El Fin del Imperio Romano y el Surgimiento de los Reinos Germánicos
Disminuyó la mano de obra esclava y decayó la economía y el comercio. En el siglo IV, Diocleciano acabó con la anarquía militar y emprendió una serie de reformas, que siguió Constantino, pero fueron insuficientes para evitar el declive del Imperio Romano. El emperador Teodosio lo dividió entre sus dos hijos en el año 390: Imperio de Occidente e Imperio de Oriente. La parte occidental fue invadida por los pueblos germanos. En el año 476 d.C. cayó el último emperador de Occidente. Los reinos germánicos sustituyeron al Imperio Romano. Nacía así un nuevo orden político, con aportaciones originales de los pueblos germanos: Europa. Uno de estos reinos sería el visigodo.
La Monarquía Visigoda
En el año 409, diversos pueblos germanos atravesaron las fronteras del Imperio Romano y acabaron penetrando en Hispania. Para frenarlo, Roma pactó con otro pueblo bárbaro que estaba ya romanizado, el visigodo, para proteger el territorio de Hispania. Entre 416 y 476, los visigodos acabaron con los alanos y vándalos. Tras la desaparición del Imperio Romano, los visigodos crearon un reino desde el Loira hasta el Tajo. Los francos los derrotaron en el 507 y los expulsaron hacia el sur de los Pirineos. Los visigodos acabaron fundando la capital de Toledo. La monarquía visigoda se consolidó tras un proceso de unificación territorial, religiosa y jurídica. Destacaron reyes como Leovigildo, que consiguió la unidad territorial derrotando a suevos y bizantinos, e intentó también conseguir la unidad entre visigodos y los hispanorromanos. Su hijo Recaredo se convirtió al cristianismo en el III Concilio de Toledo, en el año 589, y consiguió la unidad religiosa de los dos pueblos. Finalmente, Recesvinto estableció un código común de leyes para ambos pueblos con el Fuero Juzgo en 654. Durante el reinado visigodo decayó la vida urbana, la economía y la cultura, como en el resto de los reinos germánicos. Desde el punto de vista artístico destacó la orfebrería, como el tesoro de Guarrazar. En la cultura destacó San Isidoro de Sevilla y sus Etimologías, una especie de enciclopedia en la que se recogía todo el saber de la época. La monarquía visigoda fue electiva. Como consecuencia de ello, el reino visigodo desapareció en el 711, siendo rey Don Rodrigo. Muerto Witiza a finales del año 708, sus hijos no aceptaron la elección de Don Rodrigo y, para destronarlo, pidieron ayuda a un pueblo que se había asentado en el norte de África, los bereberes. Derrotaron a Don Rodrigo en la batalla de Guadalete, en el 711. Así finalizó el reino visigodo y comenzó una nueva etapa en la historia de España: la España musulmana.
Reinos Cristianos de la Baja Edad Media (S. XIV y XV)
En los dos últimos siglos medievales coincide un periodo de crisis general en toda Europa. Hay una fase de hambre, peste y se produce una crisis demográfica.
- En la primera mitad del S. XIV hubo una crisis de subsistencia. Y llega a la Península la Peste Negra en 1348, que produce una crisis demográfica.
- Hubo descontento de los campesinos que provoca levantamientos contra la nobleza y revueltas urbanas, por las clases populares. Imponen a los campesinos lo conocido como ‘malos usos’, que eran obligaciones o condiciones abusivas. Destaca el movimiento antisemita en toda Europa. Muchos judíos mueren y otros optan por convertirse al cristianismo, lo que desencadena el problema de los conversos.
- En lo político se abre un periodo de luchas y conflictos entre la monarquía, que quería imponer su autoridad, y los nobles, que se negaban a ver sus poderes reducidos: guerras civiles en Castilla, conflicto dinástico en Navarra, cambio de dinastía en Aragón. Hay una guerra civil en Cataluña entre el monarca, Juan II de Aragón, y la Generalitat.
Organización Política
En la corona de Castilla la autoridad de la monarquía se fortalece. Lo ayuda la difusión del Derecho Romano, con la supremacía absoluta del rey. Surgen instituciones como el Consejo Real, las Cortes y la Audiencia. Y el órgano supremo llamado Chancillería. La corona de Aragón era una confederación de territorios, con leyes e instituciones propias. Se mantiene el concepto de pacto entre señor y los vasallos (vasallos: grupos de dirigentes, nobleza, clero y patriarcado urbano). Las instituciones aragonesas más importantes surgen en esta Baja Edad Media:
- Los virreyes, actuaban en nombre del rey, a veces eran miembros de la propia familia real.
- Las Cortes, actuaban de contrapeso a la autoridad real, con más protagonismo político que las de Castilla: existían cortes independientes en Aragón, Valencia y Cataluña.
- Las Diputaciones, comisiones de las Cortes para recaudar los subsidios solicitados por el monarca, que pasaron a ser permanentes y a tener funciones políticas propias: Generalitat 1359; Diputación del Reino de Aragón 1412; Diputación del Reino de Valencia 1419.
- El Justicia de Aragón, desempeñado por un miembro de la nobleza designado por las Cortes y cuya función era defender los fueros de Aragón frente a posibles pretensiones autoritarias de la monarquía.
En Navarra, prevalece la doctrina pactista, y las prerrogativas de las Cortes impiden el fortalecimiento del poder de la monarquía. Los distintos reinos de España y del Occidente Europeo saldrían progresivamente de estas crisis a lo largo del S.XV.
Los Reinos Cristianos de la Reconquista
Evolución Política: El Proceso de Reconquista y Repoblación
Con la mayor parte de la Península ocupada por los musulmanes, en el norte se fueron gestando poco a poco unos nuevos condados y reinos cristianos. Este proceso se llevó a cabo en dos fases: la primera de creación y consolidación, se extiende hasta el siglo XI; y la segunda, a partir de la caída del Califato de Córdoba, de expansión militar hasta el siglo XV.
El término Reconquista hace referencia al proceso histórico por el cual los reinos cristianos peninsulares conquistaron y repoblaron las tierras en poder de los musulmanes. Se llevó a cabo desde el siglo VIII hasta 1492, año en el que los Reyes Católicos conquistaron Granada. Esta denominación tiene su origen en la convicción por parte de los cristianos de ser los herederos de la tradición cristiana de la monarquía visigótica.
Etapas de la Reconquista
La Reconquista se desarrolló en varias etapas:
Formación de los Primeros Reinos Cristianos: Siglos VIII al XI
Del siglo VIII al XI la hegemonía de Al-Ándalus fue un hecho que obligó a los cristianos a replegarse hacia las montañas del Norte. Allí nacieron una serie de reinos y condados independientes:
- Los musulmanes no llegaron nunca a dominar la Cordillera Cantábrica, habitada por vascos, cántabros y astures, donde se refugiaron algunos nobles visigodos que huían del dominio islámico. Uno de ellos, Pelayo, derrotó a los musulmanes en Covadonga (722). Sus sucesores crearon el Reino de Asturias, que manifestó su independencia del Emirato negándose a pagar impuestos.
- En la segunda mitad del siglo IX, Alfonso III aprovechó la debilidad de los emires cordobeses y ocupó el territorio entre la Cordillera Cantábrica y el valle del Duero, una zona despoblada y abandonada por las guarniciones cordobesas. Ordoño II (914-924) trasladó la capital a León, y así el territorio empezó a denominarse Reino de León; repobló la zona con gallegos, cántabros y vascos, además de mozárabes huidos de Al-Ándalus. Además, fortificó las tierras de la Meseta con la construcción de numerosos castillos y con la creación del condado de Castilla, gobernado por condes nombrados por el rey leonés. Uno de ellos, Fernán González, se declaró independiente en la segunda mitad del s. X (961). El monarca encomendó la repoblación de los territorios ocupados a nobles y eclesiásticos y concedió también amplios privilegios a los nuevos pobladores (repoblación libre). Este tipo de repoblación, llamada presura, dio como resultado la existencia de comunidades de campesinos libres y pequeños propietarios. (La presura consistía en la simple ocupación de una tierra que, según el derecho romano, quien cultivaba un terreno despoblado se convertía en su propietario).
- En esta etapa aparecieron los condados pirenaicos que tuvieron su origen en una franja fuertemente fortificada al sur de los Pirineos, creada por el emperador Carlomagno para defenderse de los ataques musulmanes: La Marca Hispánica. A principios del siglo IX, navarros y aragoneses se independizaron de los francos. Así nacieron el condado de Aragón y el reino de Pamplona, núcleo originario del futuro Reino de Navarra. El dominio carolingio en tierras catalanas fue más largo. Desde finales del siglo IX y hasta finales del X se fueron independizando estos territorios, surgiendo los condados catalanes, entre los cuales el de Barcelona se convirtió en el más extenso y poderoso. Destacaron dos personajes: Vifredo el Velloso, que reunió bajo su mando los principales condados catalanes y gobernó con autonomía aunque conservó el vasallaje al rey franco, y Borrell II, que consolidó la primacía del condado de Barcelona y aprovechó el final de la dinastía carolingia para abandonar la obligación de prestar vasallaje al nuevo rey, lo cual supuso la independencia de hecho.
Con el paso del tiempo, los pequeños reinos y condados se fueron consolidando. De todos ellos destacó el Reino de Pamplona que en tiempos de Sancho III (1000-1035) alcanzó su máxima expansión anexionándose los condados de Aragón y Castilla. Sin embargo, a su muerte el reino se dividió entre sus hijos: Ramiro se proclamó rey de Aragón, Fernando I, rey de Castilla y García Sánchez II, rey de Navarra.