Nos encontramos ante un texto que recoge parte del discurso de Juan Negrín, presidente del Gobierno durante la II República (junio de 1937-1939) en el Council of Foreign Relations de Nueva York, el 8 de mayo de 1939. En el primer párrafo nos sitúa ante el gobierno de la II República, iniciada el 14 de abril de 1931, con un gobierno provisional de izquierdas (abril-diciembre de 1931) y la elaboración de una Constitución, con una oposición derechista. Se inicia el Bienio Reformista (1931-1933) con un programa de reformas territoriales, agrarias, religiosas, militares y sociales. Le sucederá el Bienio Conservador (1933-1936) basado en desmantelar las reformas propuestas en el periodo anterior.

El estallido de la Guerra Civil

En los siguientes párrafos nos sitúa en febrero de 1936, donde el Frente Popular gana las elecciones. Se produce una radicalización de la situación política junto con violencia callejera, anticlericalismo y tensión social que dio paso al estallido de la Guerra Civil, tras el asesinato de Calvo Sotelo, cita el texto “líder de la derecha monárquica y fascista”, utilizado para justificar el levantamiento de los sublevados el 18 de julio de 1936. La situación española no era igual que la del resto de Europa.

Contexto internacional y nacional

Se considera la Guerra Civil como prólogo de la II Guerra Mundial, fuerzas democráticas contra el fascismo. La crisis de 1929, una crisis social, un mal cierre de la I Guerra Mundial y el temor de revolución comunista como en Rusia (1917), provocaron el desprestigio de las democracias liberales, una radicalización creciente y un auge del comunismo, el fascismo y el nazismo. La reforma militar favorecida por Manuel Azaña durante el Bienio Reformista (1931-1933) creó un malestar en la institución militar. Hemos de tener en cuenta las circunstancias internas que se redactan, en concreto, al periodo de la presidencia de Juan Negrín tras el estallido de la Guerra Civil.

Juan Negrín: Presidente del Gobierno

Juan Negrín, del ala centrista del Partido Socialista de la mano de Indalecio Prieto, empieza su actividad política durante la República. Es elegido Diputado a Cortes por la circunscripción de Las Palmas y ocupará escaño en las elecciones siguientes. Representa a la República en foros internacionales como la OIT y la Unión Interparlamentaria.

Ministro de Hacienda

En septiembre de 1936 es ministro de Hacienda de Largo Caballero, pone orden a las finanzas y asegurando, mediante la evacuación de reservas de oro a la URSS y Francia, el aprovisionamiento de armas y alimentos para la defensa de la República. Pretendía poner a salvo las arcas del estado del enemigo. El «oro de Moscú» estaba destinado al pago del armamento adquirido a Rusia y otros países, invertidos en la compra de armas. La propaganda franquista afirmó que el oro del Banco de España había sido robado por la República y entregado a Stalin sin contrapartidas.

Presidencia de Negrín

En 1937 Juan Negrín desempeñó un papel crucial en la política republicana. El gobierno de Caballero se tambaleaba, ante el descontento de comunistas, prietistas y republicanos de izquierda, por falta de integración y mala gestión del esfuerzo bélico. Le acusaban de ineficacia, falta de centralización y condescendencia hacia las fuerzas de la izquierda republicana (anarquistas, caballeristas y del POUM). Los comunistas provocaron una crisis, pidiendo su sustitución al frente de la Guerra y Manuel Azaña, se mostró de acuerdo. Ante la presión de los prietistas, que querían a Negrín como presidente, tras dimitir Caballero el 17 de mayo de 1937, Azaña le nombró presidente del Gobierno.

Medidas de gobierno

Negrín quería restablecer el orden constitucional en la zona republicana y recurrir a la ley para evitar los excesos violentos de la guerra y restableció la libertad religiosa y de culto. El 1 y 2 de octubre de 1937 se celebraron sesiones de las Cortes en Valencia. Después del discurso en el que expuso su programa y apremiaba a ganar la guerra, trasladó el Gobierno a Barcelona (octubre de 1937), y en abril del 38 reorganizó su gobierno. Su primer acto fue la publicación de «Trece puntos de Negrín» (30 de abril de 1938), que establecían los objetivos por los que continuaba la guerra y sobre los cuales pretendía establecer un acuerdo con el bando franquista. Los sublevados lo rechazarán.

Exilio y muerte

Personifica la resistencia frente a los militares y las potencias fascistas. No evitó la derrota y se exilió a Francia en 1939. En 1940 se traslada a Londres, donde encarnará la autoridad en el exilio. En 1945, derrotado el eje fascista, acude a México donde dimite como presidente del gobierno. Después de pasar un tiempo en el Reino Unido, fijó su residencia definitiva en Francia. Falleció en París con 64 años.