Introducción y contexto histórico

El capítulo aborda el período de la **Guerra Civil Española (1936-1939)** y el **primer franquismo (1939-1959)**, señalando cómo ambos momentos están profundamente interrelacionados. La Guerra Civil dejó al país devastado social y económicamente, mientras que el régimen franquista prolongó esa crisis con políticas represivas y un modelo económico fallido. La represión contra los vencidos, el exilio de cientos de miles y las purgas en la administración pública y privada tuvieron consecuencias graves no solo para las víctimas, sino también para el tejido social y económico del país.

El régimen franquista se caracterizó por una amalgama ideológica autoritaria que prioriza el retorno al viejo orden social anterior a la Segunda República. Este modelo buscaba anular los logros democráticos y sociales republicanos, instaurando una estructura política basada en el control militar, el nacionalismo económico y la subordinación de los derechos individuales a las necesidades del Estado.

Impacto de la Guerra Civil (1936-1939)

Pérdidas humanas y materiales

• Se estima que la guerra provocó una disminución del 4% de la población activa, una cifra superior a las pérdidas de Italia (2%) y Francia (3%) durante la Segunda Guerra Mundial.
• La represión posbélica llevó al exilio de al menos 200,000 personas y al encarcelamiento de 300,000 más. Estas cifras incluyeron a muchos de los sectores más capacitados del país, afectando gravemente el capital humano.
• En 1939, la producción agraria cayó un 20% y la industrial, un 30%. La infraestructura sufrió daños importantes, especialmente en el sistema ferroviario y los medios de transporte.

Financiación del conflicto

• El bando republicano gastó cerca de 750 millones de dólares, agotando 715 millones de las reservas del Banco de España en oro y divisas para pagar al contado sus suministros.
• En contraste, los nacionales recibieron ayuda sustancial de Alemania (430 millones de dólares) e Italia, además de establecer mecanismos como HISMA y ROWAK para intercambiar minerales españoles por armamento alemán.

Economía durante la Guerra Civil

Los orígenes del conflicto

La guerra fue en gran parte el resultado de tensiones acumuladas entre un modelo de sociedad tradicional, representado por grandes terratenientes y sectores conservadores, y los movimientos sociales que demandaban una mayor equidad y reformas democráticas. Si bien las condiciones económicas, como la pobreza rural, jugaron un papel en el conflicto, Barciela señala que la guerra fue también el resultado de un choque de visiones sobre la democracia, la religión y el papel del Estado.

Impacto económico directo

El conflicto dividió al país en dos zonas con economías separadas:

1. Zona Republicana: Se experimentaron procesos de colectivización en tierras y empresas industriales, además de una desorganización generalizada derivada de la diversidad ideológica entre sus fuerzas políticas. Esta fragmentación debilitó la capacidad de la República para gestionar los recursos económicos, agravada por la falta de apoyo internacional y un bloqueo económico que llevó a una caída de la producción y el consumo.
2. Zona Nacional: Aunque comenzó con una desventaja en recursos, la zona sublevada recibió apoyo militar y logístico de la Italia fascista y la Alemania nazi, lo que permitió a Franco consolidar su dominio militar y político. La disciplina militar impuesta por el régimen unificó las fuerzas del bando nacional, permitiendo un manejo más eficiente de los recursos.

Costes humanos y materiales

El conflicto dejó un saldo de cientos de miles de muertos, un 4% de la población activa perdió la vida, y el exilio afectó particularmente a los sectores más capacitados del país. Las infraestructuras quedaron seriamente dañadas, especialmente el sistema ferroviario y los medios de transporte. En conjunto, la guerra tuvo un coste económico desproporcionado para un país ya atrasado.

Primer franquismo: Autarquía y políticas económicas

La política de autarquía

Tras la guerra, el régimen franquista implementó una política económica basada en la **autarquía**, es decir, la autosuficiencia nacional, en un contexto internacional adverso. Esta estrategia se concretó mediante una intensa intervención estatal en todos los sectores económicos, desde la agricultura hasta la industria, con resultados desastrosos.

1. Agricultura:
   • El Estado eliminó las reformas agrarias republicanas y devolvió las tierras a los antiguos propietarios, consolidando el poder de los grandes terratenientes.
   • La creación del Servicio Nacional del Trigo buscó controlar la producción y distribución de alimentos, pero esta intervención generó un colapso productivo.
   • El hambre fue un problema recurrente durante los años cuarenta, agravado por el racionamiento, el mercado negro y la falta de apoyo internacional. A pesar de la crisis alimentaria, España exportaba alimentos a países del Eje como Italia y Alemania.
2. Industria:
   • El Instituto Nacional de Industria (INI), creado en 1941, buscó liderar la industrialización, priorizando la industria pesada y militar. Sin embargo, proyectos como ENCASO, destinado a la producción de combustibles alternativos, fracasaron por su inviabilidad técnica y financiera.
   • La dependencia tecnológica y económica de Alemania e Italia limitó el desarrollo de una industria competitiva. Además, el modelo proteccionista del régimen redujo la eficiencia y fomentó un mercado clandestino que minó los esfuerzos oficiales.

El impacto social de la autarquía

Durante los años cuarenta, el nivel de vida de los españoles se desplomó. Los salarios reales cayeron significativamente, y el consumo de bienes básicos alcanzó niveles extremadamente bajos. Solo a partir del crédito argentino y norteamericano en el último tramo de la década fue posible mitigar ligeramente la situación.

Agricultura: el hambre de los años 40

• La intervención del Servicio Nacional del Trigo (SNT) llevó a un colapso productivo, con precios fijados por el Estado que desincentivaban a los agricultores.
• El mercado negro se convirtió en una fuente clave de alimentos, llegando a representar hasta un 70% del trigo comercializado.
• Mientras España sufría hambre severa, el régimen exportaba alimentos a países del Eje y dependía del crédito argentino y norteamericano para evitar el colapso total.

Industria: fracaso del modelo autárquico

• En 1950, la producción industrial todavía no había alcanzado los niveles de 1935, mientras que países como Alemania, Francia e Italia lograron duplicar su producto industrial tras la Segunda Guerra Mundial.
• Proyectos del Instituto Nacional de Industria (INI), como ENCASO, que buscaba obtener combustibles de pizarras bituminosas, fracasaron debido a costos altísimos y tecnología inadecuada.
• La industria ligera (bienes de consumo) fue relegada, lo que agravó las condiciones de vida de la población.

Condiciones laborales y de vida

• Los salarios reales durante los años cuarenta estuvieron por debajo del 75% del nivel de 1935, y no se recuperaron hasta 1956.
• El consumo de productos básicos, incluido el pan, cayó a niveles dramáticos, y la década de 1940 es considerada como una de las de mayor retroceso en el bienestar de la población en 150 años.

Política monetaria y bancaria

La unificación monetaria tras la guerra civil penalizó a los habitantes de la antigua zona republicana, anulando parte de sus ahorros. La política monetaria quedó subordinada a las necesidades fiscales, lo que provocó una expansión descontrolada de la deuda pública y una elevada inflación. Aunque el sistema financiero quedó bajo un estricto control estatal, la banca privada obtuvo privilegios que permitieron su desarrollo en un contexto de represión económica generalizada.

Hacienda pública

• El gasto en defensa representó un 40% del presupuesto estatal entre 1940 y 1946, relegando áreas como educación e infraestructuras.
• La reforma fiscal de Larraz en 1940 apenas logró recaudar ingresos adicionales, y el sistema tributario se mantuvo regresivo y desigual.
• La inflación fue utilizada como mecanismo de financiación, golpeando especialmente a los sectores más pobres.

Monetaria y bancaria

• Tras la guerra, la unificación monetaria anuló más de 13,000 millones de pesetas en billetes republicanos y depósitos, perjudicando principalmente a los habitantes de la antigua zona republicana.
• El Banco de España fue completamente subordinado al gobierno franquista, permitiendo una emisión de deuda pública que amplificó los efectos inflacionarios.

Comparaciones internacionales

• España tardó 15 años en recuperar los niveles de producción industrial de 1935, mientras que Alemania lo logró en 4 años, Francia en 6 años e Italia en 4 años.
• Entre 1946 y 1950, mientras Italia, Grecia y Yugoslavia duplicaban su producción industrial, España apenas logró un crecimiento del 10%.

Hacienda pública

• El gasto en defensa representó un 40% del presupuesto estatal entre 1940 y 1946, relegando áreas como educación e infraestructuras.
• La reforma fiscal de Larraz en 1940 apenas logró recaudar ingresos adicionales, y el sistema tributario se mantuvo regresivo y desigual.
• La inflación fue utilizada como mecanismo de financiación, golpeando especialmente a los sectores más pobres.

Monetaria y bancaria

• Tras la guerra, la unificación monetaria anuló más de 13,000 millones de pesetas en billetes republicanos y depósitos, perjudicando principalmente a los habitantes de la antigua zona republicana.
• El Banco de España fue completamente subordinado al gobierno franquista, permitiendo una emisión de deuda pública que amplificó los efectos inflacionarios.

Comparaciones internacionales

• España tardó 15 años en recuperar los niveles de producción industrial de 1935, mientras que Alemania lo logró en 4 años, Francia en 6 años e Italia en 4 años.
• Entre 1946 y 1950, mientras Italia, Grecia y Yugoslavia duplicaban su producción industrial, España apenas logró un crecimiento del 10%.