. En agosto de 1929 dejan clara su aspiración a un Estado republicano de libertad y democracia. Estos grupos estaban aglutinados en torno a Alianza Republicana, de la que forman partes: Manuel Azaña, Marcelino Domingo, Alejandro Lerroux. En el programa común se demanda la convocatoria de Cortes Constituyentes, una solución al problema de Marruecos, la ordenación federativa del Estado, la supresión de foros y censos, la atención a la enseñanza primeria y un plan mínimo de seguimiento de los problemas del proletariado. Se adhieren a Alianza Republicana intelectuales como Unamuno o Machado. Las clases medias catalanas, ante la fragilidad opositora de la Lliga, encuentran pronto un interlocutor radical en la figura de Francesc Macia y en su partido Estat Catala. Otro grupo catalanista, Accio Catalana se opone con firmeza a la dictadura. En marzo de 1932, Estat catala y el Partit Republica Catala, fundan Esquerra Republicana de Catalunya.
EL GOBIERNO DE BERENGUER
Berenguer es el elegido por el rey Alfonso XIII para conducir la transición desde el régimen dictatorial a la normalidad constitucional de 1876. Esto supone pasar por alto los últimos siete año y las responsabilidades del monarca en el advenimiento al poder de Primo de Rivera.
Se unen a esta dificultad el ritmo lento de transición que adopta el general Berenguer y los presupuestos económicos de carácter restrictivo que paralizan la inversión estatal y la demanda de bienes a los sectores industriales. Berenguer establece medidas para diluir el sistema de poder de la dictadura como la sustitución de concejales por los anterior a 1923 y la disolución de la Asamblea Nacional Consultiva. Decreta también una amnistía que soluciona el problema de los artilleros y facilita la vuelta del líder estudiantil, el reingreso de los catedráticos en la universidad y el retorno de Unamuno de su exilio. Su gobierno ha de hacer frente a la hegemonía de la izquierda social en la calle, que protagoniza una oleada de huelgas dirigidas por PSOE y UGT. Una CNT reconstruida que logra recuperar un nivel de afiliación masivo en el nuevo clima de tolerancia que se impone. Durante esta etapa, se realiza de forma apresurada la reconversión de la UP en un bloque monárquico dirigido por Calvo Sotelo, llamada Unión Monárquica Nacional. Este bloque no logra aunar a todas las fuerzas alfonsinas pues se distancian de el antiguos monárquicos, los cuales establecen contactos con los grupos republicanos y encuentran la adhesión de una parte de la intelectualidad y del ejercito.
PACTO DE SAN SEBASTIAN E INSURECCION REPUBLICANA
El Pacto de San Sebastian es el fruto de los contactos entre el viejo republicanismo y los nuevos grupos conservadores que estiman necesaria la caída de la monarquía. Fue firmado el 17 de agosto de 1930. Este pacto supone la conjunción de esfuerzos entre grupos que abarcan un amplio espectro político: el conservadurismo republicano, el regionalismo gallego, el catalanismo republicano, el centro-izquierda, el radicalismo y el federalismo. En el acuerdo se establece la formación de comité ejecutivo y la estrategia para el advenimiento de la República, consistente en la insurrección del ejercito. La rebelión de Cataluña y la movilización obrera. A partir de entonces tiene lugar
una campaña a favor del régimen republicano, que alcanza su máxima expresión en el mitin conjunto de los republicanos celebrado en Madrid. Los contactos con las organizaciones proletarias UGT y CNT dan como resultado su incorporación a la conspiración. El comité pasa a denominarse Gobierno provisional de la República. El comité establece el 15 de diciembre como fecha para la insurrección, pero los capitanes Galan y Garcia Hernandez se adelantan a la fecha prevista e inician el levantamiento en Jaca. Proclaman la República en la ciudad oscense y se dirigen hacia Huesca. Los dos capitanes son juzgados en consejo de guerra sumarísimo y fusilados el domingo 14 de diciembre. En Madrid, el general Mola, director general de seguridad, ordena da detención del Gobierno provisional y de miembros destacados del republicanismo y del socialismo. El movimiento previsto para el dia 15 se convierte en un fracaso en Madrid al no movilizar las organizaciones obreras. Con la proclamación del estado de guerra, la censura previa y parte del comité revolucionario detenido, el movimiento se extingue en el resto del Estado, que ha respondido parcialmente con la convocatoria de huelgas generales en numerosas ciudades.
LA CAIDA DE LA MONARQUIA
El fracaso de la insurrección no detiene el ascendente movimiento hacia un cambio de régimen. Tras el levantamiento del estado de guerra, la universidad española se paraliza ante los ataques de los legionarios nacionalista en la Universidad de Madrid. El gobierno vuelve a cerrar los centros universitarios. El gobierno de Berenguer no consigue concertar con la oposición el modelo de elecciones. Los republicanos manifiestan su posible retraimiento si el carácter de las mismas el legislativo. El 14 de enero de 1931, Alfonso XII acepta la dimisión de Berenguer y abre paso al ultimo gobierno de la monarquía, que recae en el almirante Aznar. El nuevo ejecutivo esta formado por el sector mas oligárquico del capitalismo del alfonsismo (Romanones, Garcia Prieto, Berenguer, Juan de la Cierva y Gabriel Maura) y el conservadurismo catalán de Lliga (Juan Ventosa). Como misión inmediata tiene que celebrar el juicio contra el gobierno provisional de la República, que se convierte en un alegato contra la ilegitimidad del régimen constituido. El tribunal condena a los acusados a seis mese y estos son puestos rápidamente en libertad. Las elecciones municipales se convocan para el 12 de abril. En el conjunto del Estado se formalizan candidaturas conjuntas de republicanos y socialistas. A media tarde del 12 de abril se empiezan a conocer algunos datos de las capitales de provincia, el triunfo de las candidaturas republicanas es mayoritarios, lo que es interpretado como el apoyo a la República por parte de los sectores mas dinámicos de la sociedad. El 13 se produce el contacto entre los representantes del ultimo gobierno Alfonsino y los miembros del Gobierno provisional. El monarca intenta congelar el poder real hasta unas futuras elecciones a Cortes, que decidirían el modelo de régimen, pero esta opción no es aceptada por el comité revolucionario, que exige el traspaso inmediato de poderes. Finalmente el rey decide salir de España desde el puerto de Cartagena. En todas las capitales de provincia, las multitudes aclaman al nuevo régimen. Éibar es la primera ciudad donde se proclama la República. El Gobierno provisional proclama la II República española en la tarde del 14 de abril.