Carlos V (1516-1556)
Carlos V heredó un vasto imperio de sus abuelos:
- De María de Borgoña: los Países Bajos y el Franco Condado.
- De Isabel la Católica: Castilla y América.
- De Fernando el Católico: la Corona de Aragón (incluyendo Cataluña, Sicilia, Cerdeña, Nápoles y las plazas del norte de África).
- De Maximiliano I: Austria, Tirol, parte del sur de Alemania y los derechos al título de emperador.
Política Interior
Durante su reinado, Carlos V enfrentó importantes conflictos internos:
- Guerras de las Comunidades castellanas (1520-1521)
- Germanías del Reino de Valencia (1519-1522) y Mallorca (1520-1523)
Comunidades (1520-1521)
Causas: La necesidad de Carlos de financiar su elección como emperador tras la muerte de Maximiliano I en 1519 provocó el descontento de la nobleza castellana por la salida de recursos y el nombramiento de Adriano de Utrecht, preceptor de Carlos, como regente.
Desarrollo: El asesinato del procurador Rodrigo de Tordesillas en Segovia desencadenó la revuelta. La respuesta de Adriano de Utrecht y el incendio de Medina del Campo radicalizaron el conflicto. Los comuneros formaron la Junta Santa y buscaron el apoyo de Juana la Loca. La sublevación adquirió un carácter social. La derrota de los comuneros en Villalar (1521) y la ejecución de sus líderes (Juan Bravo, Juan Padilla y Francisco Maldonado) pusieron fin al conflicto.
Consecuencias: Carlos V modificó su política, buscando el apoyo de los castellanos, quienes se convirtieron en sus más fieles súbditos.
Germanías de Valencia (1519-1522)
Causas: La amenaza de los piratas berberiscos y la negligencia de la nobleza en sus obligaciones militares.
Desarrollo: La autorización de las Germanías (milicias urbanas) por parte del virrey Chévres, la creación de la Junta de los Trece, la peste y la huida de la nobleza llevaron a la Junta a controlar Valencia. El regreso de la nobleza y los disturbios provocaron la huida del virrey. Las Germanías se extendieron por el reino, pero la lucha social dividió a los sublevados, lo que facilitó la victoria de las tropas reales.
Consecuencias: Una dura represión.
Germanías de Mallorca (1520-1523)
Causas: La crisis económica y el descontento de menestrales y foráneos por la falta de acceso a cargos públicos.
Desarrollo: Las Germanías asaltaron Palma, tomaron el Castillo de Bellver, mataron a sus caballeros y atacaron al clero. La negativa de los agermanados a negociar con la flota real llevó a la toma de Palma por las tropas imperiales.
Consecuencias: Una brutal represión.
Abdicación
Agotado por las constantes luchas, Carlos V abdicó en 1556 y se retiró al monasterio de Yuste, donde falleció en 1558.
Política Exterior
La política exterior de Carlos V se basó en la Universitas Cristiana, un concepto medieval que buscaba la unión de la cristiandad bajo el Papa y el Emperador. Sus principales adversarios fueron Francia, los protestantes alemanes, el Imperio Turco y, ocasionalmente, el Papado.
Guerras contra Francia
Causas: La rivalidad entre Carlos V y Francisco I (1515-1547), las disputas por Borgoña, Navarra e Italia (especialmente Milán).
1ª Guerra: Francia atacó Navarra e Italia aprovechando las Comunidades. Las tropas imperiales vencieron en Bicoca y Pavía (1525), donde Francisco I fue capturado. El Tratado de Madrid, que cedía Milán a España, no se cumplió.
2ª Guerra: Francisco I formó la Liga Clementina. Las tropas imperiales saquearon Roma (1527). La Paz de Cambrai (1529) cedió Milán a España.
3ª Guerra: Sin importancia ni repercusiones.
4ª Guerra: Francisco I apoyó a los protestantes alemanes.
5ª Guerra: Coincidió con la segunda guerra contra la Liga Esmalcalda, sin resultados significativos.
Conflicto contra el Imperio Turco
Solimán el Magnífico llevó a cabo una política agresiva contra Occidente. Tomó Belgrado y venció en Mohacz, donde murió el heredero polaco. Fernando, hermano de Carlos V, fue elegido rey de Bohemia y Hungría. Solimán sitió Viena (1529), pero el asedio fue levantado por las tropas imperiales. Barbarroja, pirata tunecino vasallo del sultán, controló el Mediterráneo Occidental. Carlos V respondió atacando ciudades importantes, pero el conflicto en el Mediterráneo continuó tras su muerte.
Guerras de Religión en Alemania
Lutero fue condenado en la Dieta de Worms (1521). Tras la Dieta de Núremberg (1524), se formaron dos grupos: católicos y luteranos. En 1525, tras la guerra de los campesinos, la nobleza alemana se unió a la Reforma. La Dieta de Augsburgo (1530), convocada por Carlos V para evitar la escisión religiosa, fracasó. Se restableció el Edicto de Worms y se restauraron los bienes eclesiásticos. Los luteranos, a partir de entonces, fueron llamados protestantes. La Liga Esmalcalda (1531) unió a los príncipes protestantes. Carlos V venció a los protestantes en Mühlberg (1547). La Dieta de Augsburgo (1547-1548) otorgó ventajas militares y económicas a Carlos V, pero la cuestión religiosa quedó sin resolver. La guerra continuó (1552-1556). La Paz de Augsburgo (1555) reconoció a los luteranos, sus propiedades secularizadas y el ius reformandi (derecho del príncipe a elegir la religión de sus súbditos).