Dictadura Primo de Rivera: Introducción
El reinado de Alfonso XIII fue un periodo convulso. Se produjo la crisis del sistema de Cánovas por la propia crisis del turno de partidos y de los partidos conservador y liberal. Se sumaron los efectos de la Primera Guerra Mundial y la guerra de Marruecos. Como respuesta a esta crisis, el sistema respondió con una tímida línea reformista o revisionista a principios de siglo y con un cierre del sistema político después. Ante el fracaso, el rey Alfonso XIII no puso objeción a la llegada de Primo de Rivera, con el que se consumó el final del sistema. Fue apoyado por una gran mayoría que ya se veía en él al cirujano de hierro que iba a acabar con los principales problemas existentes para después dejar paso al sistema parlamentario. Sin embargo, sus deseos de perpetuarse en el poder dieron lugar a su caída y a la de la monarquía, lo que propició la llegada de la República.
Golpe de Estado
La derrota sufrida frente al líder rifeño Abd-el Krim en Annual motivó una comisión investigadora parlamentaria y la redacción de un informe que se convirtió en una dura crítica al régimen político y al rey. Antes de permitir su aprobación, diversos sectores del ejército liderados por Primo de Rivera realizaron un golpe de estado el 13 de septiembre de 1923. Se llevó a cabo con suma facilidad y sin derramamiento de sangre. Ni el gobierno ni la población opusieron resistencia. Las causas de su triunfo fueron la inoperancia de los partidos de turno, el estado de agitación social influido por la Revolución Rusa de 1917 y el ejemplo del triunfo del fascismo en Italia. Aunque Primo de Rivera no tenía un programa preciso, se suponía que una vez recuperado el país, los militares se retirarían para volver a la normalidad constitucional. Un gobierno que resolviera los problemas nacionales pendientes: caciquismo, orden público en Marruecos y nacionalismos.
Directorio Militar (dic. 1923-dic. 1925)
Formado por oficiales de alta graduación. Medidas políticas: 1) Publicación de un manifiesto a los españoles donde se exponían las directrices políticas (nombrado antes). 2) Control del ejército: se declaró el estado de guerra y los gobernadores civiles fueron sustituidos por militares. 3) Disolución del congreso y parte electiva del senado. 4) Suspensión de las garantías constitucionales: el derecho de reunión, asociación y libertad de prensa. Solucionar problemas más graves: A. Depurar la administración y acabar con el caciquismo: se detuvo y persiguió a los antiguos funcionarios de la administración local y provincial acusados de corruptos. Se aprobó el estatuto municipal de marzo de 1924 que modificaba la administración local, aunque nunca se llevó a cabo. B. Acabar con el terrorismo anarquista y recuperar la seguridad: el número de atentados descendió, debido en parte a las contundentes medidas represivas, pero también a la crisis de la CNT y del PCE. C. Erradicar los nacionalismos: se adoptó una política represiva. El estatuto provincial promulgado en 1925, que no llegó a aplicarse, era producto de una visión defensiva contra los nacionalistas. Quedó prohibido el uso del catalán en actos públicos y otras manifestaciones culturales. El catalanismo conservador sufrió una decepción y se opuso, aunque de forma pacífica. El nacionalismo radical optó por la vía de la insurrección separatista. D. La resolución del conflicto marroquí: la humillante derrota sufrida por las tropas españolas en el conocido como Desastre de Annual fue una de las causas que propició la llegada de Primo de Rivera. A pesar de los problemas iniciales, gracias al acuerdo hispano-francés de julio de 1925, el problema se solventó con éxito. El inicio de operaciones militares fue en septiembre, lo que le dio el triunfo en la guerra del Rif con el desembarco de Alhucemas y la rendición de Abd-el-Krim en 1927.
El intento de instauración del régimen: Directorio Civil (1925-1929)
Debido a los diversos éxitos, Primo de Rivera vio la oportunidad de instaurar el régimen. A. Sustitución del Directorio Militar por un gabinete civil. B. Impulso de la Unión Patriótica: se propuso relanzar el partido. C. La Asamblea Nacional Consultiva: a finales de 1927 se reunió una Asamblea Nacional Consultiva en la que se ponía en práctica un sistema de representación política corporativa. Sus miembros representaban a los sectores económicos dominantes. Sus debates se centraron en problemas económicos y técnicos-jurídicos. El contenido más importante de la asamblea fue elaborar un proyecto constitucional.
Política Económica y Social
Política Económica: se caracterizó por el intervencionismo estatal. Hubo prosperidad hasta 1929 y crisis a partir de ese año. Realizaciones: 1) Desarrollo de la red ferroviaria: se aprobó el estatuto ferroviario y se modernizaron las carreteras. Se eliminó el paro obrero e incrementó la industria. 2) Política hidráulica: se mejoró el riego, pero la ausencia de reformas estructurales mantuvo al campo atrasado. 3) Se fundó el Banco Exterior de España. 4) Se crearon monopolios: Telefónica, CAMPSA y Tabacalera. 5) Se desarrolló el turismo: espectacular a corto plazo, pero a largo plazo supuso un enorme gasto público. Política Social: lo más importante de la obra social fue la organización corporativa, que tenía como célula primaria los comités paritarios, donde actuaban conjuntamente obreros y empresarios. El segundo peldaño lo constituían las comisiones mixtas provinciales y el tercer peldaño eran los consejos de corporación, órgano superior de cada oficio. Se creó el Consejo de Trabajo, Comercio e Industria de Reformas Sociales, que impulsaba la legislación social y la inspección de las condiciones de trabajo.
Oposición a la Dictadura y la caída de Primo de Rivera
El fracaso de la dictadura a la hora de renovarse hizo que se agudizaran los movimientos de oposición: 1) Partidos republicanos: se agruparon en una Alianza Republicana que atrajo a los monárquicos. 2) Movimiento obrero: la CNT recobró fuerzas y los más radicales se unieron en la FAI. Las condiciones de trabajo seguían siendo pésimas y la dura represión sobre los obreros distanció a la UGT y al PSOE. 3) Intelectuales: creció la oposición, encabezada por Unamuno. 4) Ejército: rivalidades personales y diversos incidentes enfrentaron a Primo de Rivera con diversos generales. Además, la crisis económica generada a partir del desplome financiero en Wall Street contribuyó a la caída de la dictadura. Ante esta situación y sin contar ya con el respaldo de la monarquía, Primo de Rivera decidió dimitir el 27 de enero de 1930.
Caída de la Monarquía
Tras la caída de Primo de Rivera, el vacío constitucional se intenta llenar con una vuelta a la Constitución de 1876. El encargado de sustituir a Primo de Rivera fue Dámaso Berenguer. El propósito de dar vuelta a la constitucionalidad fue bien acogido por la opinión pública. Las conspiraciones militares desaparecieron. Sin embargo, su gobierno supuso un deterioro progresivo de la situación. La oposición se unió a la izquierda. Las fuerzas políticas que se habían formado con la revolución social al margen del sistema de la Restauración habían cobrado fuerza. Socialistas, catalanistas y republicanos se habían unido en el Pacto de San Sebastián, impulsando un movimiento político que resultó ser un fracaso. Pero esto no evitó la crisis del gobierno de Berenguer ni el malestar contra el régimen. Tras la dimisión de Berenguer, el rey encargó el gobierno al almirante Aznar. Sin embargo, su gobierno era débil y dividido. Ante la crisis, se decidió convocar elecciones municipales el 12 de abril de 1931. Los resultados fueron claros: pese a que el número de concejales monárquicos fue superior, habían sido elegidos en zonas rurales donde el caciquismo estaba presente. En las ciudades, el triunfo republicano parecía incuestionable. Alfonso XIII, consciente de los resultados, se exilió voluntariamente. El día 14 se proclamó la Segunda República. Se inició así una nueva etapa republicana marcada por una gran inestabilidad que desembocó en la guerra civil.